El convenio de desarrollo conjunto contempla la cesión del 50% del permiso de exploración sobre el área de Bajo el Toro a la petrolera nórdica

La petrolera YPF y la noruega Statoil firmaron este miércoles los acuerdos definitivos para encarar de manera conjunta la exploración y eventual desarrollo del área Bajo del Toro, en Vaca Muerta, en la cuenca neuquina.

El convenio contempla la cesión del 50% del permiso de exploración sobre el área a favor de Statoil, aunque YPF continuará siendo el operador de la misma y conservará, directa e indirectamente, el 50% de participación restante en el permiso, informó a la Bolsa y a la CNV la firma argentina.

Los acuerdos contemplan el desarrollo conjunto de un programa de trabajo en dos fases. En la primera fase, las partes realizarán dos pozos horizontales mientras que en la segunda fase realizarán seis pozos horizontales y la correspondiente infraestructura asociada a los pozos.

Como pago del precio, Statoil abonará a YPF u$s30 millones al momento del cumplimiento de las condiciones precedentes establecidas en los acuerdos y luego, adicionalmente, aportará el cien por ciento de los costos e inversiones que demande el programa de trabajo y el eventual desarrollo del área hasta la suma de u$s270 millones.

Una vez finalizadas las actividades correspondientes a la primera fase de este programa, Statoil tendrá la opción de retirarse del proyecto mediante la devolución de su participación en el permiso y el pago de los pasivos devengados hasta su fecha de salida. En caso que Statoil no ejerciera dicho derecho de salida, una vez finalizadas las actividades correspondientes a la segunda fase del programa de trabajo tendrá nuevamente la opción de salir del proyecto.

"La entrada en vigencia de los Acuerdos se encuentra sujeta al cumplimiento de ciertas condiciones precedentes, las que refieren principalmente a la autorización por parte del Poder Ejecutivo de la Provincia del Neuquén de la cesión de participación prevista en los Acuerdos", cierra el comunicado enviado por YPF a BYMA y a la Comisión Nacional de Valores.