El Gobierno propondría un convenio colectivo especial para los trabajadores del Yacimiento Carbonífero Río Turbio (YCRT), para reponer a los despedidos que tomaron la planta esta semana.
Recién levantaron la protesta esta tarde para iniciar una mesa de diálogo entre funcionarios del Ministerio de Trabajo, el interventor del YCRT, Omar Zeidan, y representantes de los gremios afectados.
La ronda de reuniones terminará el jueves y los gremios ya prevén una respuesta de la cartera de Triaca: idear una "adenda" al convenio colectivo petrolero, similar a la creada junto al sindicato petrolero para la exploración del shale gas, pero en este caso para bajar los salarios de los empleados de la planta.
"Si llega esa propuesta le vamos a discutir en una asamblea con los empleados. No hay negociación posible si no se mantiene toda la dotación de personal", anticipó a LPO Luis Avedaño, jefe del sindicato de Luz y Fuerza de la cuenca carbonífera, que ya participó de una reunión de la mesa de diálogo.
Hasta hoy se registran 215 notificaciones de despido, pero pronto llegarían a 500. La planta y su ferrocarril tienen 2500 empleados y no producen carbón desde 2015, según los gremios, por falta de interés del Gobierno.
"En 2015 estábamos interconectados al sistema nacional. El año pasado hubo cortes en puerto Madryn que se habrían evitado si estaríamos produciendo y hay una posibilidad de vender 50 mil toneladas a Chile", aseguró Avedaño. Claro, para el Gobierno el tema es a qué costo producir para que rinda.
También participan de la negociación el jefe de la Fraternidad de Río Gallegos, Guillermo Barrionuevo, el Secretario General de ATE, Miguel Páez, y el Delegado Paritario Daniel Castillón y los Secretarios General y Adjunto de la Asociación de Personal Superior, Profesionales y Técnicos (APS) de YCRT, Oscar Sánchez y Pablo Mercado.
Todos tienen reuniones particulares y el jueves habría una conjunta con Zeidán y funcionarios del Ministerio de Trabajo, donde llegaría la propuesta de la adenda. Esta tarde fueron recibidos por Graciela Camaño, jefa del bloque Frente Renovador, quien respaldó su lucha.
"Hoy nos estamos expresando en solidaridad con la gente de Río Turbio, porque nosotros con Massa, al igual que Macri en campaña, dijimos que la mina se sostenía. Nosotros somos coherentes, seguimos pensando que Rio Turbio es desarrollo y soberanía, el que ha cambiado su discurso es el Presidente".
"El gobierno está perdiendo cada vez más credibilidad porque la realidad supera todo. Se podrán comunicar con palabras floridas, podrán bajar el tono de la voz para parecer distintos, pero los condenan los hechos", concluyó Camaño, según La Política Online
A través de su cuenta oficial de la red social Facebook, la diputada provincial por Encuentro Ciudadano, Gabriela Mestelán, consideró que Alicia Kirchner “además de solidarizarse, debe participar de las reuniones (que se llevan a cabo entre el sindicato y el Yacimiento), dado que el kirchnerismo impulsaba la transformación de YCRT en una empresa estatal mixta (provincia-Nación)”. También, la legisladora recordó que “desde hace dos años el nivel de incertidumbre y angustia que viven los trabajadores de YCRT en la Cuenca y en Punta Loyola es inimaginable aunque uno haga el intento de ponerse en el lugar del trabajador y su familia y comprender tanto vilo”.
Por tanto, afirmó que “(el interventor Omar) Zeidán viene cometiendo muchos errores en temas sensibles: nombramientos de personal, contrataciones, gastos de publicidad, ausencia en convocatorias para acordar con los trabajadores. El marketing que se ha instalado sólo maquilla, y como todo maquillaje distorsiona el verdadero estado de las cosas”, despuntó.
Por otro lado, dijo que “la obra de la megausina debería haberse concluido en el año 2012, durante su gobierno. Quiero recordarle al kirchnerismo también que si en 12 años no concretaron la transformación de YCRT en una empresa estatal es porque no convenía a sus intereses de caja. Creo que el kirchnerismo no debiera ni mencionar lo que nunca dio: que es garantía cierta a los trabajadores haciendo que la obra se termine y alcance la producción esperada y necesaria”, sostuvo Mestelán.
Por su parte, el diputado nacional por el Frente para la Victoria presentó un proyecto de resolución en el Congreso por el que pide convocar al ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca, y a su par de Energía, Juan José Aranguren, “para que brinden las explicaciones verbales correspondientes a la actuación de las respectivas carteras ante los despidos masivos en el Yacimiento Carbonífero de Río Turbio”.
En sus considerandos, Vázquez exige que den cuenta del ajuste que “va en desmedro de los trabajadores” y que “involucra el quiebre de las relaciones laborales humanas y de desarrollo de la Cuenca Carbonífera”, publuicó La Opinión Austral.
La diputada nacional Graciela Camaño encabezó en el Congreso una reunión con funcionarios, legisladores y representantes sindicales de los trabajadores de las minas de Río Turbio, quienes mantienen una protesta luego de recibir las primeras 215 notificaciones de despido -a los que se sumarían otras 500-, en rechazo a la decisión de reducir la planta de trabajadores por parte de la administración de Cambiemos. En ese marco, la jefa del bloque de diputados del Frente Renovador les manifestó su apoyo, y destacó la importancia de sostener la mina de Río Turbio “no solo porque es un polo para la región de lacordillera, sino porque es un mojón de soberanía para nuestro territorio”.
La legisladora afirmó "vemos con mucho asombro la cantidad de gente que se viene despidiendo. El Frente Renovador, en el 2013 y 2015 dejó clara su postura sobre la mina de Río Turbio. Creemos que debe ser sostenida en un punto de referencia especial para nuestro territorio”.
“Vemos muchos amigos del Gobierno en negocios de energía eólica y poco o nada de inversión para este tipo de energía como la mina de Río Turbio. No queremos creer que haya intereses inconfesables en algunos funcionarios del Gobierno”, afirmó Camaño.
Miguel Páez, secretario general de ATE, seccional Río Turbio afirmó que “podemos generar el 1% del interconectado nacional y de esta manera darles energía a cuatro provincias. Hoy por decisión del Gobierno se está llevando a un vaciamiento de la mina de Río Turbio, lo que va a terminar con el abandono, el hambre y la miseria de más de 30 mil familias de esa ciudad y de 28 de Noviembre”.
“Por eso queremos solicitar al Gobierno que desista de esta actitud, que ponga en funcionamiento la usina 240, lo quele significaría ahorrar más de $240 M en producción de energía”, agregó Páez.
Finalmente afirmó que “por decisiones delgobierno y complicidad de funcionarios están condenando a dos comunidades”, y agregó que “hoy recibimos el apoyo de Juan Carlos Schmid de la CGT y dirigentes de la región. Hay gente que depende de la producción del carbón, pedimos que el gobierno desista de esta actitud”.
Estuvieron presentes en el encuentro llevado a cabo en el Anexo del Congreso de la Nación, el intendente de Río Turbio, Atanasio Pérez Osuna, el dirigente de ATE Daniel Castellón, de la Asociación de Profesionales y Técnicos, Oscar Sánchez y Pablo Mercado, del Sindicato de Luz y Fuerza, Pablo Navarrete y Luis Abeldaño, de la Fraternidad, Guillermo Barrionuevo y los diputados provinciales Hugo Garay y Dario Mena, el presidente del Concejo Deliberante de Río Turbio, Nicolás Brizuela y el consejal Cristian Trujillo, publicó Parlamentario.
La senadora nacional Cristina Fernández de Kirchner mantuvo este martes una reunión con dirigentes sindicales y políticos de Santa Cruz para analizar la situación de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), en grave conflicto por el despido de 400 personas.
El encuentro se celebró en el Insitituto Patria, al que concurrieron el intendente de Río Turbio, Atanacio Pérez Osuna; el legislador provincial por Río Turbio Darío Menna, y el de 28 de Noviembre Hugo Garay; el diputado nacional Juan Vázquez; el presidente del Concejo Deliberante de Río Turbio, Nicolás Brizuela; y su par de 28 de Noviembre, Cristian Trujillo; el secretario provincial de Trabajo, Teodoro Camino; y el subsecretario de Asuntos Institucionales de Santa Cruz, Mariano Luongo. También participaron Miguel Páez de ATE Río Turbio; Daniel Castellón, delegado paritario; Adrián Campos y Mario Hinding de ATE Río Gallegos; Luis Avendaño y Marcos Navarrete de Luz y Fuerza Río Turbio; Oscar Sánchez y Pablo Mercado del Personal Superior de YCRT; y Guillermo Barrionuevo de La Fraternidad.
En ese marco, se habló del estado de situación que atraviesa Yacimientos Carboníferos de Río Turbio, tras los más de 400 despidos dispuestos por la intervención del Gobierno nacional.
Más temprano, la expresidenta había salido al cruce del presidente Mauricio Macri a través de Twitter, por el anuncio de inversiones de L'Oreal en la Argentina. Sucede que a su regreso al país, el presidente había dicho que gracias a que el mundo volvió a “abrirle las puertas” al país, ahora expandirá su producción en el país. “Hace años no quería invertir un peso en este país”, comentó.
Por eso, a través de Twitter Cristina Kirchner recordó que el 15 de octubre de 2015 estuvo en la planta de L’Oréal en Garín, Escobar, donde inauguraron una ampliación de esa planta luego de una inversión de $100 millones. “Lo recuerdo muy bien porque ese día también entregamos, junto al CEO local de la empresa, el Premio L’Oréal-UNESCO Mujeres en la Ciencia a Andrea Gamarnik, gran científica argentina”, comentó, y en un último tuit, concluyó: “Se puede mentir a pocos, mucho tiempo. Se puede mentir a muchos, poco tiempo. Pero no se puede mentir a todos, todo el tiempo”, informó El Parlamentario.
DIEGO CABOT
Hay un lugar de la Argentina en el que todos los días llega un cheque de 11,1 millones de pesos. Si se apilaran en fajos de 100 pesos, a diario llegarían a la cuenca carbonífera de Río Turbio, 16,5 metros de dinero.
Desde que la tragedia y la desidia se llevaron 14 mineros, la historia del yacimiento de carbón cambió para siempre. Néstor Kirchner llegó entonces a su terruño con promesas y dinero. Luego su esposa y sucesora, Cristina Kirchner, continuó con aquella política. Ambos cumplieron.
El kirchnerismo llenó de dinero y de promesas la cuenca que conforman Río Turbio, 28 de Noviembre y Julia Dufour, un lugar en Santa Cruz que vive de dos actividades centrales: la administración pública y la mina de carbón. Hoy, ambas están en crisis.
La mina de carbón funciona casi marginalmente desde aquel 2004. La producción se cayó ante la falta de un mercado a quién venderle la producción. Era una fábrica de casete en épocas de MP3. Kirchner decidió mantener la producción y para darle sentido, inició la construcción de una centra térmica que consuma el combustible de la mina. De regreso a aquella metáfora, se construyó un radiograbador para que funcionen los casetes.
Existían argumentos, muy atendibles desde la geopolítica, como para justificar esa decisión. ¿Qué hacer con esta población si se decidiese cerrar la mina, clausurar esos 70 kilómetros de túneles y enterrar para siempre las toneladas de carbón que aún están enterradas?
Pero el tema es que a la luz de aquella solución se consumó la corrupción más rancia. A través de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) se canalizó dinero que terminaba en manos de unos pocos. Hoy Julio De Vido y Roberto Baratta están presos por los desmanejos que se dieron a más de 2700 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires. Y habrá más detenciones en poco tiempo.
Durante años se compró silencio con dinero. Todos contentos con sueldos de privilegio y contrataciones a raudal. Se duplicó la dotación y la producción no llegó nunca.
La central térmica tampoco se inauguró nunca. Más aún, se prendió una caldera sólo para que Cristina Kirchner tenga su acto de campaña. Se rompieron varias cosas por aquel capricho electoral.
La nueva gestión decidió preparar la mina para que empiece la producción continua. Pero la central se frenó y jamás se avanzó en la construcción de lo que queda por hacer.
Según la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP), en los primeros 10 meses del año se giraron 11,1 millones de pesos cada día. La nueva administración sabe que la dotación en mucho mayor de lo que necesita y que la central está, al menos, a dos años de poder terminarse.
Ahora bien, el país generó centenares de territorios inviables si sólo se toman los fríos números. La Argentina debería debatir qué hacer con esos lugares mucho más allá de lo presupuestario, y preguntarse qué hacer con una cuenca carbonífera que produce un combustible que no tiene mercado. Decidir qué hacer con las fábricas de casetes en épocas de música digital.
