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Aranguren dixit: Si baja la inflación bajarán las tarifas
01/02/2018

Aranguren dixit: si baja la inflación bajarán las tarifas (?)

ENERNEWS/MINING PRESS/Urgente 24

¿No habrá querido decir que como suben, sube la inflación? El ministro de Energía, Juan José Aranguren, recreó el juego del huevo y la gallina en declaraciones radiales, justo cuando su cartera despachó un nuevo aumento en las facturas de febrero que se anuncia en 18% para los consumos promedio anuales del 90% de los residentes del área metropolitana, que era de 400 kilovatios, pero que trepa al 28% en los medidores que superen ese límite.

Hubiera alcanzado al 18% de los usuarios, tomando el registro de 2017, pero los aires acondicionados seguramente harán subir largamente el porcentaje de los que recibirán el saque mayor. En abril, Edenor y Edesur habrán acumulado, con los incrementos de diciembre y el de febrero 64% para el 90% de los casos, y del 88% para el resto, pero en marzo podrían ser beneficiadas con una resolución modificatoria para resarcirse en 48 cuotas mensuales de lo que perdieron de percibir por haber aceptado aplicar en tres etapas la aplicación de la revisión tarifaria. El INDEC, por las dudas, prometió que desdoblará el índice de precios al consumidor según se ponderen o no los tarifazos.

Las facturas de la luz inauguran febrero con un nuevo aumento, según informó el ente regulador (ENRE): para el 90% de los usuarios residenciales de Capital Federal y Gran Buenos Aires será del 18%; para el 10% de los hogares, del 28%, y para comercios, 15%.

Expresado en kilovatios, el porcentaje más bajo alcanza a los consumos menores a 400 y, a medida que suben, el recargo pasa al 28%, pero dependerá del uso de aire acondicionado y ventiladores que exijan las marcas térmicas de febrero y marzo para que el incremento más alto abarque a más cantidad de clientes cautivos del servicio.  

En una nota publicada en Ámbito, la especialista Silvia Peco explica que “los que recibieron las facturas con vencimiento a mediados de enero y lectura de medidor en los 1ros días de ese mes, pagaron noviembre al precio anterior y diciembre con el aumento del 39% al 47%, pero en el último mes de 2017 la temperatura fue bastante benigna en varios de los días (de hecho la media fue casi un grado inferior a la de diciembre de 2016), por lo cual el uso de aire acondicionado disminuyó, como se advierte por la caída del 3% en la demanda de Capital y el conurbano”. 

De modo que “por tener solo un mes de aumento y un consumo menor al del año pasado, los hogares que pagaron la factura a mediados de este mes todavía no sintieron a pleno el aumento de diciembre”, señala. Pero a no hacerse ilusiones porque agrega que “recién van a pagar totalmente el alza de ese mes los que reciban la factura con lectura de medidor en los primeros días de febrero”. 

Por el mismo motivo, a principios y mediados de abril, los hogares que corresponden a las distribuidoras Edenor y Edesur afrontarán los dos aumentos (el de diciembre y el de febrero) en su totalidad, lo que teóricamente significa un 64% de incremento para el 90% de los casos, y del 88% para el resto.

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) vino registrando los aumentos que fue disponiendo el Ministerio de Energía para la luz, el gas y el agua, lo mismo que los combustibles, todos los cuales se erigieron en indexadores de la inflación, como desde el mismo INdEC se encargaron de dejar en claro, a punto tal que este mes se hará el cálculo con y sin incidencia de las tarifas.

El titular de la cartera, Juan José Aranguren, dio vuelta la tortilla y, al estimar que el incremento esperado para mediados de este año se estima en un 20% promedio, afirmó en diálogo con radio Mitre que “las tarifas van a bajar en la medida que la inflación vaya a la baja”.

Y tras cartón apuntó que “se está subsidiando el 45% y vamos a seguir reduciéndolo para que puedan pagar lo que pueden y los que no puedan hacerlo reciban tarifa social”, con lo cual, la inflación tiene asegurados más aumentos en las facturas de luz y gas para aliviar al Tesoro. Los economistas sacaron cuentas de que el paquete energético participa en un 10% en cada medición.

Dejó una inquietante perspectiva: “Durante mucho tiempo, la Argentina estuvo distorsionada y cuesta corregir esto”, justificó.

“Tenemos que recuperar el sistema energético y lo que se destruyó en 12 años lleva tiempo recuperarlo”, agregó, lo cual brinda una explicación adicional al estiramiento de un año que hizo el gobierno de los objetivos decrecientes de la pauta inflacionaria.

El show del tarifazo

A partir de este jueves, el precio mayorista de la energía en todo el país pasará de $876 por megavatio/hora (o por 1000 kilovatios) en diciembre y enero, a $1.077, lo que representa un aumento del 22,9% en el mes próximo, que se adicionará a la suba del 36,8% aplicada en diciembre.

El subsecretario de Energía Eléctrica, Alejandro Sruoga, especificó que el aumento del precio mayorista de febrero tendrá un impacto del 13% en Córdoba, del 16% para Edelap y del 15% en Tucumán.

Edenor y Edesur suman el 3er aumento que recibe de la revisión tarifaria integral e implica el ajuste por los índices de inflación registrados en el semestre agosto- enero sobre los ingresos que perciben las dos distribuidoras.

Utiliza una fórmula que contempla precios al consumidor, construcción y salarios, y podría ser superior al estimado por el ENRE en noviembre pasado.

Advierte la nota publicada en Ámbito que, como consecuencia, “puede haber todavía una resolución modificatoria o que la diferencia se adicione el 1 de marzo, porque para esa fecha está previsto que Edenor y Edesur empiecen a cobrar a los usuarios en 48 cuotas mensuales, lo que perdieron de percibir por haber aceptado aplicar en 3 etapas el aumento de la revisión tarifaria”.

Aranguren ratificó que como hay errores de inclusión y errores de exclusión va a tomar un tiempo resolverlo. Pero sostuvo que "lo importante es que semestre a semestre vayamos encontrando mejoras en la calidad”, y al mismo tiempo destacó que la concientización  en el consumo también contribuirá a bajar los costos.

“Uno de los problemas de la Argentina es que nunca planificamos nada. Hacemos algo hoy y no prevemos lo que va a pasar en 5 años. Tiene que cambiar, y esto está cambiando”, prometió para, por otro lado, recordar que el Gobierno está “invirtiendo en energías renovables y eso va a permitir tener un costo de generación que será de las dos terceras partes del costo que tenemos hoy”.

Presión, tarifazos y ajuste: las familias argentinas sufrirán más con la llegada de febrero

MINUTO UNO

Catriel Etcheverri

Una familia compuesta por una pareja con dos hijos necesitó en diciembre pasado 16.677 pesos para cubrir sus necesidades básicas según el INDEC y sin tener en cuenta el pago de un alquiler de vivienda o cuarto. Sin embargo el 40% los hogares argentinos tuvieron ingresos inferiores a los 18 mil pesos.

Aunque en plena campaña electoral el ahora presidente Mauricio Macri había asegurado que lo más fácil de su gobierno sería bajar la inflación, la realidad -dos años más tarde- parece haberle demostrado que pecó de confiado o bien que su política anti inflacionaria lejos de está de ser tan efectiva como creía.

A ese complejo panorama que obligó al gobierno a cambiar en diciembre pasado la meta de inflación prevista para este año, febrero promete poner presión otra vez sobre los precios con una nueva serie de tarifazos y las familias deberán ajustarse aún más.

Este jueves comenzará a aplicarse un nuevo aumento en la tarifa de luz; que con la suba de diciembre pasado alcanza un acumulado del 65%.

Además, viajar en colectivo, subte o tren será más caro, así como también la medicina prepaga. Así, se prevé que la inflación en febrero tendrá un piso de al menos dos puntos.

Cuando comienza a prepararse el terreno para las discusiones paritarias a las que el gobierno intenta imponer un techo del 15% sin cláusula gatillo, el impacto de los tarifazos sobre los ingresos familiares es cada más pesado.

De acuerdo con el último informe sobre la Evolución de la distribución del ingreso del INDEC correspondiente al tercer trimestre de 2017, la mitad de los argentinos gana menos de 10.750 pesos al mes. Ese piso se eleva a 12 mil pesos cuando se tiene solo en cuenta a la población ocupada.

El mismo informe advierte que cuatro de cada diez hogares argentinos tienen ingresos menores a los 18 mil pesos, apenas por encima debajo de la Canasta Básica Total (CBT) que midió el INDEC para el mismo período y que se ubicó en los 16.677,44 pesos. Si se tiene en cuenta que la CBT no contempla el pago del alquiler de una vivienda o una pieza de hotel, la proporción de hogares que no llega a cubrir sus necesidades básicas es aún todavía mayor.

Por caso, en la Ciudad de Buenos Aires, la ciudad más rica del país, la situación es sensiblemente más grave. La Dirección General de Estadística y Censo del ministerio de Hacienda de la ciudad de Buenos Aires advirtó que en diciembre de 2017 la CBT porteña se ubicó, para una familia compuesta por una pareja con dos hijos, en 21.525 pesos. De acuerdo con el INDEC la mitad de los hogares argentinos obtiene ingresos por debajo de los 21 mil pesos, menos que la CBT porteña.

Las CBT que miden el INDEC y el gobierno porteño desconocen una dura realidad que viven miles y miles de argentinos: el peso del alquiler sobre los ingresos familiares. En rigor, una familia que debe alquilar una vivienda o un cuarto de hotel para poder vivir junto a su familia deberá tener ingresos muy por encima de esos 18 mil pesos.

En CABA, esa misma familia deberá tener ingresos de al menos 21.525 pesos sólo para acceder a la CBT, sin tener en cuenta un eventual alquiler.

Por caso, los bienes y servicios más básicos en la ciudad de Buenos Aires(alimentos, expensas, luz, gas, agua, transporte, artpiculos de limpieza y de higiene personal, sin tener en cuenta un alquiler) insumen por sí solos 17.741,19 pesos, es decir, el 82,42% de los ingresos máximos de la mitad de los hogares argentinos que asciende a los 21 mil pesos.


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