Desarrollar al máximo el potencial hidrocarburífero de Mendoza es uno de los objetivos que busca el Gobierno y por ello, en octubre se realizaran dos lanzamientos públicos de nuevos yacimientos petroleros. 

Por un lado la ya anunciada licitación de 12 áreas de exploración y explotación, de las cuales algunas corresponden a reversiones de contratos que no cumplieron con las obligaciones comprometidas al momento de la adjudicación y por el otro, mediante un Acuerdo de Evaluación Técnica (TEA), la promoción de áreas en zonas libres de la Provincia. 

Aquellas ubicadas en la Cuenca Neuquina y Cuyana, consideradas como zonas libres, son nuevas áreas que se encuentran sin explotación, que presentan un bajo potencial petrolero y que el Gobierno impulsará su desarrollo a través de convenios TEA (Technical Exploration Agreement). 

A través de estos, posibilitará a las empresas interesadas a realizar su propia propuesta de inversión, que será evaluada por la Provincia, para identificar el potencial hidrocarburífero en esa zona. 

Emilio Guiñazú, subsecretario de Energía y Minería explicó que: “Los TEA, si bien no son una novedad porque la Ley los prevé, aunque Mendoza nunca lo había utilizado antes, aplicarán para las áreas marginales que sabemos que resultan poco atractivas para que las empresas asuman compromisos de inversión y nos permitan aumentar la base de conocimiento técnico, con la finalidad que en algún momento encontremos un nuevo prospecto de exploración o explotación en la provincia”.

 El funcionario puso de manifiesto que en ningún caso, el TEA le otorga a la empresa ningún derecho sobre el área, sino que “promovemos que los que tengan interés inviertan en esas áreas sin ningún compromiso pero tampoco recibiendo ningún beneficio extraordinario por el hecho de haber realizado al inversión. Simplemente es invertir en un área, investigar en qué estado se encuentra y si resulta interesante, se concesione en un futuro para exploración”. 

Entre finales de septiembre y principios de octubre se publicará el pliego con la oferta de las áreas. A partir de ahí, las empresas tendrán 2 meses aproximadamente para preparar el cronograma de inversión y antes de fin de año se prevé adjudicarlas.