Ricardo N. Alonso*

La naturaleza en Salta ha sido pródiga con los recursos del suelo y del subsuelo. El suelo brinda viñedos de altura, tabaco, caña de azúcar, soja, cítricos y un sinfín de cultivos de acuerdo a las características fisiográficas y agroecológicas del territorio. El subsuelo es rico en minerales a occidente y en hidrocarburos hacia oriente.

Salta supo ser una potencia gasífera y contó con un yacimiento de clase mundial como Campo Durán. Las reservas y la producción hidrocarburíferas cayeron en forma alarmante en la última década por cuestiones de análisis múltiple que desincentivaron la exploración. Todavía quedan recursos potenciales intonsos que sumados a los hidrocarburos no convencionales necesitan ser puestos en valor. Salta y el país precisan de esos recursos energéticos que requieren de la sinergia de todos los actores para lograr un crecimiento sostenido y sostenible.

De igual manera, el occidente de Salta es rico en minerales. Especialmente en la Puna se han descubierto y explorado depósitos mineralizados de cobre, oro, molibdeno, plata, uranio, plomo, tierras raras, boratos, litio, etcétera. Tenemos grandes yacimientos de cobre como los que explotan en Chile del otro lado de la frontera. Taca Taca, Lindero, Río Grande, Samenta, Santa Inés, Inca Viejo, son algunos ejemplos. Poseemos litio en salmueras y también litio en rocas (pegmatitas).

Al presente se desarrollan proyectos de litio en salmueras en los salares de Hombre Muerto, Diablillos, Ratones, Centenario, Pozuelos, Pastos Grandes, Tolillar, Pocitos, Rincón, Arizaro, Río Grande, Llullaillaco, Pular, Incahuasi, entre otros. Una de las buenas noticias es que en su mayoría el litio se encuentra en salmueras profundas, densas e híper concentradas en sales, con lo cual su explotación no afecta recursos de agua dulce. Poner en marcha el potencial minero de Salta puede significar el despegue económico de la provincia.

El efecto disparador que tiene la actividad minera, con el concurso de miles de empresas proveedoras de servicios, podría por sí solo cambiar la matriz económica provincial. Ello depende de muchos factores endógenos y exógenos, pero dado que los recursos del subsuelo pertenecen a las provincias, Salta y los salteños están en el centro del escenario. Está demostrado que los recursos deben ser aprovechados por la generación que les corresponde para generar riqueza presente y futura.

Como sostenían los grandes estadistas no se concebía como riqueza lo que estaba bajo tierra sino lo que se había extraído. Apostemos en positivo al crecimiento económico de Salta, en todas sus vertientes productivas, en orden a mejorar la calidad de vida de todos y cada uno de los salteños.

* Doctor en Geología