Los pronósticos de un récord de suministro en Estados Unidos en 2018, debido al crecimiento del petróleo shale, podrían llevar a una mayor expansión del diferencial.
Los comercializadores de petróleo tendrán un año difícil en 2018.
La OPEP y sus aliados se preparan para el segundo año de recortes a la oferta a fin de reducir un exceso mundial de suministro, mientras que el aumento de producción estadounidense está amenazando esos esfuerzos. Las tensiones geopolíticas también son un factor importante en el escenario.
A medida que los observadores del mercado petrolero tratan de trazar una trayectoria para el año que viene, prestarán mucha atención a señales que varían desde los tiempos de entrega a contratos de opciones. He aquí cinco barómetros que observar a medida que avance el 2018:
1. La señal del shale. El descuento del petróleo WTI en referencia al Brent cerró a su mayor nivel en más de dos años el martes, como resultado de la explosión de un oleoducto en Libia, que impulsó al crudo de referencia mundial.
Esto sucedió después que el huracán Harvey mantuvo los suministros dentro de Estados Unidos a principios de este año, generando el primer factor para una ampliación del diferencial y frenando las exportaciones de Estados Unidos.
Los pronósticos de un récord de suministro en Estados Unidos en 2018, debido al crecimiento del petróleo shale, podrían llevar a una mayor expansión del diferencial.
“Si obtenemos más shale y petróleo canadiense en la primera mitad del año, y los recortes de la OPEP se mantienen, entonces (el diferencial) debería ampliarse”, dijo Richard Fullarton, fundador del fondo de cobertura de materias primas Matilda Capital Management, con base en Londres.
2. El liderazgo de la OPEP. El crudo Brent entró este año en una fase alcista y estructura de backwardation, en la que el precio de entrega al contado supera el de los futuros, a medida que los recortes de la OPEP redujeron el suministro mundial.
Los futuros a diciembre de 2018 subieron a su mayor prima hasta ahora en relación con el mismo mes de 2019 esta semana, y el diferencial podría expandirse aún más, a medida que los recortes de la OPEP llevan al mercado a un equilibrio el próximo año, según Abhishek Deshpande, jefe de investigación de petróleo en JPMorgan Chase & Co. “Estamos más cómodos con un mercado equilibrado para tomar una mirada de largo plazo de ese diferencial”, dijo Deshpande.
3. Billetes de lotería. Con los riesgos geopolíticos emergiendo en una serie de productores importantes, los fondos han estado ocupados buscando contratos de opciones que podrían beneficiarse de un fuerte aumento en los precios del petróleo.
El contrato de opción más mantenido para el Brent apunta a los US$100 por barril en diciembre de 2018, mientras que los que apuntan a US$80, y que equivalen a 30 millones de barriles hacia el final del próximo año, se comercializaron en las últimas semanas.
Venezuela, Irán y Arabia Saudita encabezan la lista de países que podrían registrar alteraciones que afectarían los envíos de petróleo en 2018, advirtieron a inicios de este mes los analistas de RBC Capital Markets, entre ellos Helima Croft.
4. El agujero de la volatilidad. A pesar de esos riesgos, la volatilidad se ha reducido a su menor nivel en más de tres años en las últimas semanas, a medida que los altos precios sostenidos eliminan algo del ruido en el mercado petrolero.
Con la Organización de los Países Exportadores de Petróleo señalando claramente sus planes para 2018, bancos incluyendo a Société Générale SA esperan ver una reducción continua de la volatilidad el próximo año.
“La decisión de la OPEP de manejar proactivamente el mercado mantendrá la volatilidad plana como un panqueque”, escribió a inicios de este mes Amrita Sen, jefa de análisis petrolero de Energy Aspects Ltd.
5. ¿Cuánto tiempo?. El mercado se prepara para comenzar el 2018 con un número casi récord de apuestas alcistas para el Brent y el WTI combinados, muestran cifras las bolsas.
Esos contratos, que ahora superan a los bajistas siete a uno, han generado preocupación de que el crudo podría ver pronto una fuerte caída liderada por los especuladores.
La posición alcista ha sido “la más grande acción anti bajista que he visto en mis fichas en las últimas semanas”, dijo Torbjorn Kjus, jefe de análisis de petróleo en DNB Bank ASA. Lo difícil es que “no conocemos a este tipo de jugadores. Si quieren tener gran parte de sus activos en materias primas durante los próximos años, entonces no venderán esas posiciones”.