Fuga masiva de empresas hacia Estados Undos, el aumento del valor del dólar y más presión sobre los gobiernos locales en temas tributarios, podrían presentarse en varios países de la región.
América Latina podría ver algunos efectos económicos y políticos tras la aprobación de la mayor reforma impositiva de Estados Unidos en las últimas tres décadas.
Entre las repercusiones, se abre un debate sobre una potencial relocalización de empresas multinacionales hacia ese país, para aprovechar la bajada del impuesto empresarial al 21%.
Además, puede aumentar la presión política para que los gobiernos de la región recorten los tributos corporativos siguiendo la misma senda de Washington.
Y si la Reserva Federal de EE.UU. sigue su tendencia de subir las tasas de interés, esto podría revalorizar el dólar frente a las monedas locales y aumentar los niveles de deuda.
¿Cómo puede impactar a las economías de América Latina la nueva reforma tributaria de Estados Unidos?
Según Eric Hershberg, director del Centro de Estudios Latinoamericanos de la American University en Washington DC, la reforma puede tener efectos negativos a nivel regional en el mediano plazo si promueve una tendencia al desequilibrio fiscal en Estados Unidos.
"El desequilibrio genera más inflación y una consiguiente alza en la tasa de interés. Esto puede afectar a las economías latinoamericanas que están altamente endeudadas, tanto deuda del sector público, como deuda del sector privado", le dice Hershberg a BBC Mundo.
"Me parece que este paquete de medidas va a enriquecer a una minoría, reforzando los problemas de desigualdad que ya existen en el país y aumentando las presiones fiscales en el presupuesto".
En cambio, el economista jefe para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, Carlos Végh, piensa que la tasa de interés en Estados Unidos seguirá aumentando el año que viene, al margen de lo que pase con el sistema impositivo.
Al aumentar el costo del crédito en Estados Unidos, se aprecia el dólar frente a las monedas locales. Y ese, aparentemente, será un escenario con el cual deberá lidiar la región en el futuro cercano.
"Yo no veo un impacto directo en el corto plazo de la reforma en América Latina", le dice Végh a BBC Mundo. Aunque en el caso de México particularmente, las consecuencias pueden ser buenas o malas, dependiendo de cómo se mire, comenta el economista.
"No está claro que la reforma vaya a perjudicar a México, porque si aumentan las inversiones americanas en Estados Unidos, es posible que al mismo tiempo las empresas importen más insumos desde México para producir".
Otro de los factores clave de la nueva ley es la reducción de los impuestos a las ganancias corporativas de un 35% a un 21%.
Algunos expertos no descartan una eventual "fuga de compañías" hacia Estados Unidos, especialmente desde México. (Fuente: Taringa)
Ese recorte busca ser un incentivo para que las compañías multinacionales instaladas en la región consideren una relocalización de sus operaciones hacia Estados Unidos.
El gobierno de Donald Trump pretende competir así con varios países de América Latina, donde los impuestos de sociedades bordean el 30%.
Algunos expertos no descartan una eventual "fuga de compañías" hacia Estados Unidos, especialmente desde México.
Pero eso tampoco está tan claro: las empresas tendrán que evaluar si les compensa pagar menos impuestos, pero al mismo tiempo aumentar los costos de producción (incluida la mano de obra).
"Yo creo que México perderá competitividad ante su principal socio comercial, por lo que es cada vez más urgente que nuestro país ejecute una estrategia de comercio internacional más incluyente y diversificada", plantea María Fonseca Paredes, decana regional de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey, en conversación con BBC Mundo.
"Si bien es cierto que estas medidas pueden incentivar el abandono de multinacionales en nuestro país, la mayor urgencia de las fuerzas políticas por ganar votos electorales puede jugar a favor de la creación de más y mejores empleos", agrega.
A diferencia de México, en Colombia se ve menos probable el tema de la relocalización.
"Tenemos muy pocas empresas con la madurez suficiente para relocalizarse en función de la ventaja que ofrece la reducción de impuestos", comenta Alejandro Torres-García, jefe del Departamento de Economía de la Universidad EAFIT de Colombia.
"La reforma provoca un efecto global porque la reducción de impuestos a las empresas genera una presión política y económica en el resto de los países debido a que obviamente tenemos tasas impositivas más altas".
Torres García dice que hay muchas incógnitas por despejar, como por ejemplo, si podría aumentar la demanda por ciertos productos regionales, en caso de que la economía estadounidense adquiera mayor dinamismo.
Pero el punto en discusión está precisamente ahí: si la reforma generará suficiente inversión productiva y crecimiento en Estados Unidos, o si será un espaldarazo a los millonarios, como han planteado la oposición a Trump.
En muchos de los países de América Latina, el tema de bajar impuestos a las ganancias corporativas es particularmente sensible y los gobiernos tienden a ser muy cautelosos.
Impuestos corporativos en América Latina: 39%, Puerto Rico; 35% en Argentina; 34% en Brasil, 34% en Colombia;
30% en México. (Fuente: BBC)
Mientras algunos empresarios y economistas piensan que México debería reaccionar lo antes posible implementando una rebaja impositiva a las empresas, otros argumentan que eso es imposible.
"Hacer una reducción espejo, de la misma magnitud que la de Estados Unidos, no se puede aplicar ni en México ni en América Latina, porque no tenemos espacio debido al déficit fiscal. Nuestros niveles de deuda llegaron al límite", explica el director general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), Luis Foncerrada Pascal.
"Si se hiciera alguna rebaja del impuesto a las empresas, habría que encontrar un impuesto sustituto para compensar la caída en la tributación".
Son distintas las posiciones que han surgido en México: algunos dan por hecho que las firmas ubicadas en las frontera se van a relocalizar en suelo estadounidense, mientras que otros creen que mantenerse en el lado mexicano seguirá siendo más ventajoso.
A medida que pasen los días y los detalles de la nueva ley sean conocidos en toda su extensión, es probable que las empresas y los gobiernos den más señales sobre cómo podría configurarse el nuevo tablero.