Víctor Gobitz,

Una de las demostraciones más claras que este año el sector minero impulsará el crecimiento económico del país es la reciente adjudicación a la empresa Southern Peru Copper Corp. del renombrado proyecto de cobre Michiquillay, que significará una inversión no menor a 2 mil millones de dólares, en Cajamarca, una de las regiones que urge iniciar su pronta recuperación para el bienestar de toda su población.

Este proyecto no solo tiene un enorme potencial para mejorar la situación de Cajamarca sino también podría permitir el desarrollo de otros tres proyectos cupríferos como son Galeno, Conga y La Granja, ubicados en la misma zona, que sumados podrían llegar a producir más de 1 millón de toneladas de cobre en la región.

Con ello, nuestra producción de cobre pasaría de 2.5 a 3.5 millones de toneladas del metal rojo. Pero no solo eso, estos proyectos podrían desarrollarse compartiendo infraestructura y generar una demanda de servicios, energía, construcción de carreteras y modernización no solo en Cajamarca sino también en Chiclayo. Es decir, estas inversiones mineras generarían optimismo en la zona norte del país dinamizando su economía y garantizando el progreso.

Siguiendo con esta línea, vemos que debido a los atractivos precios de algunos metales a nivel internacional, las empresas mineras continúan invirtiendo en el desarrollo de sus operaciones, y ampliando su cartera de exploraciones, como es el caso de Hochschild Mining que ha puesto interés en yacimientos de cobre y zinc.

El precio de este último mineral (zinc) repuntó en 131% desde inicios de enero de 2016 hasta lo que va de febrero, debido al temor de una potencial escasez de inventarios, lo que ha beneficiado a las mineras que se encuentran en nuestro territorio.

Por otro lado, debemos dar cuenta de la seria situación que atraviesa nuestro país en la oferta de profesionales técnicos importantes para el desarrollo de la industria peruana, entre ella la minera. Según un estudio del Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (Sineace) solo 12% de jóvenes peruanos que estudian carreras técnicas concluyen sus estudios. Creemos que es una tarea pendiente hacer seguimiento a esta problemática educativa para garantizar el impulso del crecimiento industrial de nuestro país.

*Presidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).