Los equipos profesionales del CEDyAT participaron en el seminario sobre desarrollo sostenible de hidrocarburos no convencionales entre Estados Unidos y Argentina que se efectuó en uno de los auditorios de la torre del Banco Provincia del Neuquén (BPN).
La actividad es auspiciada por la Universidad Estatal de Pennsylvania, a la cual pertenece el "Centro Marcellus", y el Departamento de Estado de los Estados Unidos.
En los diálogos con los expertos internacionales CEDyAT
Para la Unidad de Vinculación Tecnológica referente del Sector Público, la explotación de Vaca Muerta viene acompañada de nuevos desafíos y riesgos en la protección del medioambiente. La experiencia en Estados Unidos, el país con mayor avance en el desarrollo no convencional, sirve como referencia a la hora de estudiar las leyes y regulaciones.
El mundo se dirige indefectiblemente hacia una energía sin hidrocarburos. Es decisión de las principales potencias mundiales, apremiadas por la voluntad creciente de sus ciudadanos, que consideran los gases de combustión de los fósiles como causa principal del calentamiento global generado por el hombre.
¿Cuándo y cómo se producirá este hecho trascendental que obligará a cambios profundos en las industrias, principalmente petrolera, automotriz y bélica y al replanteo de costumbres, negocios, relaciones geopolíticas e hipótesis de conflictos? En los medios y organizaciones especializadas se manejan distintos plazos para el deadline del consumo de combustibles de origen fósil -carbón, petróleo y gas natural-, plazos íntimamente relacionados con los desarrollos tecnológicos asociados para producir sustitutos que funcionen. Seguramente, habrá un proceso de transición durante los próximos 50 a 70 años, es decir, antes de que termine este siglo.
Durante ese período habrá un proceso de electrificación creciente de la matriz energética en el que se irá sustituyendo la combustión en la industria, en la calefacción y en el transporte. Habrá una caída acentuada del uso de carbón, algo menor en derivados del petróleo, y existirá un vertiginoso crecimiento del gas en los próximos 30 años para reemplazar los anteriores y producir la electricidad complementaria a la renovable, que, como se sabe, es de funcionamiento intermitente: cuando no hay viento o sol, no funciona.
Este proceso de crecimiento acelerado del gas natural, combustible protagonista en la transición, luego decaerá hasta dar por finalizado el extenso ciclo de 200 años de combustibles fósiles.
El objetivo de estos intecambios con Centros de Gestión es generar asistencia técnica cruzada entre EE.UU. y Argentina referida a los problemas y consecuencias que el desarrollo del gas no convencional plantea al paradigma energético que ambos países están experimentando. Se busca generar conocimientos prácticos sobre las tecnologías de extracción, cuidado del ambiente, preservación de los recursos hídricos y planificación sostenible de los territorios afectados a la explotación hidrocarburífera.
En EE.UU., la EPA (Agencia de Protección Ambiental) supervisa el cumplimiento de estándares federales mínimos en términos de agua ambiental, mientras que los estados tienen requisitos adicionales para la construcción y operación de pozos. La EPA exige a las operadoras que inyecten el líquido de retorno en los pozos sumideros y prohíbe su descarga en cuerpos de agua de superficie, como ríos o lagos. Lo mismo se exige en Neuquén.
Entre los panelistas extranjeros se encontraban Thomas Murphy, director del Centro Marcellus; Dave Yoxtheimer, hidrogeólogo del mismo centro académico; Ross Pifer, profesor en la Escuela de Derecho de Penn State; y Jenna Schroeder, gerente de Programa de la Oficina de Recursos Energéticos del Departamento de Estado de los Estados Unidos.
Por estas razones, resulta importante para todos los expertos argentinos que participaron del encuentro porque se nutrieron de la experiencia de los Estados Unidos para saber cómo ese gigante petrolero desarrolló la formación no convencional Marcellus, similar a la neuquina pero en Estados Unidos.
La formación Marcellus, nombre que fue establecido por la villa que la antecede, es la segunda reserva en importancia de gas natural no convencional de los Estados Unidos. Está ubicada en la costa este del país, en el estado de Nueva York, y se trata de un punto de desarrollo y abastecimiento energéticos.
Finalmente, "Vaca Muerta tiene un enorme potencial para la obtención de gas y cuenta con importantísimos recursos que serán la clave también para ampliar económicamente con equilibrio territorial esta zona alejada de la Patagonia" manifestaron los expertos del CEDyAT.