La Argentina se aleja cada vez más del autoabastecimiento energético. Según datos del Ministerio de Energía, en 2017 se incrementó la importación de crudo, cayó la producción de gas y petróleo local, se redujeron los niveles de “existencias” de hidrocarburos en las Cuencas y disminuyeron las regalías a las provincias.
El economista Alieto Guadani indicó que hay un escenario con energía “escasa, importada y cara”, en medio de un largo retroceso productivo de más de una década, y aseguró que ni la mejora en la producción de no convencionales (34% shale-oil y 42% shale-gas) cubre el déficit actual.
Desde 2015 a esta parte la importación de crudo aumentó 26%. En casi dos años ya se importó un tercio de todo el crudo importado entre 2008 y 2015. Si se compara los tramos enero-noviembre del primer año de gestión (2016) con el segundo (2017), las compras de petróleo extranjero crecieron aún más: 33,8%.
En ese mismo lapso, la cantidad en metros cúbicos de los productos procesados derivados del crudo cayeron 8,2%. En 2015 se procesaron 27.624.596; en 2016 fueron 26.401.220, y el año pasado 25.360.203. En dos años se dejaron de producir 2,2 millones de m3 de petróleo argentino genuinos, sin tener en cuenta el biodiesel, bioetanol o el petróleo importado.
Menos regalías- Al analizar las estadísticas oficiales de hidrocarburos surge que este modelo de alta importación de crudo y baja producción nacional provocó una abrupta caída en las regalías a las provincias. En este caso, los últimos datos disponibles van hasta octubre de 2017.
En 2015 las 10 provincias productoras de petróleo y el Estado nacional recibieron u$s 1280 millones en total. Un año después recogieron u$s 1054 millones y en 2017 fueron u$s 903 millones. En dos años los gobernadores perdieron u$s 337 millones, lo que representó un desplome de 26,5% en las arcas públicas del interior.
Las provincias más perjudicadas fueron Santa Cruz (-69,73%); Neuquén (-34,54%) y Río Negro (-29,17%). De los cinco distritos que más reciben, solo Mendoza mantuvo un nivel de ingresos.
La situación de las regalías por el gas natural es distinta. En primer lugar, el Ministerio de Energía las cuantifica en pesos y no en dólares. Pero además, si bien subieron 206% desde 2015 al 2017 -siempre teniendo en cuenta períodos de enero a octubre, que son los últimos disponibles-, hay una explicación.
En 2015 las nueve provincias gasíferas y el Estado nacional acumularon $2965 millones en regalías. En 2016 crecieron a $6750 millones y al cierre de 2017 acumulan $9071 millones, cuando todavía falta computar dos meses.
Sin embargo, con una producción estable de entre 30 y 31 millones de m3 en cada uno de los períodos de ochos meses durante esos tres años, el incremento de las regalías se explica por una suba del precio y no por un aumento de la actividad. Es que el precio promedio del m3 de gas natural de venta escaló de $680 a $2256, un 231% más.
En 2017 bajó la producción y se cayó el precio del crudo. También hubo una fuerte disminución en la extracción de gas.
La recaudación de Mendoza por regalías petroleras cayó 25% en 2017 y cerró la peor temporada de los últimos diez años. La baja tiene que ver con la variación del precio del crudo y con la lenta recuperación de los niveles de producción.
Según las estadísticas publicadas por la Subdirección de Regalías de Administración Tributaria Mendoza (ATM), en 2017 la Provincia recaudó $ 3.295.627.548 de parte de las empresas hidrocarburíferas, contabilizando tanto el valor percibido por el derecho de extracción de crudo, como el correspondiente la extracción de gas.
En 2016, en tanto, el sector le había pagado a Mendoza $ 3.358.755.562 por el mismo concepto. Teniendo en cuenta esos resultados, se observa una diferencia negativa del 2%, pero si se considera la inflación registrada en ese período, se encuentra que la diferencia negativa es mucho mayor.
De acuerdo a las mediciones de la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza (DEIE), en 2017 se registró una inflación del 24,6%. Es decir, que cada peso que recaudó ATM por regalías el año pasado, tuvo un valor 24,6% más bajo que el que tenía en 2016. Eso significa que la variación entre un año y otro no fue del 2% menos, sino que cayó 21%.
Lo más preocupante, es que la recaudación de 2017 fue la más baja de los últimos diez años. La comparación en pesos podría ser algo confusa, debido a que en algunos períodos no hubo medición oficial de la inflación y resulta imposible saber con exactitud cuál fue la variación real año a año.
Sin embargo, es posible analizar los resultados de la última década si se mide la recaudación en dólares.
Según ATM, desde 2010 a 2014 la recaudación por regalías superó siempre los U$S 200 millones y en algunos casos pasó los U$S 250 millones, contabilizando tanto crudo como gas. Los años más críticos fueron 2007 y 2015, cuando se alcanzaron sólo U$S 178 millones, pero el peor fue 2017, con U$S 175.392.631 (equivalente a los $ 3.295.627.548 mencionados anteriormente)
Si se analiza la recaudación por regalías según su origen, se observa que casi el 90% de lo percibido por Mendoza es proveniente de las operaciones con crudo y apenas 10% es aportado por el negocio del gas.
De acuerdo al balance de ATM, 2017 fue un buen año para el gas, pero fue muy malo para el crudo, lo que explica la caída general.
Puntualmente en petróleo, la provincia sufrió una retracción real del 25%, pasando de $ 3.133.010.713 recaudados por regalías en 2016 a un total de $ 2.929.685.476 recaudados en 2017 (considerando el efecto de la inflación).
En gas la situación fue muy diferente. En 2016 ATM cobró $ 225.744.849 a las empresas por regalías y en 2017 recaudó $ 365.942.072.
Aunque la variación a simple vista es de 62%, cuando se tiene en cuenta el avance del IPC se observa una variación real del 30%. Sin embargo, el buen resultado no alcanza para compensar la fuerte caída de la recaudación de regalías petrolíferas.
Para entender los resultados que dejan las estadísticas de Administración Tributaria Mendoza se deben analizar dos variables: el volumen de producción y el precio del m3 computado para el pago de regalías.
En lo que respecta al crudo, ninguna de las dos variables fue positiva en 2017. Según estadísticas del Ministerio de Energía de la Nación, entre enero y octubre de 2016 se produjeron dentro de Mendoza 3.814.472 m3 de petróleo, mientras que en igual período 2017 se contabilizaron 3.639.269 m3 (5% menos).
La caída del precio promedio ponderado de crudo fue aún más grande en Mendoza. En los primeros diez meses de 2016 el precio promedio ponderado fue de U$S 378,99, mientras que en los primeros diez meses de 2017 fue de U$S 326,85, lo que deja un resultado negativo del 15,85%.
Santiago Fernández Herrero, Director de Hidrocarburos de Mendoza, explicó que la suma de ambos factores fue la que determinó la caída en la recaudación por regalías de crudo.
“Aunque aún no están disponibles las estadísticas del Ministerio de Energía, podemos adelantar que en noviembre y diciembre hubo una recuperación de los niveles de producción. Sin embargo, eso no alcanzó para revertir la tendencia y el año cerró con una caída cercana al 3,5%”, comentó.
Se mostró de acuerdo Jorge Domínguez, Director General de Regalías de ATM, quien recordó los cambios impulsados por el Gobierno Nacional que "ataron" el valor del barril de crudo nacional a la cotización internacional.
“Eso provocó que el precio promedio ponderado bajara considerablemente en 2017 con relación a 2016 y condujo a una inevitable caída de la recaudación”, consideró.
Pese a los malos resultados en la recaudación de regalías petroleras de 2017, hay varios motivos para pensar que la situación puede cambiar en 2018.
Jorge Domínguez explicó que el volumen producido en un mes se computa para el pago de regalías del mes siguiente, por lo que la recuperación registrada en diciembre en la producción de crudo tendrá un impacto favorable en la recaudación por regalías de enero.
“Si se mantiene la tendencia de aumento de producción, tendremos también mejores balances de recaudación”, aseguró.
También es favorable la tendencia del precio internacional del barril de crudo. “Los valores vienen subiendo y si continúa de la misma manera, también favorecerá a una mejor recaudación”, observó.