Diputados votarán mañana el articulado. De ser aprobado pasaría a Recursos Hídricos y luego al pleno.
La Comisión de Minería votará el particular del proyecto de ley refundido entre las iniciativas de los diputados Paulina Núñez (RN) y Marcos Espinosa (PR), que busca obligar a la construcción de plantas de desalinización de agua de mar para abastecer los procesos productivos de la gran minería.
Nuñez explicó que tras el acuerdo con Espinosa de impulsar en conjunto la iniciativa, se votó y aprobó de forma unánime en general el proyecto y este miércoles se votará el particular, oportunidad en la que además se harán indicaciones a la norma.
Luego de este trámite, la iniciativa se debería despachar a la Comisión de Recursos Hídricos de la Cámara de Diputados, para luego ser votado en pleno, detalló la parlamentaria, quien recalcó que este proceso ha considerado la opinión de "gremios, ministerios de Minería, Codelco, Cochilco y distintas organizaciones de la sociedad civil."
"Creemos que es un muy buen proyecto, en el sentido que mira una solución a la escacez de agua que tenemos y no solamente en Calama, en nuestra región, y por qué no decirlo, en el resto del país (...) La mayor cantidad de agua que se utiliza en esta región es precisamente en los proyectos mineros", dijo Núñez.
La congresista recalcó además que la iniciativa no busca castigar a la actividad minera, pues "es la actividad que ocupa la menor cantidad de agua a nivel nacional, pero en esta región de Antofagasta ocupa un recurso importante y nosotros nos tenemos que preoucupar de esta región. Así que el avance que ha tenido la aprobación, en general, insisto, es una muy buena noticia".
No obstante, la iniciativa de los parlamentarios ha recibido variadas críticas por parte de los gremios mineros. En esa línea, el presidente del Consejo Minero, Joaquín Villarino, comentó que "estando la minería ya sometida a las mayores exigencias ambientales, además de las normas del Código de Aguas, la obligación discriminatoria que plantean estos proyectos de ley adquiere una connotación arbitraria, toda vez que la minería representa el 3% del consumo nacional de agua y hace un uso transparente, responsable y eficiente del recurso", aseguró.
Además, advirtió que "imponer exigencias como las planteadas en las iniciativas legales crea el riesgo de hacer inviables algunas faenas mineras".
El gremio insistió en que el uso de agua en minería está ampliamente regulado y monitoreado.
"Además, forma parte central de la evaluación ambiental de proyectos mineros, instancia en la que, de acuerdo a condiciones particulares de disponibilidad hídrica, se limitan las extracciones incluse si se dispone de derechos de aprovechamiento de agua", insistió Villarino durante su exposición en la comisión.