El crudo WTI cerró apenas por encima del u$s 45 el barril en el Nymex, debido a que se registró una caída de inventarios cercana a los 8,1 millones de barriles.
El precio internacional del crudo fluctúa de acuerdo a las necesidades del costo de extracción del no convencional de Estados Unidos. La foto que describe el escenario actual de la actividad petrolera engorda la importancia de la baja de costos en la producción de Vaca Muerta para mantener la competitividad de la formación en el contexto mundial determinado por el poder del esquisto norteamericano para neutralizar la estrategia de la OPEP, que reúne a gran parte de los países petroleros, para tonificar los precios.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) tiene que "conmocionar e intimidar” al mercado del petróleo para que los precios suban, según Goldman Sachs Group Inc.
Por esto la OPEP debe incrementar los recortes de producción destinados a reducir el exceso mundial de oferta sin hacer muchos anuncios públicos para sacudir a los inversores, dijo el banco en un informe del 10 de julio. Sin esta medida ni pruebas de una disminución sostenida de las existencias, así como de la actividad de perforación en Estados Unidos, los precios podrían caer por debajo de los US$40 el barril, escribieron en la nota Damien Courvalin y Jeffrey Currie.
Goldman remarca el riesgo de una nueva caída del petróleo después de que el banco rebajase a finales del mes pasado su pronóstico de tres meses para el crudo de referencia estadounidense West Texas Intermediate de US$55 el barril a US$47,50. Posteriormente, en un informe separado reconoció que había equivocado su juicio sobre el mercado de materias primas este año. La producción y las exportaciones de la OPEP crecieron en junio, impulsadas por Libia y Nigeria, que están exentas de las restricciones de producción del grupo, mientras que el aumento de la oferta y la actividad de perforación de EE.UU. han incidido en los precios.
La semana pasada, las empresas de exploración estadounidenses pusieron más plataformas a trabajar en la perforación, revirtiendo una caída de una semana y acentuando el temor de que la OPEP no tenga éxito con sus esfuerzos para reducir la sobreoferta mundial. La producción estadounidense en la semana que terminó el 30 de junio aumentó en su mayor nivel desde enero, compensando una disminución en las existencias de crudo.
"Teniendo en cuenta que ahora al mercado se le ha agotado la paciencia para las grandes extracciones de las existencias y está cada vez más preocupado por los balances del próximo año, creemos que el alza de los precios tendrá que ser impulsada de manera frontal y provenir de una escasez de corto plazo observable e indicios de una desaceleración sostenida de la actividad estadounidense de shale (lutitas) en las próximas semanas", escribieron los analistas de Goldman en su último informe.
Libia y Nigeria han mantenido la producción por encima de las expectativas de Goldman en las últimas semanas, dijeron. "Aunque la OPEP todavía no ha abordado este aumento de la producción, el grupo ha invitado a ambos países a participar en el próximo comité de cumplimiento", escribieron los analistas. "Seguimos creyendo que hay otra oportunidad para que la OPEP aumente los recortes, pero que esto debería hacerse con ‘sorpresa y conmoción’ y pocos anuncios públicos".
Actualmente no se prevén recortes más profundos, según el secretario general de la OPEP, Mohammad Barkindo. Sin embargo, el grupo y otras naciones han invitado a Libia y Nigeria a una reunión que tendrá lugar el 24 de julio en San Petersburgo, Rusia, para analizar la estabilidad de su producción, según Issam Almarzooq, ministro del petróleo de Kuwait.
El precio del petróleo no subirá mientras que no baje sustancialmente el nivel de las reservas almacenadas (inventarios) de esa materia prima. A esta opinión ya expresada por los principales líderes de las OPEP, se una ahora Pedro Miró, consejero delegado de la petrolera española CEPSA.
Los precios del petróleo de tipo Brent, de referencia en Europa, se encuentran en unos 47 dólares por barril, mientras que en verano de 2014 superaba los 110 dólares. El crudo de tipo West Texas, de referencia en EEUU, cotiza en los 45 dólares, cuando en 2014 superaba los 100 dólares.
Tras varios años de una demanda más débil de lo esperado y una oferta fuerte con la inestimable ayuda del shale (petróleo de esquisto) en EEUU, los inventarios de petróleo en los países desarrollado se han incrementado hasta los 3.000 millones de barriles, mientras que a nivel mundial los inventarios alcanzan los 4.000 millones, unos registros que superan claramente la media histórica de reservas de crudo.
"En el mundo sigue habiendo unos inventarios muy grandes, muy superiores a lo que es habitual", ha asegurado a la agencia Efe Miró durante el XXII Congreso Mundial de Petróleo que se celebra en Estambul.
El recorte de la producción de 'oro negro' acordado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros diez productores independientes, entre ellos Rusia y México, vigente desde el 1 de enero, "lo que ha conseguido es que el precio del crudo no bajara más", según reconoce este experto en el mercado.
El acuerdo consiste en el recorte de la producción de casi 1,8 millones de barriles diarios de petróleo, que se ha prolongado hasta finales de marzo de 2018, no ha conseguido incrementar el precio del petróleo, aunque sí estabilizarlos, según ha señalado el ejecutivo de Cepsa.
"Lo habitual es que en el mundo haya 3.000 millones de barriles en inventarios y a día de hoy hay 4.000 millones porque los tres últimos años la oferta ha superado mucho a la demanda", detalló el ejecutivo.
"Hasta que no se corrijan esos inventarios será difícil que aumente el precio del crudo. Sin duda la industria se tiene que acostumbrar a la especulación en los precios", aseveró Miró.
"Este es un negocio cíclico y estacional. Ambos temas hay que tenerlos en cuenta. La estacionalidad - porque evidentemente no es lo mismo temperaturas bajas que temperaturas altas - repercute mucho en el consumo de nuestros productos. Nuestras inversiones tienen que ser rentables a precios bajos", concluyó el dirigente de CEPSA.