El ajuste pasa a ser trimestral. Cuáles son los cambios en la fórmula de movilidad y la edad jubilatoria.
El Gobierno busca convertir en ley la reforma previsional en medio de un clima complejo que lo obligó a levantar la sesión en la que Diputados se aprestaba a aprobar el proyecto. Estos son los principales puntos del polémico proyecto
Cambia la fórmula de movilidad que alcanza a más de 17 millones de personas, entre jubilados, pensionados, pensiones no contributivas, beneficiarios de asignaciones familiares y AUH.
En lugar del ajuste semestral, en base 50% a la evolución de los salarios y 50% de la recaudación, que se utiliza actualmente; se utilizará otro conformado 70% por la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC y 30% restante por la variación del RIPTE, un indicador del Ministerio de Trabajo que mide la evolución del salario de los estatales..
Además, en lugar del aumento semestral, se aplicará una actualización por trimestre. En lo inmediato, esto significa que en marzo de 2018 en lugar de otorgarse el aumento semestral de julio-diciembre, que ronda un 12%, se otorgará el aumento de la nueva fórmula de julio a septiembre de 2016, que arroja un 5,7%.
Esto lleva a que en el inicio del cambio de fórmula, hay una merma en los haberes y un retraso de hasta 6 meses en el ajuste de los beneficios. Para 2018 se calcula un “ahorro” para el Estado de casi $ 100.000 millones.
Con la fórmula actual, por ejemplo, a un salario de $ 10.000 le correspondería un aumento aproximadamente de $ 1.200 en marzo de 2018. En cambio, con el proyecto oficial, el aumento sería de sólo 570 pesos.
La quita de $ 630 sobre $ 1.200 (52,5%) es el punto de partida para lo que los abogados constitucionalistas califican como "aplicación retroactiva" que, en su opinión, daría lugar a muchos juicios de “inconstitucionalidad”.
La garantía del 82% móvil se aplicará a quienes al momento de la jubilación hayan reunido 30 años de aportes efectivos. Actualmente esa relación es del 81,8%, por cuanto el haber mínimo es de $ 7.246 y el salario mínimo de $ 8.860. Así, cada vez que aumente el salario mínimo, si la jubilación mínima es inferior al 82%, la Anses ajustará los haberes de los alcanzados por esta garantía.
Quedan excluidos los que se jubilaron por moratoria y a quienes no les correspondió el beneficio de la PBU ( Prestación Básica Universal). De aquí se infiere que quedan fuera de esta garantía las jubilaciones por invalidez de trabajadores que estaban activos y las pensiones por fallecimiento del trabajadores que estaban en actividad que no se calculan en base a la PBU. También los que se jubilaron con más de 65 años, compensando años de aportes.
Los trabajadores en relación de dependencia del sector privado podrán optar por jubilarse a los 70 años, y recién entonces los empleadores podrán intimarlos a que inicien el trámite del retiro jubilatorio. Los estatales quedan excluidos.
Las mujeres hoy tienen la opción de jubilarse a partir de los 60, con 30 años de aportes, y pasa a ser obligatorio a los 65. Si se aprueba el proyecto, podrán jubilarse entre los 60 y 70. Y los varones la opción rige entre los 65 y los 70 años, publicó El Cronista.
El presidente Mauricio Macri encabezará hoy en la residencia de Olivos una reunión de coordinación luego de la frustrada sesión parlamentaria de ayer donde se iba a debatir el proyecto de reforma previsional.
La reunión del Jefe de Estado con los integrantes de la mesa chica del gabinetenacional se producirá a las 11, cuando está previsto que se evalúen las distintas alternativas para posibilitar una nueva convocatoria para tratar la ley luego de los disturbios generados ayer tanto afuera del Congreso como dentro del recinto.
Por la tarde, Macri abordará otros temas de gestión, como los alcances de los trabajos realizados en el Belgrano Cargas, a fin de reducir los costos de la cadena de producción. A las 16, se encontrará con el titular de esa empresa de transporte, Guillermo Fiad, quien detallará las obras realizadas hasta el momento, entre ellas la renovación de 1500 kilómetros de vías para repotenciar la red que conecta al NOA y NEA con los puertos de Rosario y Santa Fe, informó Télam.
Luego de que durante la noche se especulara con la posibilidad de impulsar la reforma previsional por la vía del decreto, se supo que apostarán a lograr de los gobernadores la ratificación del apoyo y llamarán a sesionar el primer día hábil de la próxima semana.
Al cabo de una jornada dramática y violenta, signada sobre el final por las versiones, al caer se despejó el cielo. Cuando la posibilidad de que el Gobierno buscara dar una muestra de autoridad tras haber sufrido un duro traspié en la sesión de este jueves en Diputados, firmando un DNU que podía generar un terremoto dentro y fuera de la coalición gobernante, pudo saberse que se insistirá con la vía legislativa.
Será el lunes, cuando se intente reanudar la sesión que este jueves no pudo siquiera empezar, pero antes buscarán un reaseguro con los gobernadores, que fueron convocados para ratificar acuerdos este viernes a las 13 en la Casa de Gobierno.
A esa instancia se llegó al cabo de la abortada sesión de Diputados, cuando se realizó una reunión entre Emilio Monzó, Nicolás Massot y Mario Negri, quienes acudieron luego a la Casa de Gobierno para analizar con los funcionarios del Ejecutivo los pasos a seguir.
Ahí las versiones son diversas; en el Gobierno se quiso especular con la vía del decreto de necesidad y urgencia y hasta se aseguró que el mismo había sido firmado por todos los ministros y que a las 21 el presidente lo anunciaría por cadena nacional. Finalmente y ante las críticas que hasta dentro de Cambiemos se elevaban, la versión se fue desinflando. Ya se había comenzado a llamar a los gobernadores a sus provincias para convocarlos para este viernes, con el fin de ratificar los acuerdos pactados.
El lunes habrá un nuevo capítulo de esta historia. Se espera que con menos violencia, publicó El Parlamentario.
La 'craneoteca' de la Casa Rosada redactó el Decreto de Necesidad y Urgencia, en los minutos de furia luego del revés que sufrió el proyecto de Reforma Tributaria en Diputados. Había que salir rápido de la derrota política y por ese motivo se creyó que el DNU era una forma que el Presidente de la Nación recuperase la iniciativa. Siempre hay imbéciles cerca de los gobernantes, es una constante de la historia argentina. Pero ocurrieron otros acontecimientos que evitaron el desatino del DNU que iba a terminar inconstitucional, tal como ya ha ocurrido con otros DNU. Por ejemplo, los dichos de Elisa Carrió.
La coalición oficialista Cambiemos fue obligada a levantar la sesión especial para debatir la reforma previsional en la Cámara de Diputados: la violencia en la calle condicionó lo que ocurría adentro. Luego, estaba la denuncia de que el quórum mínimo imprescindible de 129 diputados sentados había sido alcanzado de forma poco clara.
El titular del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, ya había pedido que "se levante la sesión porque se vence el plazo de media hora establecido en el reglamento". La sesión había sido convocada para las 14:00, ninguno de Cambiemos había solicitado la prórroga reglamentaria.
Pero la influyente Elisa Carrió quería sesionar: llegó a pedir a viva voz que se aplicara la tendencia marcada por el Frente para la Victoria durante 12 años en el Legislativo: se sesiona sin importar los plazos.
En el aquelarre, algunos legisladores del interbloque Argentina Federal, que habían dado quórum y que responden a gobernadores peronistas, comenzaron a retirarse del recinto. Así, Cambiemos se quedó sin las 129 bancas que hay que tener a la hora de votar.
La suspensión de la sesión la tomaron entre el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó; el presidente del interbloque Cambiemos, Mario Negri; y la cofundadora de Cambiemos, Elisa Carrió.
Estando Carrió presente, no había que consultar con la Casa Rosada, ya se sabe....
Entonces, la Casa Rosada hizo conocer que habría un Decreto de Necesidad y Urgencia para la reforma previsional, otro desatino.
La Casa Rosada parece no aprender la lección de los DNU que no consiguen superar la sospecha de inconstitucionalidad.
Demasiado rápido la furia gana a algunos funcionarios que se encaprichan y vociferan: "Entonces la sacamos por DNU y se joden".
Pobres, creen que inventaron la fórmula de la Coca-Cola.
De todos modos hubo otra versión de los sucesos que frenaron el DNU.
Aparece en la crónica de Rubén Rabanal en el diario Ámbito Financiero excluye los dichos de Elisa Carrió y adjudica a la Casa Rosada una capacidad maquiavélica de la que Urgente24 duda:
"El Gobierno se encargó con especial esmero ayer, tras la escandalosa caída de la sesión en Diputados, de hacer conocer sus supuestas intenciones de utilizar un decreto de necesidad y urgencia para sancionar así la reforma previsional que el Congreso le había bloqueado. Avisó Marcos Peña que ese DNU estaba, inclusive, firmado por todo el acuerdo de ministros que exige el artículo 99 inciso 3 de la Constitución, pero que había quedado guardado en "carpeta". Fue toda una pieza de literatura de terror político que logró espantar a los gobernadores del PJ. Rápidamente, comenzaron a llamar a los teléfonos de la Rosada. Fue una "bomba" que explotó encima de las provincias y que, de concretarse, hubiera tenido efectos devastadores para el Gobierno y pero sobre todo los peronistas territoriales que esperan los fondos que les caerán por estas reformas para poder nivelar cuentas.
Conviene repasar el porque de tanto pánico en el PJ: si el Gobierno lanzara la reforma por DNU obligaría al peronismo a romperse, sin duda, al debilitarse los gobernadores acuerdistas frente a un kirchnerismo irracional como el que Emilio Monzó debió soportar en el recinto de Diputados. La ganadora de ese round sería sin dudas Cristina de Kirchner que, como regalo colateral, vería blanqueado todo su historial de decretos de todo tipo sin basamento constitucional.
Hay otro punto más duro aún para los caciques provinciales: un DNU hubiera puesto en marcha la reforma previsional, pero el caos político y social sobreviniente a esa medida tendría como efecto inmediato la paralización de la votación de las reformas tributarias, el acuerdo fiscal con las provincias y el Presupuesto Nacional, todos temas sobre los que los gobernadores tienen un interés supremo.
Con el DNU "en carpeta", entonces, arrancaron ayer las negociaciones con los gobernadores del PJ para rearmar las condiciones para una votación. Uno de los mas interesados en ese ejercicio es Miguel Pichetto, que ya puso los votos del peronismo el Senado para aprobar la reforma y que ahora no puede quedar pagando, sobre todo con la expresidente alardeando institucionalidad (es el papel que siempre jugó en el Senado a pesar de hacer votar indigeribles delegaciones de facultades a favor de su marido presidente) desde su nueva banca. (...)".
En cambio, el enfoque de Urgente24 y las otras crónicas sí mencionan el límite que Elisa Carrió supone para la Casa Rosada. Carrió se empeña, y lo consigue como no puede lograrlo la UCR, hacerle sentir al PRO que Cambiemos es un cogobierno.
Martín Torino, en el diario El Cronista Comercial, recupera lo de Carrió:
"(...) El funcionario justificó el revés legislativo en que "una minoría" impidió el "diálogo democrático" y que el Gobierno está legitimado por una mayoría que votó un cambio en octubre.
En esa línea, llegó a tildar a los diputados kirchneristas de "piqueteros" y repudió "la violencia de los grupos minoritarios que intentan impedir el normal funcionamiento de una institución democrática". Ante ese escenario, que pone en riesgo el funcionamiento del Congreso, Peña sostuvo que "no van a entrar en el juego de la provocación". En consecuencia, el Gobierno evaluó superar la instancia parlamentaria mediante un DNU.
Pero con el correr de las horas, esa medida pasó de ser "segura" a "posible", según altas fuentes. En el medio, el kirchnerismo salió a cuestionarla con los tapones de punta. Luego la CGT alertó sobre retomar el llamado al paro si se concretaba el decreto.
El riesgo mayor para Cambiemos, no obstante, lo expuso la amenaza de Carrió que castigó duramente esa posibilidad. "No vamos a romper Cambiemos", respondió un funcionario de la Casa Rosada ante el temor de que se aleje Carrió.
En ese marco, el Ejecutivo comenzó a evaluar otras alternativas. La más factible mencionaba anoche la idea de convocar a una nueva sesión para el lunes en la búsqueda de reunir el consenso necesario para sancionar la ley. Otras posibilidades eran patear la discusión para después de diciembre, por temor a un escenario de mayor conflictividad social cerca de los actos por el 19 y 20 de diciembre. Y finalmente la alternativa del pago de una compensación para los jubilados. (...)".
En el diario Clarín, Guido Carelli Lynch agrega elementos a esta 2da. versión:
"Mauricio Macri evaluó promulgar un Decreto de Necesidad y Urgencia para avanzar con la reforma previsional que el oficialismo no pudo votar en Diputados. El texto ya estaba listo. Incluía, además de la nueva fórmula para calcular las jubilaciones y el 82% móvil para los beneficiarios que cobren el haber mínimo, una compensación a pagarse en marzo por el desfasaje que perderían los jubilados por la nueva ley. Sobre el final de la noche, sin embargo, las espadas políticas y legislativas del Gobierno confirmaron a Clarín que el oficialismo volverá a intentar votar la propuesta el lunes en Diputados.
Para avanzar. el Gobierno citó para hoy a gobernadores y diputados opositores en la Casa Rosada. En el oficialismo quieren que antes de la sesión del lunes los mandatarios den un apoyo directo a la ley.
El decreto que por ahora no fue y que firmaron casi todos los ministros quedó en suspenso. Solo falta la rúbrica del Presidente. El Jefe de Estado incluso pensaba grabar un video con un mensaje -una virtual cadena aunque no institucional- en el que explicaría su decisión a la ciudadanía, pero dio marcha atrás. Parte de esa decisión tiene nombre y apellido: Elisa Carrió. (...)".
Laura Serra, en el diario La Nación, también adhiere a esta versión:
"El Gobierno vivió ayer una de las jornadas más complicadas y tensas desde que Mauricio Macri asumió la presidencia, hace dos años. Presionado por el caos y la violencia que se adueñaron del interior y de los alrededores de la Cámara de Diputados, el interbloque Cambiemos levantó la sesión en la que pretendía convertir en ley la reforma previsional que impulsa el Gobierno. El oficialismo, que responsabilizó a la oposición de boicotear el debate, convocará este lunes a una nueva sesión.
"Vamos a convocar mañana al mediodía [por hoy] a una mesa de diálogo con los gobernadores del PJ y sus diputados para que ratifiquen su apoyo a la reforma previsional, como ya lo hicieron en el Senado y al suscribir el Consenso Fiscal", anticiparon anoche encumbradas fuentes legislativas.
Eso sí: en paralelo, el Gobierno instrumentará, a pedido del interbloque Cambiemos y por vía de un decreto o una decisión administrativa, una compensación monetaria por el cambio de la fórmula de actualización de los haberes jubilatorios. Esta modificación -que iba a comenzar a aplicarse en marzo próximo- es el principal motivo de rechazo al proyecto del Gobierno, ya que redunda en un menor aumento en los haberes que perciben jubilados, pensionados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH).
De esta manera, se echó por tierra la posibilidad de aplicar la reforma por decreto de necesidad y urgencia (DNU), idea que circuló en la Casa Rosada y que fue duramente criticada por Elisa Carrió (Coalición Cívica) en su cuenta de Twitter.
"Tenemos que construir nuevamente las mayorías con los gobernadores del PJ; el anuncio de una compensación ayudaría a descomprimir la situación", confiaban en el oficialismo. En tanto, la CGT suspendió la convocatoria a un paro y movilización originariamente previsto para hoy. (...)
Pasadas las 14.30, con un quorum estricto de 129 diputados, el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, dio comienzo a la sesión; estaban sentados en sus bancas 106 legisladores de Cambiemos y 23 diputados del interbloque Argentina Federal, del interbloque Socialdemócrata -que preside Martín Lousteau- y del Frente Cívico de Santiago del Estero.
Furiosos, legisladores del kirchnerismo bajaron raudamente hacia el estrado de presidencia e increparon a los gritos a Monzó. En vano, el presidente de la Cámara intentó retomar la conducción de la sesión; llovían los insultos y los gritos. Monzó se acercó a las bancas de Mario Negri, jefe del interbloque, y de Carrió. Los tres llegaron a una conclusión: en ese clima era imposible debatir y difícilmente reunirían la mayoría para aprobar la iniciativa. (...)".
Elisa Carrió fue motivo de debate en Twitter, en especial luego de que el periodista Nelson Castro advirtiera, por la pantalla de TN, que Mauricio Macri debía retroceder con el DNU porque pondría a Cambiemos en apuros, y citó el triste recuerdo del abandono de 'Chacho' Álvarez de la Alianza, inicio del derrumbe de Fernando De la Rúa (ejemplo que provocó un duro ataque de los trolls y militontos macristas a Castro).