Un gran número de predicciones posicionan las energías renovables en un lugar destacado ya en las próximas décadas. Una nueva investigación, sin embargo, apunta que tales previsiones son probablemente demasiado optimistas y que es necesario tener precaución al contar con las 'energías del futuro'.
En el Reino Unido la proporción de energía suministrada por fuentes renovables aumenta cada año. En 2017, por ejemplo, las fuentes solares, biológicas e hidroeléctricas produjeron la misma cantidad de energía que se necesitó en todo el Reino Unido en 1958.
El estudio considera que los modelos para el futuro no siempre reflejan los desafíos del "mundo real". Algunas de esas predicciones, por ejemplo, no consideran la transmisión y el almacenamiento de la energía, ni los requisitos de funcionamiento del sistema.
Utilizando datos del Reino Unido, los científicos pusieron a prueba un modelo de generación de energía 100% renovable para el año 2050.
Clara Heuberger, autora de la investigación, apunta que "los modelos matemáticos que desestiman los problemas de operatividad pueden inducir a error a los responsables de la toma de decisiones y al público, lo que podría retrasar la transición real hacia una economía baja en carbono".