El gerente del Proyecto Vaca Muerta de la compañía Shell, Maximiliano Hardie, señaló que la compañía aspira a producir 40.000 barriles diarios en 2021 en la formación neuquina.
El ejecutivo remarcó que la petrolera podría alcanzar el desarrollo masivo de Vaca Muerta en dos años.
En ese contexto, precisó que si los resultados son positivos, a fines de este año la empresa avanzará con la construcción de una segunda planta de tratamiento de shale oil en Neuquén.
“Si hay un upside en Lajas, Mulichinco o Los Molles (otras formaciones de la cuenca neuquina), lo veremos en 10 años. Al fin y al cabo, nuestro objetivo es poder invertir y obtener retornos para nuestros accionistas, que son los que financian nuestras actividades. Hoy nuestra prioridad pasa por Vaca Muerta”, dijo Hardie en declaraciones a la revista Trama.
Dentro de la formación neuquina, la compañía está presente en una serie de áreas que despiertan grandes expectativas, como Sierras Blancas, Cruz de Lorena, Águila Mora, Rincón Ceniza, La Escalonada, Coirón Amargo Sur Oeste y Bajada de Añelo.
“Si surgen oportunidades costas afuera o de tight gas, obviamente se las aprovechará. Pero lo haremos sin perder el foco de nuestro trabajo, sabiendo que los grandes volúmenes están en Vaca Muerta”, indicó el ejecutivo.
“Podemos distinguir dos etapas de desarrollo en nuestros proyectos allí, y la primera se basó en la exploración y el estudio de las propiedades de la roca, sin abocarnos tanto a los costos”, precisó Hardie.
“Confirmamos que la roca (en Vaca Muerta) era buena, con datos favorables en términos de volúmenes. Asimismo, los pozos respondieron bien a las fracturas”, dijo Maximiliano Hardie, Gerente del Proyecto Vaca Muerta de la petrolera Shell
El representante de Shell sostuvo que la fase inicial arrojó resultados positivos. “Confirmamos que la roca era buena, con datos favorables en términos de volúmenes. Asimismo, los pozos respondieron bien a las fracturas”, detalló.
La segunda etapa, agregó Hardie, es la actual. “Se basa en la ejecución de pilotos con el objetivo de desarrollar pozos que tengan buenas productividades y sean económicos. Es por ello que empezamos a utilizar los diseños y a trabajar mucho en los costos, tanto en perforación como en fractura”, explicó.
Shell compara los valores obtenidos en los pozos locales con los de Eagle Ford, Permian o Canadá. “Estimamos cuál sería el límite técnico de cada pozo de Vaca Muerta trasladado a otro contexto”, aclaró Hardie.
Por otra parte, adelantó que en un año y tres meses va a estar en funcionamiento el oleoducto del lago Pellegrini. “Nuestro trabajo depende de esa obra, que está a cargo de YPF y Tecpetrol”, subrayó.
“La siguiente etapa –si los precios acompañan y las tendencias mejoran– será llenar esos 12.000 barriles por día para principios de 2019. Si consolidamos lo que venimos aprendiendo, a fines de 2018 tomaremos la decisión de avanzar con una segunda planta de tratamiento, la cual estaría lista hacia fines de 2020. Y para 2021 estaríamos pensando en llegar a 40.000 o 45.000 barriles por día en los tres bloques en Sierras Blancas, Águila Mora y Cruz de Lorena”, dijo.