El mercado global pasó de unos US$ 4,000 millones por año a fines de 2016 a cerca de US$ 8,000 millones hoy y tiene una magnitud aproximadamente equivalente al mercado del estaño.
Este año, el cobalto dejó atrás a los demás metales, impulsado por la demanda de fabricantes de autos eléctricos como Tesla Inc. Pero como está llegando más oferta al mercado y los precios altos probablemente estimulen la sustitución y el reciclaje, el mercado de ese componente fundamental de las baterías podría resultar más desparejo el año que viene.
A continuación, cuatro temas que llamarán la atención del mercado en 2018.
Como los precios aumentaron más del triple en los últimos 24 meses, el cobalto se transformó en un premio valioso para el puñado de mineras que lo producen a gran escala. El mercado global pasó de unos US$ 4,000 millones por año a fines de 2016 a cerca de US$ 8,000 millones hoy y tiene una magnitud aproximadamente equivalente al mercado del estaño.
Pero el cobalto podría estabilizarse en 2018. BMO Capital Markets prevé un promedio de precios de unos US$68.200 por tonelada frente a cerca de US$ 72,000 hoy, en tanto Glencore Plc y Eurasian Resources Group Plc acelerarán importantes proyectos nuevos en 2018 y 2019.
Como el cobalto se extrae sobre todo como derivado del cobre y el níquel, una subida de precios no tiende a estimular la oferta como pasaría con otros mercados de materias primas. Pero ahora que el cobalto está dando fuertes ganancias inesperadas, los productores harán todo lo que puedan para aumentar la producción.
En particular, la expansión más grande de lo esperado de Katanga, el proyecto de Glencore, al parecer pospondrá una escasez prevista por muchos analistas para cuando el uso de vehículos eléctricos comience a dispararse hacia fines de la década.
Probablemente esto ponga nerviosos a los consumidores de cobalto por la oferta a largo plazo. El jefe de Glencore, Ivan Glasenberg, confirmó que la minera ya está negociando con compradores, entre ellos Tesla y Volkswagen AG, y es probable que esas negociaciones progresen con urgencia el año que viene a medida que las automotrices avancen con sus ambiciosos planes para lanzar vehículos eléctricos al mercado de masas.
Las automotrices en busca de suministros a largo plazo podrían mostrarse más dispuestas a relacionar las ventas con los precios flotantes al contado. En septiembre, Volkswagen solicitó a los productores que proveyeran cobalto a un precio fijo en una licitación de largo plazo, pero luego moderó su exigencia, según personas al tanto del tema.
Las automotrices buscan formas de usar menos cobalto debido a los altos precios, dijo Colin Hamilton, director administrativo de investigación de materias primas de BMO Capital Markets, en entrevista telefónica desde Londres. “La química de las baterías no cambiará de un día para el otro, pero debido al movimiento del precio, sin duda las automotrices se apoyarán en la industria de las baterías para impulsar la sustitución”.
Al mismo tiempo, las empresas de reciclaje tratarán de recuperar más cobalto de las baterías usadas. El cobalto recuperado de las baterías de iones de litio podría llegar a 22.500 toneladas en 2025, frente a 8.700 toneladas en 2017, según Creation Inn, una empresa de investigación con sede en Londres especializada en el almacenamiento y el reciclaje de energía.