Así lo sostuvo el presidente de la estatal brasileña, Pedro Parente, quien sostuvo este miércoles que no descartaba ofrecer a subasta esta semana algunos bloques más allá de los tres que ya consignó.
El presidente ejecutivo de Petrobras dijo el martes que la gigante estatal brasileña no descartaba ofrecer a subasta esta semana algunos bloques más allá de los tres que ya consignó, sacando ventaja de sus derechos preferentes.
En declaraciones al margen de una conferencia en Río de Janeiro, Pedro Parente expresó que Petrobras "no necesariamente se limitaría a esas tres" ofertas, aunque agregó que la compañía sería selectiva y elegiría sólo las áreas de mayor potencial.
"La situación de la empresa exige que hagamos ofertas sólo en las áreas que podrían tener mayor potencial", dijo Parente a medios, sin querer referirse a posibles socios para las pujas.
El viernes, Brasil tendrá la primera de tres subastas de bloques en su área pre-sal en aguas profundas -donde el crudo está retenido bajo una gruesa capa de sal bajo el fondo marino- desde 2013, cuando regulaciones más rígidas desalentaron a muchos interesados.
Para atraer más inversión, el Congreso brasileño eliminó una norma que exigía que Petrobras fuera el único operador en todos los bloque pre-sal pero le mantuvo un derecho preferente a preseleccionar bloques.
Antes de las subastas del viernes, Petrobras ejerció esos derechos para los bloques Sapinhoá, Peroba y Alto de Cabo Frio Central, lo que implica que se convertirá en operador y probablemente asuma una participación por un mínimo de 30% en cualquier consorcio que se los adjudique.
Parente señaló además que la empresa mantendría su objetivo de US$21.000 millones en desinversiones para fines de 2018, pese a los desafíos legales que hasta ahora han entorpecido el proceso.
"Eso genera retrasos, pero no imposibilita las desinversiones", afirmó el ejecutivo.