El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó su previsión para nuestro país y la puso en el rango 2,5%-2,7% debido "al comienzo lento" del año 2017 como consecuencia "del escándalo de corrupción de Odebrecht y las inundaciones y los deslizamientos de tierra provocados por El Niño".
Asimismo, el organismo redujo también sus estimaciones de crecimiento para Colombia (de 2,3 % a 2%); Chile (de 1,7 % a 1,6 %), y Venezuela (de -7,4 % a -12 %).
La reducción para Colombia se explica en el marco de un oportuno endurecimiento de la política monetaria que ha permitido una desaceleración económica de forma ordenada a medida que la demanda interna -en particular la inversión- se ajusta al shock permanente del ingreso nacional relacionado con la caída de los precios del petróleo.
Asimismo, destacó que "la depreciación reciente del peso ayudó a corregir la sobrevaloración de la moneda y, junto al repunte de la demanda de Brasil, podría impulsar el crecimiento de las exportaciones" de Argentina.
Las cifras suponen una actualización de los pronósticos económicos para la región de su informe de "Perspectivas Económicas Globales" divulgado en abril pasado, y se enmarcan en la ralentización estimada para América Latina en 2017, para cuando se prevé una expansión de 1 %.
Un caso más extremo es el de Venezuela, que ve agudizada su profunda crisis económica marcada por las disminuciones proyectadas en la producción y la importación de petróleo, además de la mayor incertidumbre relacionada con la crisis política reinante.
"Si las condiciones de vida continúan deteriorándose, la crisis humanitaria de Venezuela podría salirse de control, aumentando así la cantidad de personas que migrarían a países vecinos", advirtió Alejandro Werner, director del Hemisferio Occidental del Fondo en el blog de la institución.
Argentina, por su parte, no corrió con la misma suerte, pues el FMI elevó su estimación de crecimiento de 2,2 % a 2,4 % para este año respecto a lo estimado tres meses atrás. "En Argentina, la recuperación tras la recesión del año pasado está consolidándose, gracias al estímulo que el consumo privado recibe del repunte gradual del salario real, y la inversión está respaldada por el crecimiento incipiente del crédito y el aumento del gasto en obra pública", indicó Werner.
La suba que tuvo el dólar en las últimas semanas no quedó fuera del análisis del nuevo documento del FMI. Se considera que "la depreciación reciente del peso ayudó a corregir la sobrevaloración de la moneda".
En este sentido, el organismo aseguró que junto al repunte de la demanda por parte de Brasil -ante todo en productos industriales que le compra a la Argentina-, el salto en el tipo de cambio "podría impulsar el crecimiento de las exportaciones".
Y concluyó: "Además de reducir aún más los desequilibrios fiscales y de continuar reduciendo la inflación, para lograr un crecimiento sólido, sostenido y más equitativo será necesario redoblar los esfuerzos para avanzar en reformas de gran alcance en el lado de la oferta, informó Infobae
La reducción de Chile se debería a unas perspectivas más moderadas en torno al consumo público y privado, vinculadas con la mayor debilidad del mercado laboral y la prevista desaceleración del gasto público de este año.
La proyección de crecimiento económico para Chile en 2017, desde el 1,7% proyectado en abril hasta 1,6%, al tiempo que mantuvo la estimación para 2018 en 2,3%.
El organismo justificó la decisión en "las perspectivas más moderadas en torno al consumo público y privado, vinculadas con la mayor debilidad del mercado laboral y la prevista desaceleración del gasto público de este año".
"El crecimiento habría de repuntar en el segundo semestre de 2017, gracias a la mejora de la confianza y los recortes de la tasa de interés aplicados en los meses recientes en un contexto de rápida reducción de la inflación", precisó el director del departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner.
La economía peruana cerrará este año en 2.7%, según el Fondo Monetario Internacional, manteniendo de esta manera su expectativa sobre el crecimiento del país en su último informe.
De acuerdo al informe, las previsiones sobres el Perú se redujeron de 3.5% a a 2.7%, debido a las consecuencias del escándalo Odebrecht y los desastres naturales causados por el fenómeno El Niño.
Estas cifras son una actualización de los pronósticos económicos para la región de su informe de abril pasado Perspectivas Económicas Globales y que se enmarcan en la ralentización para América Latina en 2017.
