El carbón está muerto. Donald Trump está loco si piensa que puede revivir a Big Coal. Si bien todas estas declaraciones se han convertido en parte de la conciencia global cuando se trata del futuro de los tan difundidos combustibles fósiles, un informe de Urgewald, un grupo ambientalista con sede en Berlín , lo pone en duda.

Urgewald señaló que de todas las nuevas plantasde carbón que se espera entren en línea a lo largo de la próxima década, las empresas chinas construirán casi la mitad. Específicamente, eso significa 700 nuevas plantas de carbón, con la mayoría para ser construido en China, y cerca de un quinto fuera del país, según cifras proporcionadas por Urgewald y divulgadas por el New York Times:

En total, 1.600 plantas de carbón están planificadas o en construcción en 62 países, dijo Urgewald, que utiliza datos del portal Global Coal Plant Tracker. Las nuevas plantas ampliarían la capacidad de energía de carbón del mundo en un 43 por ciento.

La flota de nuevas plantas de carbón harían prácticamente imposible alcanzar los objetivos establecidos en el Acuerdo Climático de París. La electricidad generada a partir de combustibles fósiles como el carbón es el principal contribuyente mundial al aumento de las emisiones de carbono, lo que los científicos están de acuerdo en que la temperatura de la tierra aumente.

Shanghai Electric Group, uno de los fabricantes de equipos eléctricos más grandes del país, anunció planes para construir centrales eléctricas de carbón en Egipto, Pakistán e Irán con una capacidad total de 6.285MW, casi 10 veces los 660MW de energía de carbón que ha planeado en China.

Los números asombrosos van en contra de la tendencia que ha estado ocurriendo a lo largo del año en China, donde peligrosamente altos niveles de contaminación han forzado el cierre de cientos de minas de carbón y una reducción de la producción de acerías.  Ejemplos de la aversión doméstica de China al carbón incluyen:

+Hace dos días Taiyuan, la capital de la provincia de Shanxi, en el norte de China, que es conocida por su producción de carbón,  prohibió la venta, el transporte y el uso de la mayor parte del carbón al intentar reducir la contaminación del aire

+En mayo, la provincia de Shanxi decidió suspender o detener el desarrollo de minas hasta 2020, lo que efectivamente eliminará del mercado cerca de 120 millones de toneladas del combustible fósil.

+También en mayo las autoridades provinciales anunciaron que  cerrarán 18 minas de carbón y recortarán 17 millones de toneladas de capacidad de carbón para  fines de año.

+En enero, Beijing anunció que planea  cerrar 800 millones de toneladas  de capacidad de carbón obsoleto para 2020.