Diario Atacama conversó con presidente ejecutivo de la minera, quien indicó que “es posible prever que los desafíos y adversidades que se han enfrentado hasta ahora, estarán presentes durante toda la vida del proyecto”.
En la región de Atacama uno de los únicos proyectos base durante el “boom” minero que logró concretarse fue Caserones, propiedad de la compañía minera Lumina Copper Chile. La iniciativa no ha estado exenta de problemas en el atraso de su programa de producción, que espera a fin de año cerrar con cifras positivas, además de concretar el pago de deudas.
Según el gerente general de la minera, Maciej Sciazko, en el último tiempo Caserones ha mostrado una mejora sustantiva en sus resultados.
“Efectivamente así ha sido. Al primer trimestre de este año, la operación ya cubría sus costos operacionales. Luego, nos vimos impactados por el black-out señalado, lo que nos desvió de esa tendencia. Actualmente estamos nuevamente en el camino deseado, y la expectativa es lograr un completo financiamiento, incluyendo pago de deuda, hacia fines de este año. Evidentemente que para que ello ocurra debemos cumplir nuestro plan de producción y el precio del cobre debe mantenerse en torno a 3 USD la libra”, dijo el ejecutivo.
La tarea no ha sido fácil, Sciazko recordó que “hace un año atrás, Caserones enfrentaba un período tremendamente complejo. En el primer semestre de 2016, la compañía perdía significativas cantidades de dinero como resultado de un retraso importante en el proceso de puesta en marcha de la planta concentradora. No era una situación sostenible. Hoy, si bien queda aún trabajo por hacer, la situación ha mejorado significativamente”.
El ejecutivo, de origen polaco, detalló que antes estuvo a cargo de Minera Sierra Gorda y que haber aterrizado en Atacama ha sido uno de los mayores desafíos de su vida profesional, “tengo más de 16 años de experiencia en proyectos y operaciones mineras, me han tocado varias tareas en el rubro, pero Caserones es algo especial. Esta faena se ubica en una región con larga tradición minera y es un orgullo poder seguir contribuyendo a ese desarrollo minero ahora con una operación que emplea la más moderna tecnología y cuenta con un equipo humano de un alto nivel profesional. De esta forma podemos proteger el medioambiente que nos rodea, trabajar con nuestros vecinos para el beneficio mutuo y, por cierto, extraer cobre y así contribuir al desarrollo de Atacama”.
Además destacó que “nuestra estrategia se ha basado en llevar adelante un proceso de transformación que tiene como focos aumentar la producción y optimizar los costos. A estos dos pilares, se agrega el desarrollo de una cultura organizacional que sostenga ambos objetivos. No debemos olvidar que Caserones, si bien es un yacimiento con bajo estéril y que produce concentrados muy limpios, tiene también complejidades relevantes, como son su ubicación geográfica, sobre 4.000 metros sobre el nivel del mar, y una ley de mineral muy baja, de 0,34% en promedio.
Por tanto es posible prever que los desafíos y adversidades que se han enfrentado hasta ahora, estarán presentes durante toda la vida del proyecto. De ello deriva la importancia de formar una organización y un equipo humano que comprenda las necesidades particulares de este yacimiento. Todo lo anterior, teniendo presente que el resguardo de la seguridad, de los trabajadores propios y contratistas, es intransable”.
Condiciones
Dada su ubicación geográfica, siempre que hay eventos de situaciones climáticas invernales en Atacama, Caserones es rápidamente motivo de atención. Según Sciazko, la compañía tiene todos los protocolos y elementos para enfrentar estas situaciones, garantizando en primer lugar la protección a quienes se encuentren en cualquier parte de las instalaciones.
“En Caserones contamos con un Protocolo de Operación Invierno, que nos permite estar preparados ante eventos climáticos que, dada nuestra ubicación, pueden ser severos. Este protocolo considera preparación de personal y suministros necesarios para proteger a quienes trabajan con nosotros y también mantener la continuidad operacional. En Mayo de este año, sin embargo, tuvimos una paralización de producción extendida producto del daño que sufrió la línea de suministro eléctrico de 220 kV, la que fue afectada por el duro frente climático ocurrido en la Región de Atacama.
Estamos evaluando el detalle de las causas de la falla, y probablemente deberemos hacer algunos ajustes menores en la línea de transmisión para aumentar aún más su seguridad. Pero lo importante es que cada experiencia y cada invierno han dejado también importantes aprendizajes. Se trata en definitiva, y como se ha dicho, de una minería nueva, diferente en muchos aspectos, con desafíos particulares, que van cediendo con la experiencia de los mismos”.
Precios
La trayectoria del precio del cobre en los últimos años ha sido motivo de atención permanente de los ejecutivos de la industria minera. En esta compañía, donde trabajan cerca de cuatro mil personas entre directos y contratistas, ven como una muy buena noticia los valores alcanzados por el metal rojo en el último tiempo.
“Sin duda que el incremento en el precio del cobre es una noticia bien recibida por todos los mineros, y se valora importantemente. Sin embargo, y dadas las particularidades de este proyecto, ya mencionadas, estamos claros en que la sostenibilidad se alcanzará sólo con una férrea disciplina en el control de costos y una producción acorde a nuestros planes. Ese es nuestro foco, y es en ello en lo que confiamos principalmente como base para sustentabilidad de este proyecto. No dependemos de las expectativas del precio, sino de nuestro trabajo y esfuerzo”, indicó el gerente general de Caserones.
Finalmente Maciej Sciazko, reafirmó que todos los integrantes de su equipo están dando lo mejor de sí para lograr las metas establecidas en todos los ámbitos. Es claro que el desempeño de Caserones es una muestra del potencial minero de la Región de Atacama.
“En el primer semestre de 2016, la compañía perdía significativas cantidades de dinero como resultado de un retraso importante en el proceso de puesta en marcha de la planta concentradora. No era una situación sostenible. Hoy, si bien queda aún trabajo por hacer, la situación ha mejorado significativamente”. Maciej Sciazko, Presidente Ejecutivo y gerente general de Caserones