El CEO de Aramco, Amin Nasser, dijo que las perspectivas para la oferta de petróleo es “cada vez más preocupante”, además de que la transición a combustibles alternativas es "larga y compleja"
Saudi Aramco, que planea la que podría ser la mayor oferta pública inicial del mundo, invertirá más de 300 mil millones de dólares en los próximos diez años para mantener su capacidad excedente de producción de petróleo y explorar más en gas natural, dijo Amin Nasser, su presidente y máximo ejecutivo.
Las perspectivas para la oferta de petróleo es “cada vez más preocupante”; se perdió cerca de 1 billón de dólares en inversiones durante la depresión actual del sector y se están descubriendo menos depósitos nuevos, dijo Nasser en una conferencia en Estambul.
Algunas estimaciones sugieren que se necesitan por lo menos 20 millones de barriles diarios de nueva producción en los próximos cinco años para compensar la creciente demanda de petróleo y el declive natural de los campos desarrollados, señaló.
“Parece que existe una creencia cada vez más fuerte de que el mundo puede despegarse prematuramente de fuentes de energía fiables y de eficacia comprobada como el petróleo y el gas, por la suposición errónea de que se implementarán alternativas rápidamente”, dijo Nasser.
El sector petrolero estará en el corazón de la energía mundial durante años, y la transición al uso de alternativas será “larga y compleja”, añadió.
La empresa estatal conocida formalmente como Saudi Arabian Oil, la exportadora de petróleo más grande del mundo, aumentó la producción y rompió un récord anual el año pasado, antes de que el reino llevara a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y a otros productores globales a reducir la producción para contrarrestar una superabundancia mundial.
Aramco también se encuentra en el epicentro de la estrategia a largo plazo del país para distanciar su economía del petróleo. El Gobierno planea vender cerca del 5 por ciento de la empresa en 2018, en una salida a bolsa que podría batir récords.
“Los inversores financieros se están absteniendo de hacer grandes inversiones muy necesarias en la exploración y el desarrollo a largo plazo del petróleo y la infraestructura correspondiente”, dijo Nasser, que responsabilizó parcialmente a lo que calificó de “argumentos engañosos sobre el pico de demanda de petróleo y sus recursos varados”.
Aramco planea gastar 300 mil millones de dólares en proyectos en los próximos diez años para mantener su capacidad sobrante de producción de petróleo, la mayor con diferencia de la OPEP, y aumentar la exploración y producción de gas convencional y no convencional, dijo Nasser.
“Trescientos mil millones de dólares en 10 años constituyen una declaración fuerte para Saudi Aramco, especialmente con el actual ambiente del petróleo como contexto, lo cual afectó el presupuesto saudita”, dijo Will Hares, analista de energía de Bloomberg Intelligence en Londres.
“Tal vez esto sea una reacción a sus inquietudes por un déficit de oferta a largo plazo debido a la inversión insuficiente registrada en el sector desde 2014”.
Aramco planea duplicar su producción de recursos gasíferos a 651 millones de metros cúbicos por día en los próximos diez años, dijo Nasser.
El aumento proyectado elevará la participación del gas en las concesionarias de energía eléctrica del reino a cerca del 70 por ciento, la tasa “más alta entre los países del G-20”, dijo.
Arabia Saudita también se comprometió a desarrollar la energía solar y otros recursos renovables, y la estrategia de reestructuración económica contempla que el país se transforme en “nada menos que una potencia solar”, manifestó Nasser.