Entrevista con Ministro de Energía. El proyecto TEN (Transmisora Eléctrica del Norte) es de propiedad de Engie Energía Chile en un 50% y de Red Eléctrica de España en el otro 50%.

Sin embargo, el ministro de Energía, Andrés Rebolledo, indica que la concreción de esta interconexión histórica entre el Sistema Interconectado Central (SIC) y el Sistema Interconectado del Norte Grande (SING) se debe, en gran parte, a la gestión del actual Gobierno. “Era una gran aspiración del sector eléctrico, que no se había concretado por diferentes razones. Algunas eran técnicas o por falta de una decisión política. Pero fue, justamente, en este Gobierno donde se ha logrado”, dice Rebolledo. 

Pero aparte de los beneficios a la red eléctrica nacional, la interconexión local podría motivar a una posible conexión internacional. Si todo va viento en popa, a principios de 2018, el Ministerio de Energía lanzaría un concurso para construir la primera línea eléctrica que unirá a Chile y Perú, conectando Tacna y Arica. Y, claramente, el proyecto TEN es un fuerte aliciente para que eso ocurra.

El jefe de la cartera de energía está confiado en que durante la segunda quincena de noviembre se concretará definitivamente la unión entre el SIC y el SING, lo que podría ser el inicio de varios cambios en el sector eléctrico. “Hay una necesidad muy fuerte de seguir invirtiendo en las ERNC (energía renovables no convencionales) en Chile, principalmente en lo que se refiere a la tecnología solar fotovoltaica y la eólica”, agrega el ministro Rebolledo. 

¿Cree entonces que la interconexión ayudará a incentivar más al desarrollo de las energías limpias en nuestro país?

– De alguna manera, la interconexión viabilizará muchos proyectos de energías renovables de empresas que han tomado decisiones de inversión tomando en cuenta esta unión. Pero lo fundamental es que con esto, ahora es posible acercar más aún la oferta con la demanda, principalmente a los grandes centros de consumo, como la Región Metropolitana y otras grandes urbes a lo largo del país.

La interconexión, se suma a un alza del precio del cobre. ¿Ambas ayudarían también a reactivar inversiones de plantas fotovoltaicas en el sector minero?

– Claro. Además implicará un cambio y efecto positivo en la baja del precio de la energía, dando posibilidad de más proyectos de ERNC dentro en los procesos de licitación eléctrica. La unión del SIC con el SING le introduce más competitividad al sector eléctrico. Los precios deberían bajar una vez que se produzca la conexión.

Otro tema clave es la seguridad y resiliencia. O sea, tener respaldos que antes eran imposibles por no estar las líneas separadas, lo que además permite planificar mejor el sistema, si existiesen retrasos de inversiones en proyectos. Antes, al tener una capacidad limitada, era más difícil esa planificación y resiliencia ante algún problema. 

¿Incluso se podría exportar energía eléctrica?

– Es posible tener alternativas de ofertas en esa línea. O sea, imaginar a un Chile más conectado con otros países. Incluso, con Argentina y Perú.

¿Se necesitarán algunos ajustes normativos más durante los próximos meses o años?

– Se van a requerir de algunos ajustes con el Coordinador Eléctrico, entre otras cosas. Pero son más técnicos que normativos, si consideramos que tendremos una línea de transmisión de cerca de 3.000 kilómetros. El único tramo que va a quedar pendiente para el próximo año es Polpaico – Nueva Pan de Azúcar.

¿Cuál podría ser el efecto en las próximas licitaciones en términos generales?

– Es clave, porque es posible que producto de la interconexión, se pueda transmitir más energía a las redes, especialmente al SIC.

¿Y tendrá algún efecto en la Ley de Generación Distribuida o Net Billing (20.571)?

– Hay estudios que indican que la interconexión eléctrica traerá beneficios para la economía a largo plazo del orden de los US$1.600 millones, básicamente debido a la baja en el precio de la energía. En ese contexto, en la medida que paralelamente la tecnología para desarrollar energía solar fotovoltaica baje, ambos factores podrían ayudar a masificar la instalación de paneles en los hogares o en los comercios. En este sentido, las empresas y en general todos los sectores ya están entendiendo que estamos dando un paso importante para masificar las energías renovables.