La compañía minera desvinculará al 3% de su dotación actual, lo que incluye a supervisores, operadores y mantenedores. Escondida justificó la medida para cumplir sus actividades “de manera segura y sustentable en el tiempo”.
Si alguien pensaba que los despidos masivos en las grandes compañías mineras ya habían quedado atrás, dado el repunte que ha experimentado el precio del cobre durante el año, Minera Escondida confirmó este miércoles que los ajustes en las empresas productoras, lejos de terminar, continúan.
A través de un comunicado, la empresa informó este miércoles que se encuentra implementando un “plan de racionalización” que significará nuevos despidos en la compañía, en medio de ajustes en sus procesos productivos.
“Minera Escondida ha implementado un plan de racionalización que afecta alrededor del 3% de su dotación, lo que equivale a cerca de 120 trabajadores”, confirmó la empresa en el comunicado.
La firma detalló que las desvinculaciones –que incluirán a supervisores, operadores y mantenedores – forman parte de una evaluación que realizó para garantizar el cumplimiento de sus “actividades de manera segura y sustentable en el tiempo”.
Este plan de racionalización de Escondida llega a casi ocho meses del término de la prolongada huelga legal que afectó a la minera por 43 días entre inicios de febrero y mediados de marzo del presente año.
Cabe recordar que la movilización de los trabajadores se levantó sin acuerdo con la empresa, pues sólo aceptaron deponer la huelga al decidir extender el contrato vigente por otros 18 meses, por lo que las partes deberán volver a sentarse a negociar a mediados del próximo año.
Pese a la huelga, la producción de la mina operada por BHP logró recuperarse, creciendo un 23% interanual al tercer trimestre, favorecido por proyectos de expansión y una mejor ley de mineral.
