La reglamentación del método de extracción de petróleo no convencional, vía fractura hidráulica, cosechó más apoyos que oposiciones.
El decreto donde quedarán definidos los procesos administrativos y futuros controles para la realización de extracción de petróleo no convencional en Mendoza por el método de fractura hidráulica, más conocido como fracking, se encamina hacia la fase final: la firma del gobernador Alfredo Cornejo.
La audiencia pública que se realizó ayer en la que se puso a consideración la “reglamentación de la evaluación de impacto ambiental para la exploración y explotación de hidrocarburos no convencionales”, se estiró por cuatro horas pero no presentó mayores inconvenientes pensando en el futuro de la iniciativa.
La UNCuyo, bajo la rectoría del radical Daniel Pizzi, asociaciones como Aderpe o el CEM y el Instituto Argentino de Petróleo y Gas, entre otras entidades, concordaron en un todo con el método extractivo y la decisión del gobierno de Cornejo de darle un marco regulatorio.
A ellos se sumaron actores sociales, empresariales y políticos de Malargüe, los empleados petroleros y vecinos malargüinos.
En la vereda opuesta estuvieron los ambientalistas y referentes de Oikos y Farn que dejaron en claro la postura indeclinable de no otorgar “licencia social” al fracking por el peligro latente de contaminación. También mostró su desacuerdo el senador electo del Partido Intransigente, Marcelo Romano.
Al centro de Congresos y Exposiciones de Malargüe asistieron 400 personas y el auditorio se repartió entre una mayoría de presentes a favor del proyecto y no más de 25 en contra.
Como estaba prevista, la audiencia comenzó a las 10 de la mañana con las palabras de apertura del dueño de casa, el intendente Jorge Vergara Martínez quien, en el comienzo, echó por tierra los cuestionamientos que iban a aparecer más tarde sobre el lugar elegido para la audiencia pública.
“Quiero agradecer al gobierno por la realización de la audiencia en el departamento que produce el 67% del petróleo de Mendoza”, afirmó Vergara Martínez.
El paso siguiente estuvo a cargo de la Secretaría de Ambiente y de la Subsecretaría de Energía y Minería, que explicaron los alcances de la reglamentación.
Entre las justificativos que ofreció Emilio Guiñazú, titular de Energía y Minería, aseguró que el fracking no es algo nuevo en Mendoza porque se practica “desde hace más de 40 años” en los pozos de extracción de petróleo convencional.
Una vez finalizadas las exposiciones oficiales, se dio paso a los 77 oradores inscriptos y, sin importar de qué lado estaban, se les otorgó un tiempo máximo de 2 minutos para decir lo que tenían en mente. Cumplido ese lapso, el micrófono se cortaba automáticamente.
Eduardo Moreno, en representación de la UNCuyo, resumió una nota de tres carillas en la que se hizo expreso el apoyo a “un instrumento legal que regule la actividad con la premisa del cuidado del medio ambiente”.
“Saludamos la regulación para que se controle una actividad que es fundamental para desarrollar la matriz energética de la Argentina”, afirmó Fernando Halperín, del Instituto Argentino de Petróleo y Gas.
Desde Oikos, la Asociación Argentina de Espeleología y FARN, contraatacaron cuestionando directamente la realización de la audiencia pública e hicieron público que presentaron los pedidos de nulidad ante la Dirección de Protección Ambiental como así también la Secretaría de Ambiente.
“Presentamos la nulidad por incumplimientos en los procedimientos formales”, tiró Agustín Sánchez, mientras que Carlos Benedetto aseguró que “hay cosas que no cierran”.
En tanto, los integrantes de las asambleas populares, un puñado de la zona y el resto del Valle de Uco o el Gran Mendoza, se enfocaron en criticar al fracking.
“No queremos prácticas inseguras, son altamente contaminantes”, dijo Claudia Freire, una de las ambientalistas.
El senador electo Romano también hizo su intervención y aseguró que se opone al uso de este sistema en la provincia.
Entre los datos que surgieron de la audiencia pública por el tema fracking se destaca que Malargüe es el departamento con mayor producción hidrocarburífera de la provincia y actualmente posee el 50% de la población económicamente activa desocupada.
Para el subsecretario de Energía y Minería, Emilio Guiñazú, “quedó claramente expuesta la necesidad de desarrollar económicamente a Malargüe y el hecho de abrir un nuevo horizonte productivo, como sería el caso de los no convencionales, abre una esperanza”.
Con la audiencia terminada, el paso siguiente será la recopilación de las exposiciones y si “la Secretaría de Ambiente considera que hay fundamentos para modificar el proyecto se hará. Si no, irá a la firma del Gobernador”.
Igualmente aseguró que “esto no significa que va a arrancar mañana. Hay mucho por hacer. Las petroleras tienen que invertir pero ya les estamos generando un marco estable de sus inversiones, que es el primer paso”.
Guiñazú también reconoció que la empresa El trébol es la primera que está trabajando para desarrollar una explotación de petróleo no convencional y “dependerá del resultado (que obtenga) para que las demás se animen a invertir”.
Más allá de la polémica instalada durante 2017, la audiencia pública que se llevó a cabo en Malargüe es el paso que falta al método de fractura hidráulica, o fracking, para tener luz verde y así propiciar, como quiere el Gobierno provincial, la exploración y explotación hidrocarburífera no convencional.
Cumplida la instancia que contempla la EIA (Evaluación de Impacto Ambiental) se allana el camino para que el gobernador Cornejo firme el decreto reglamentario, luego de la prueba piloto autorizada a El Trébol, una de las seis petroleras concesionarias de la provincia con intereses en avanzar en el mega bloque de Vaca Muerta.
En agosto, con aval de la Secretaría de Ambiente, Irrigación y el propio municipio, se había realizado una experiencia de estimulación hidráulica en cuatro pozos petroleros ubicados en el yacimiento Puesto Rojas, en Malargüe.
La reacción de los ambientalistas, con una acción de amparo y acción de inconstitucionalidad incluidos para frenarla, forzó el compromiso de convocar a audiencia pública para definir un marco regulatorio, la forma de legitimar el decreto que el Ejecutivo quiere tener listo para enero de 2018.
“No hay antecedentes de un decreto reglamentario de una ley sometido a audiencia pública. Además, Mendoza será la primera provincia que regulará de principio a fin el proceso de fractura hidráulica, ya que Neuquén sólo lo hace en cuanto al uso del agua”, destacó la directora de Protección Ambiental de la Provincia, Miriam Skalany.
Técnicamente, será el tercer decreto que regula a la actividad hidrocarburífera de Mendoza, en este caso no convencional. Complementa al 437/93 y al 170/08, reglamentario de la ley 5961 de Ambiente.
Pero la pelea a nivel de la Justicia, que comenzó en agosto, aún no termina: según fuentes vinculadas a las ONG ambientalistas que la iniciaron, aún con un fallo inicial a favor del Gobierno, falta que la Corte Suprema se expida con lo cual, de revocarse, el decreto quedaría sin efecto.
Después de la prueba piloto de El Trébol en el yacimiento Puesto Rojas, las petroleras con concesiones para exploración o explotación no convencional en Mendoza esperan el aval para avanzar en el mega bloque Vaca Muerta correspondiente a la Cuenca Neuquina-Sur Mendocina, una extensión que llega aproximadamente al río Atuel.
Son al menos seis las compañías en esa condición. Y existen en total más de 20 áreas concesionadas o por concesionar: entre otras, El Corcovo, Puesto Rojas, Cañadón Amarillo, Valle Grande, Cerro Mollar, Doña Juana y Lomas del Cortaderal, parte de una superficie donde, de acuerdo a estimaciones previas, podrían llegar a invertirse unos U$S 1.000 millones en total. Según mencionó Martín Kerchner, Ministro de Economía, a diario Los Andes, a través de esta audiencia se “buscó garantizar a toda la sociedad que se están haciendo las cosas bien”.
Agregó: “La fractura hidráulica se viene haciendo desde hace años en otras formaciones que no eran Vaca Muerta, pero no estaba reglamentado y no había control. Por ello, a partir de ahora, lo que buscamos es realizar un procedimiento adecuado en donde intervengan distintos organismos, que de hecho sean autónomos, como es el Departamento General de Irrigación, el Municipio de Malargüe y Fiscalía de Estado”.
Es por ello, según contó Kerchner, que se demoró tanto el fracking en Vaca Muerta, ya que no había un protocolo de seguridad y procedimiento. A partir de ahora "todo estará reglamentado y controlado. Es una oportunidad, ya que Mendoza es productora de petróleo por naturaleza y es importante para todos", señaló.
Ambiente tomó parte de los resultados de la experiencia de estimulación en Puesto Rojas, que en el mejor de los casos se extendió por 1 hora y 40 minutos de inyección de vapor de agua caliente para permitir la fractura de roca madre y extracción del petróleo.
Según destaca Skalany, “no se trata de un proceso continuo sino puntual. Hay que entender que es una vez en 20 años de vida útil del pozo”.
Los antecedentes de Puesto Rojas muestran que algunos pozos pasaron de producir 5 m3 a 50 m3 diarios, con una composición de 95% de crudo y 5% de agua, a la inversa de algunas explotaciones de la Cuenca Cuyana donde el rendimiento es proporcionalmente inverso a un costo operativo mayor.
Más allá de lo económico, el anteproyecto del Gobierno contiene estudios previos y medidas de control antes, durante y tras el proceso de fractura, como parte del procedimiento de la EIA.
