Entre los bancos más alcistas se encuentra Goldman Sachs Group Inc., que elevó su pronóstico para el crudo Brent casi un 7% a US$ 62 por barril, argumentando un compromiso mayor al esperado de parte de la OPEP y sus socios.
El petróleo está por anotar su segunda alza anual tras la decisión de la OPEP y sus aliados el mes pasado de ampliar los recortes de producción, en una apuesta por reducir los inflados inventarios. Mientras algunos bancos elevaron sus pronósticos para el precio del crudo en el 2018, otros son menos optimistas.
Entre los bancos más alcistas se encuentra Goldman Sachs Group Inc., que elevó su pronóstico para el crudo Brent casi un 7% a US$ 62 por barril, argumentando un compromiso mayor al esperado de parte de la OPEP y sus socios.
La cifra contrasta con un precio promedio de alrededor de US$ 54 por barril este año. Otro optimista es JP Morgan Chase & Co., que citó los “sólidos fundamentos y el ajustado balance”, así como la voluntad de la OPEP de equilibrar los mercados, como razones para su pronóstico positivo.
Al otro lado del espectro está Citigroup Inc., que advierte del riesgo de que la actual dinámica alcista de oferta y demanda se quede sin impulso, y que un aumento de la producción de petróleo shale en Estados Unidos pueda asustar al mercado.
Para Barclays Plc, el repunte del crudo impulsará a Estados Unidos y otros productores fuera de la OPEP a aumentar su producción en el 2018, ayudando a conducir a un nuevo aumento de los inventarios.
El crudo Brent, referente para más de la mitad del petróleo mundial, ha subido alrededor del 12% este año después de aumentar un 52% el año pasado. Se negociaba a US$ 63.65 el barril a las 3:52 de la tarde hora de Singapur.
Bloomberg mostró más detalles del pronóstico de los bancos para el 2018:
-Elevó su pronóstico para el 2018 para el Brent de entrega inmediata a US$ 62 por barril, desde US$ 58.
-Un compromiso más fuerte al esperado de parte de Arabia Saudita y Rusia para ampliar los recortes de producción, en la reunión de la OPEP del 30 de noviembre en Viena, se citó como el principal argumento para su visión alcista.
-Aumentó su proyección para el Brent en el 2018 a US$ 60 por barril desde US$ 55.
-Los inventarios en la OCDE podrían caer al promedio de los últimos cinco años en el tercer trimestre del 2018, cuando comience una reducción informal del acuerdo de recortes de la OPEP.
-Aumentó el pronóstico para el Brent a US$ 60 por barril desde US$ 53.
-El banco afirma que el “fuerte compromiso” de la OPEP y otros productores con los recortes llevará a que se “normalicen” los niveles de inventarios alrededor del tercer trimestre del próximo año.
-Elevó el pronóstico del Brent para el 2018 a US$ 60 por barril desde US$ 58.
-Los precios del petróleo han permanecido “ampliamente estables, reflejando los sólidos fundamentos y ajustados balances”, dijo el banco. También citó la voluntad de la OPEP y Arabia Saudita para equilibrar los mercados como factores detrás de su pronóstico alcista.
-Proyecta un precio de US$ 54 para el barril de Brent el próximo año.
-El banco mantiene su actual pronóstico para el 2018 sin cambios desde la reducción a US$ 60 en julio, según datos compilados por Bloomberg.
-“Los actuales recortes de producción de la OPEP durarán hasta mediados o fines del tercer trimestre del 2018, pero no hasta finales de año”.
-Mantiene su pronóstico de US$ 55 para el barril de Brent.
-“El actual optimismo de precios impulsará un aumento de la producción fuera de la OPEP por unos 500,000 barriles diarios en el 2018 y 2019”.
Los gerentes de fondos de cobertura han impulsado sus posiciones alcistas en futuros y opciones de Brent en respuesta al cierre del oleoducto Forties, según un análisis de datos regulatorios y de intercambio. Pero el optimismo en Brent no puede ocultar por completo el estancamiento cada vez mayor de las posiciones largas en el resto del complejo petrolero, mientras los precios han detenido el avance y se acerca el final del año.
Los gestores de cartera elevaron su posición larga neta en el Brent en 10 millones de barriles a un récord de 544 millones de barriles en la semana que finalizó el 12 de diciembre.
Las posiciones largas en Brent aumentaron en 8 millones de barriles, lo que fue relativamente modesto dada la paralización total del sistema de oleoductos Forties, mientras que las posiciones cortas se redujeron en 1 millón de barriles.
Las posiciones largas netas en el WTI y la gasolina se redujeron en 8 millones de barriles, con solo el crudo de calefacción subiendo en 3 millones de barriles. La posición larga neta de los fondos de cobertura en gasolina se ha reducido en 26 millones de barriles o 26 por ciento en las últimas cuatro semanas, según Bolsamanía