El petróleo ha abierto la semana con buen pie este lunes impulsado por las expectativas de que los productores de petróleo acordarán la ampliación de su acuerdo de reducción de la producción en su reunión a finales de este mes.
En virtud de lo términos originales del acuerdo, la OPEP y otros 10 países productores no miembros de la OPEP con Rusia a la cabeza, acordaron una reducción de la producción de 1,8 millones de barriles al día durante seis meses. El acuerdo se amplió en mayo otros nueve meses hasta marzo de 2018 en un intento de reducir las reservas de petróleo a escala mundial.
Continúan las discusiones según se acerca la reunión del 30 de noviembre, a la que asistirán la que ministros del petróleo de países miembros y los participantes no miembros de la OPEP.
Los precios recibieron un impulso extra pues el considerable descenso semanal de los yacimientos petrolíferos activos de Estados Unidos, actualmente en su cota más baja desde mayo, alimentara la ralentización del crecimiento de la producción de petróleo de la nación.
El proveedor de servicios petroleros Baker Hughes anunció la semana pasada que el total de yacimientos activos de Estados Unidos descendió en ocho hasta 729. Éste supone el cuarto descenso de las últimas cinco semanas.
El recuento semanal de yacimientos es un barómetro importante para la industria de la perforación y funciona como indicador de la producción nacional de petróleo.
Mientras, los actores del mercado siguen pendientes del desarrollo de los acontecimientos en Arabia Saudí, donde el príncipe heredero, Mohammed bin Salman, ha consolidado su poder este fin de semana gracias a sus duras represalias contra la corrupción, que han incluido los arrestos de altos cargos.
Los futuros del petróleo Brent, referencia para los precios del petróleo fuera de Estados Unidos, han subido hasta 62,90 USD por barril, máximo intradía y su cota más alta desde julio de 2015, para después retroceder hasta 62,51 USD a las 9:35 horas (CET), subiendo en torno a un 0,7% o 45 centavos.
El petróleo de referencia mundial cerró la semana con una subida de en torno a un 2,7%, su cuarta semana consecutiva de ganancias.
Mientras, los futuros de petróleo del West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos avanzaron en torno a un 0,7% o 38 centavos hasta 56,02 USD por barril, su cota más alta en más de dos años.
Los precios del WTI subieron por cuarta semana consecutiva la semana pasada, apuntándose en torno a un 3,2%.
El repunte del petróleo, que comenzó a principios de octubre, se ha debido mayormente a los crecientes indicios de que el mercado del petróleo se acabará requilibrando. El Brent ha subido más de un 40% con respecto a los mínimos de junio de 2017, mientras que el petróleo del WTI se ha situado un tercio por encima de sus mínimos de 2017.
En cuanto a otras noticias del sector energético, los futuros de gasolina se han mantenido estables en 1,791 USD por galón, mientras que el carburante para calefacción se apuntó un alza de 0,9 centavos hasta situarse en 1,897 USD por galón.
Los futuros de gas natural se han disparado casi un 3% u 8,8 centavos hasta 3,072 USD por millón de unidades térmicas británicas.