Máquinas inteligentes, centrales de operaciones integradas y hasta robots. La industria minera se transforma con un único fin: ser más segura y eficiente, "ecologizando" incluso algunos procesos.
Estas nuevas "minas digitales" podrían también ser la clave para el nuevo escenario económico global que debe enfrentar la actividad y en el que la Argentina no estará exenta de la lista de países que cuenten con "minas del futuro".
Siguiendo esta tendencia global, Australia fue el primer país en aplicar tecnología al sector minero, precisamente en la localidad de Perth, a través de la creación de un centro de operaciones fuera del yacimiento que cumple un rol de monitoreo remoto y que logra una comunicación más efectiva entre todas las áreas logísticas y productivas.
Transporte automatizado de Bauxita en una mina de Australia. (iStock)En el caso australiano, este monitoreo "desde afuera" permitió un mejor entendimiento de las actividades diarias y eso se tradujo en una reducción de costos y riesgos, además de una mejora de rendimiento.
Según un extenso estudio sobre minería digital de la consultora McKinsey realizado en 2015, los beneficios de la aplicación de nuevas tecnologías en el monitoreo y logística no se limitan sólo a la reducción de riesgos tanto para trabajadores como para el medio ambiente, sino que además pueden ayudar a generar mayores ganancias y rendimiento en un mercado global con los precios de muchos commodities en disminución. Según este artículo, minas de distintos países que trabajan con extracción de oro, níquel, fosfato y otros minerales mostraron mejoras de rendimiento de un 3% a 10% en apenas unos meses después de incorporar las medidas y cambios necesarios para transformarse en minas digitales.
Los drones y robots con inteligencia artificial perfeccionada ya dejaron de ser una imagen del futuro para convertirse en tecnología al alcance de la mano. Y las minas digitales hacen uso de estos robots en las actividades más peligrosas del trabajo: la carga y la descarga de materiales, la exploración y explotación de yacimientos de difícil acceso y el transporte de los minerales.
Los nuevos centros de monitoreo equipados con tecnología de vanguardia permiten analizar datos y desempeño en vivo, cumpliendo un rol muy importante a la hora de prevenir accidentes con consecuencias humanas y ambientales, a través de computadoras que permiten comparar datos en tiempo real de una manera que no hubiera podido realizarse unos años atrás.
En línea con estos nuevos paradigmas, la minería digital pronto tendrá su primer exponente en el país, cuando se finalice la segunda etapa de incorporación de un sistema IROC (sigla que en español significa Centro Integrado de Operaciones Remotas) en la mina Veladero, en la provincia de San Juan.
Esta nueva central de monitoreo se ubica en la localidad de Albardón de esa provincia y ya se encarga desde 2016 de analizar y potenciar el funcionamiento de las áreas de despacho en tiempo real, control, mantenimiento y trituración y procesos de la mina. Se espera que la segunda etapa concluya en marzo de 2018, cuando se realizará la inauguración de esta nueva central inteligente.
Eficiencia, sinergia y prevención son los conceptos principales que ordenan el funcionamiento de las llamadas minas digitales, un modelo vanguardista que promete seguir expandiéndose.