Barrick y Cisco incorporan nuevos sistemas basados en sensores que posibilitará una minería sea más segura, más limpia y más eficiente.
A unas setenta y cinco millas de la ciudad de Elko (Nevada- EE.UU.) está teniendo lugar el experimento más ambicioso de la industria de la minería de oro para modernizar la excavación y extracción de oro. Barrick Gold Corp –de la mano de la tecnológica Cisco Systems Inc.- ha desplegado enormes pantallas e hileras de ordenadores para analizar los datos recopilados a través de miles de sensores capaces de registrar, virtualmente, toda la actividad en y alrededor de la gran mina subterránea de Cortez.
El objetivo declarado de este despliegue tecnológico no es otro que –valiéndose de estas innovaciones desarrolladas en Silicon Valley- lograr extraer más oro, a precios más bajos, y, al mismo tiempo, reducir los accidentes y la contaminación asociada a la explotación minera. Para John Thornton, presidente ejecutivo de la empresa minera, con esta iniciativa “literalmente, cada aspecto del negocio debe cambiar”.
El año pasado, el equipo de Barrick construyó este centro de operaciones en Cortez para conectar la mina con sensores y Wi-Fi subterráneos, aumentar el uso de equipos y vehículos de control remoto e incorporar un software llamado C0dem1ne sobre el que operar y desarrollar esta idea. Desde entonces, los costos de excavación en la mina subterránea Cortez – que cuenta con 1,300 trabajadores- han caído de los 190 millones de dólares por tonelada hasta los 140, para terminar este presente año con una estimación próxima a los 50 millones.
El Director de Operaciones Richard Williams explica el procedimiento del nuevo sistema, destacando sus ventajas. Los nuevos sensores rastrean cuántos pernos dispara un trabajador determinado cada hora y cuántos baldes de roca muerta mueve su compañero de equipo. Así a nivel micro, el software de análisis de la mina dice a los gerentes qué trabajadores tienen bajo rendimiento y si esto se debe a un error del empleado –motivado por la fatiga, por ejemplo- o por estar frente a un tipo de roca especialmente difícil de manejar.
A un nivel macro, todos esos datos alimentan los informes a nivel ejecutivo sobre la producción general, pero también brindan a los trabajadores la información necesaria para sugerir cambios sobre la estrategia de extracción que pueden realizarse en cuestión de horas en lugar de en días o semanas. De la misma forma, los mineros pueden usar dispositivos móviles conectados a Wi-Fi para marcar una determinada sustancia química en los casos en que se está agotando más rápido de lo esperado.+
Si bien el sistema trataría de descubrir el motivo oculto a primera vista, también generará una lista de posibles consecuencias, alertando a los actores involucrados de los previsibles riesgos. Esta aplicación, por ejemplo, tendría mucho sentido en la explotación de Barrick en Argentina que se ha visto afectada por presiones y críticas de funcionarios locales y de la opinión pública general por derrames repetidos de solución de cianuro. El nuevo sistema permitirá el monitoreo en tiempo real de la calidad del agua en la explotación.
Otras posibilidades que ya están teniendo lugar en la mina de Cortez afecta a la logística empleada para optimizar la ruta de los camiones –optimizando la inversión en combustible- y la reasignación de los mineros para maximizar su esfuerzo donde mejor sean requeridos. El software C0dem1ne trabaja ininterrumpidamente a diferencia del ser humano, que necesita horas para descansar y comer aunque no faltan voces escépticas que señalan si este nuevo software de Barrick realmente puede superar la experiencia y labor de los profesionales humanos actuales.
Mark Mills, especialista en análisis de tecnología energética en el Instituto Manhattan lanza la siguiente pregunta, “¿es mejor gastar 100 millones de dólares para mejorar una herramienta ya probada como eficaz o apostar por invertirlos en algo nuevo aún sin probar?” Pues lo veremos en el futuro porque ambas visiones están en el mercado. Otras compañías mineras, incluida la principal rival de Barrick, Newmont Mining Corp., se identifican más con el primer enunciado de la pregunta, implementado una serie de actualizaciones de alta tecnología, pero no llegan a la sofisticación que pretende Barrick que encarna la segunda posibilidad.