El plan de la cuprera considera tres acciones. Una de ellas es la revisión de proyectos para reducir en US$5 mil millones el programa de inversión
“Deuda tendrá que haber, es innegable, porque estamos invirtiendo. El punto es que no se nos explote, porque el camino de crecimiento de deuda de Codelco era insostenible y estaba empezando a generar un grado de preocupación importante en los mercados internacionales”.
Con este contexto, el presidente de la minera estatal, Óscar Landerretche, adelantó que este año la corporación alcanzará la meta de contener su deuda financiera, la que en los últimos cinco años, dice el economista, vino creciendo a razón de US$ 2 mil millones por ejercicio.
“Los datos preliminares nos demuestran que cuando termine mi período en la empresa podremos entregar la deuda, tanto bruta como neta, en un nivel plano. Detuvimos el crecimiento sostenido de la deuda e incluso la revertimos parcialmente”, aseguró.
Cuando Landerretche llegó a la presidencia de la cuprera, los pasivos financieros de ésta superaban los US$ 14.500 millones y la proyección es que al cierre de 2017 este indicador se ubicará bajo los US$ 14 mil millones.
Tras participar en la conferencia minera organizada por la consultora Plusmining, que lidera Juan Carlos Guajardo, Landerretche explicó que la fórmula que aplicaron para lograr esta meta considera tres acciones concretas. Una de las más importantes fue la racionalización y orden en el tiempo de los denominados proyectos estructurales.
“Tener todos los proyectos al mismo tiempo generaba una gran carga financiera y, adicionalmente, la calidad de lo que se estaba haciendo no necesariamente era tan buena”, comentó.
Añadió que el resultado de este proceso fue reducir la cartera de inversiones de US$ 20 mil millones a unos US$ 16 mil millones, aunque en realidad es posible que ésta llegue a menos de US$ 15 mil millones.
“Esto no lo logramos terminando con los proyectos, sino que ordenándolos en el tiempo para que se ejecuten en secuencia, lo que nos permite además, concentrarnos en cada uno para hacerlos un poco más eficientes, disminuyendo el costo de cada uno”, precisó.
Agregó que al comenzar con una iniciativa madura como Chuqui Subterránea obtendrán antes flujos que a su vez les ayudarán a financiar las iniciativas posteriores: Nuevo Nivel Mina (NNM) y Andina.
Mantener el ritmo de capitalizaciones del Estado y extender el perfil de vencimientos de la deuda son las otras dos acciones que considera este plan de contención.
Respecto de este segundo punto, Landerretche dijo que fueron vitales los US$ 2.500 millones que levantó con la emisión de bonos a 10 y 30 años que realizó a fines de julio, pues casi la totalidad de esos recursos fueron destinados a la recompra de sus propios bonos con vencimientos entre 2019 y 2025.
“Hicimos esto, porque como dentro de los próximos cuatro años la próxima administración tendrá que concentrarse en la implementación y en el punto final de los proyectos, la puesta en marcha de Chuqui y el inicio de NNM, que ya está bastante avanzado y se va a ir muy rápido, entonces es importante que ellos no tengan la presión financiera de algo que todavía no tienen con qué financiar, mientras que cuando se produzcan los nuevos vencimientos esas operaciones ya estarán aportando flujos”, explicó.
“Una de las satisfacciones que me genera lo que hemos estado haciendo es que vamos a entregar una empresa que detuvo su inflación de deuda e incluso la empezó a revertir, para darle más espacio a la administración para que pueda tener una mirada de largo plazo”, puntualizó Landerretche.
Una de las clave para mantener el techo de la deuda de Codelco en los niveles actuales es seguir contando con los aportes del dueño por la vía de la capitalización.
Y, aunque el presidente de la estatal, Óscar Landerretche, admite que hasta ahora ha sido poco lo que el gobierno ha inyectado de los US$ 4.000 millones que comprometió en su momento, lo importante es que la señal del aporte se mantenga.
“Una manera de continuar con la agenda de saneamiento financiero de la compañía es que se complete la capitalización comprometida, no importa si no es en los plazos establecidos, prefiero que llegue tarde, pero que llegue bien”, dijo.
Añadió que, siguiendo esa senda, inevitablemente el nuevo próximo gobierno “tendrá que comprometer recursos por un monto al menos similar a los US$ 4.000 millones de la actual administración”.
Considerando que hasta ahora la estatal ha recibido menos de la mitad de lo anunciado, Landerretche adelantó que probablemente en las próximas semanas, dentro de la discusión presupuestaria, tendrán conversaciones en este sentido con el Ministerio de Hacienda.