Es que esa compañía estadounidense, una de las principales industrias de especialidades químicas, desde el 2016 lleva adelante con Bolland Minera los derechos exclusivos de exploración y explotación de litio en el Salar de Antofalla, donde murieron en las últimas semanas cientos de flamencos rosados en el lugar, en tanto otros migraron para terminar sus días en el valle central de Catamarca, lejos de su hábitat.
Hacia finales de septiembre de 2016 La compañía Albermarle Corporation cuya sociedad con nuevo nombre en la Argentina se formalizó el 28 de febrero de 2017 bajo la denominación de Albermale Argentina SRL(CUIT 3071559108-8) adquiría los derechos exclusivos de exploración del Salar de Antofalla en Catamarca, que cuenta con el potencial de litio más importante del país, para lo cual prometía invertir entre 8 y 12 millones de dólares anuales.
Por aquel entonces la compañía daba a conocer en un comunicado, que el salar tiene el potencial de ser uno de los más importantes de la Argentina.
"Nuestra empresa cuenta con la experiencia de más de 80 años en el desarrollo de yacimientos de litio en el mundo, lo que nos permite confiar en que la exploración de Antofalla tendrá resultados positivos", destacaba John Mitchell, presidente de la Unidad de Litio y Materiales Avanzados de Albemarle.
"En una primera etapa", anunciaba, "se realizarán estudios de viabilidad y factibilidad técnica para la explotación de litio. La compañía estima que representará una inversión de entre u$s 8 millones y u$s 12 millones anuales". Para obtener los derechos, Albemarle se asociaba con Bolland Minera, una firma local de servicios petroleros que desde 1997 cuenta con una división de minería focalizada en yacimientos mineros de bentonita sódica natural y sulfato de sodio. Además, posee yacimientos propios en el departamento de Añelo en la provincia de Neuquén.
El informe de la compañía da cuenta que, Albemarle está entre los mayores productores de litio del mundo, con una participación de 33% en el mercado global. entre los antecedente figura que en agosto de 2016 , había sellado un acuerdo con la china Jiangxi Jiangli New Materials para comprar una planta de hidróxido de litio y otra de carbonato de litio, lo que según estimaciones de la industria le permitirá ganar cerca de otro 5,5% de participación de mercado, alcanzando alrededor de 38,5%.
Pero uno de los mayores objetivos estaban centrados en Catamarca, ya que la adquisición de esta operación también permitirá ampliar la operación de la compañía y alcanzar una producción más grande que la que existe actualmente en Chile. El litio es el material base para el almacenamiento de energía de los dispositivos móviles –como teléfonos celulares y tablets– y también se está comenzando a usar en baterías en otras industrias como automotrices. Para la compañía, la meta es capturar el 50% de la nueva demanda de carbonato de litio en los próximos años.
Albemarle ya opera en Chile, en el salar de Atacama, a través de la firma Rockwood, junto a su competidora SQM, compañía que recientemente ingreso a la Argentina.
Todo este cuento de hadas financiero, tiene un final trágico para la ecología del suelo catamarqueño, es que como pasó en su momento con la explotación a cielo abierto de La Alumbrera, y viene sucediendo con FMC y su explotación de litio en Antofagasta, está haciendo estragos ahora con Albermale en el Salar de Antofalla, las especies coloridas de flamencos con sus aguas contaminadas y ciénagas en extinción produjeron en las últimas semanas la muerte de ciento de estas particulares aves.
Algunas migraron en busca de aire puro y aguas limpias como así también alimentos, lo que no sabían es que tan solo ese era su sitio, otras se dejaron morir en el lecho de lo que antes era un paisaje único y ellas sus protagonistas obligadas. Pobladores y organizaciones protectoras de la naturaleza, ya preparan su estampida de repudio a estas empresas que solo buscan el lucro, sin importarles el daño a la naturaleza, la especie humana y animal.
Muy pronto siguiendo el protocolo anual Las direcciones provinciales de Biodiversidad y Bosques Nativos, dependiente de la Secretaría de Estado del Ambiente llevarán a cabo el correspondiente monitoreo, que tiene como objetivo relevar datos sobre las poblaciones de flamencos en la zona de la Puna y Alto-andino Laguna Blanca, Pabellón, Vega Diamante y Vega del Hombre Muerto, Caro, Archibarca, Salar de Antofalla, Aguas Dulces, El Peinado y San Francisco todos pertenecientes al territorio catamarqueño. seguramente deberán informar sobre la mortandad y prácticamente total desaparición de esta especie a manos de probablemente Albermarle Argentina SRL & Bolland Minera.