La tendencia al alza semanal del metal fue inducida por las positivas cifras de PIB y producción industrial de China, principal consumidor mundial de cobre. Asimismo, la importante depreciación del dólar a nivel global, favoreció la cotización del cobre, al igual que la de otros commodities.
De acuerdo al Grupo Internacional de Estudios del Cobre, el mercado mundial de cobre refinado registró un déficit de 53.000 toneladas en abril, superando el déficit de 18.000 toneladas anotado en marzo.
Los positivos datos en materia de crecimiento económico exhibidos por China esta semana, junto con la depreciación del dólar a nivel mundial, gatillaron un fenómeno que siempre es bien recibido por nuestro país, especialmente por el Fisco; el precio del cobre, principal producto de exportación de Chile, avanzó hasta su nivel más alto en cuatro meses y medio, cerrando la jornada de este viernes en US$ 2,72 la libra, su mayor valor desde el 1 de marzo (US$ 2,74).
Sin embargo, lejos de sacar cuentas alegres en forma anticipada, considerando que por cada centavo que aumenta el precio del metal rojo el Estado recauda cerca de US$ 70 millones adicionales, los analistas son cautos en sus proyecciones, anticipando que a pesar del último rally del commodity, que en el último mes ha subido casi 6%, el precio podría volver a descender. En mayo el metal tocó su mínimo de 2017, de US$ 2,479 la libra.
“La reciente alza en el precio está fuertemente impulsada por la especulación y debe ser corregida antes de que veamos otro tramo más alto”, comentó Daniel Brieseman, analista de investigación de Commerzbank.
Así lo prevé Caroline Bain, economista jefe de materias primas de Capital Economics, quien en un reporte acotó que la demanda de cobre se expandirá 2,2% este año y que es poco probable que las interrupciones en el suministro -como la extensa huelga en Escondida en febrero y marzo- sean suficientes para evitar un alza adicional de 1,6% en la producción de cobre refinado.
“Esta perspectiva relativamente benigna sugiere que habrá pocas cosas que apuntalen los precios durante el curso de este año, a medida que el optimismo sobre la demanda continúa desvaneciéndose”, aseguró.
La experta anticipa que el valor de la libra retrocederá a US$ 2,36 hacia fin de año.
Por su parte, Francisca Pérez, economista senior de Bci Estudios, espera que el metal siga fluctuando entre US$ 2,40 la libra y US$ 2,70 la libra hasta diciembre.
En tanto, un informe publicado a fines de junio, el equipo de materias primas de Goldman Sachs proyectó que el valor del mineral continuaría escalando hasta US$ 2,812 la libra en el corto plazo “a medida que el crecimiento de la demanda se mantiene sólido y el crecimiento de la oferta se desacelera por el fin del agotamiento de la chatarra”.
Lenta recuperación
En este contexto, para el próximo año los analistas pronostican una lenta recuperación en el mineral. Según la mediana de las proyecciones recopiladas por Bloomberg, el valor promedio aumentará des US$ 2,60 la libra en este ejercicio a US$ 2,62 en 2018, y a US$ 2,76 en el ejercicio subsiguiente. A la fecha, promedia US$ 2,614 la libra.
Con todo, el metal se aproximaría a la barrera de los US$ 3 la libra recién en 2020, cuando registraría un costo medio de US$ 2,95 la libra.
“Hacia mediados de 2018 se comenzarían a observar déficit en el mercado, debido a la falta de nuevos proyectos que aumenten la producción”, apunta Pérez de Bci.
La economista precisó que la mayoría de las iniciativas en desarrollo son de ampliación de yacimientos existentes, que buscan mantener la producción actual. Bci presagia que el cobre tendrá un precio promedio de US$ 2,80 la libra en 2018.
Por su parte, Andrew Cole, analista principal de Metal Bulletin Research, también augura un fortalecimiento del mineral en el siguiente ejercicio “a medida que el mercado se ve más ajustado”.
El experto cree que el valor medio estará “cómodamente” por encima de US$ 2,72.
Por su parte, Carsten Menke, analista de materias primas de Bank Julius Bär, considera que más allá del 2018, el mercado podría entrar en déficit dependiendo de la fortaleza o debilidad de China, y que el costo promedio disminuiría desde US$ 2,49 la libra en 2017 a US$ 2,47 en los 12 meses posteriores.
Mientras, Goldman Sachs también pronostica un repunte en la expansión del suministro en 2018 y una moderación en el crecimiento de la demanda en China, lo que presionará el valor a US$ 2,49 la libra el año que viene y a US$ 2,40 en 2019.
Con todo, en Chile el comité convocado por Hacienda para medir el precio del cobre en el marco de la elaboración del Presupuesto 2018, a largo plazo entregará sus perspectivas en agosto próximo.