Los precios del metal rojo cayeron el lunes a su nivel más bajo en dos semanas debido a que un aumento de los inventarios indicaba un suministro fuerte, por lo que el mercado pasaba por alto el temor a posibles huelgas de minas en Chile.
El mercado de metales fue presionado además por datos que apuntaron a una inflación más floja en China, uno de los mayores consumidores del mundo.
El cobre en la Bolsa de Metales de Londres perdió 0.1% a 5,824 dólares la tonelada tras bajar hasta 5,792 dólares, su nivel más débil desde el 27 de junio.
La inflación de los precios al productor en China se mantuvo estable en junio ante problemas por exceso de suministros en el sector de la siderurgia y señales de debilidad económica que pesaron sobre el panorama de los precios.
Los inventarios en los depósitos registrados ante la LME aumentaron en 4,900 toneladas a 319,975 toneladas el lunes. Los suministros han crecido 32% desde el 28 de junio. Las pérdidas del cobre fueron limitadas por el apoyo ofrecido por la posibilidad de huelgas. La chilena Antofagasta ha estado enfrentando posibles paros en dos minas desde la semana pasada.
El dólar se apreció a un máximo de dos meses contra el yen el lunes luego de que un sólido dato del mercado laboral estadounidense, publicado el viernes, impulsó los rendimientos de la deuda de ese país.
Un dólar más alto reduce el poder de compra de inversores fuera de Estados Unidos para las materias primas denominadas en la divisa.
Maritza Araneda*
El mercado debería pasar a una posición de déficit a fines de 2017. Los precios no deberían caer por debajo de los niveles actuales.
La tendencia en el precio de cobre en 2017 ha ido en aumento, principalmente por dos factores: bajas en producción y un dólar más débil.
En el primer trimestre de 2017, las interrupciones en las tres mayores minas de cobre mundial (Escondida, Cerro Verde y Grasberg) empujaron el metal rojo a los niveles más altos en 20 meses, alcanzando precios sobre $2.73 l/b.
Temas políticos también impactaron, de manera importante, en el comportamiento del precio durante 2017. Incertidumbres sobre la economía global y sobre la capacidad de Trump de cumplir su promesa de inversiones en industrias que usan intensivamente el cobre, erosionaron la mayoría de las ganancias logradas en el primer trimestre de 2017.
Sin embargo, es importante señalar que este escenario está cambiando y las noticias son buenas para lo que resta de 2017. El Índice oficial de Gestores de Compra (PMI por sus siglas en inglés) del sector manufacturero de China de junio llegó a 51,7. Una lectura sobre 50 indica que la actividad se está expandiendo, mientras que debajo de 50 indica recesión. Esto significa que el PMI se ha mantenido sobre 50 durante 2017, con proyecciones de mantenerse a este nivel por el resto del año. Esto es importante dado que el país asiático consume aproximadamente el 45% del cobre mundial. Adicionalmente, China ha confirmado que continuará creciendo a un 6,5% este año y un 6,3% en los próximos dos años.
En el segundo semestre del 2017 también existe un potencial de más alzas en precios en el corto plazo. Interrupciones en el suministro podrían continuar ya que otras mineras estarán renegociando acuerdos colectivos en 2017. Zaldivar, Collahuasi, El Teniente, Candelaria y Quebrada Blanca también tienen contratos pendientes de renovación.
En mi opinión, el mercado debería pasar a una posición de déficit (más demanda que suministro) a fines de 2017, lo que significa que los precios no deberían caer por debajo de los niveles actuales. Para fines de año, los precios deberían acercarse a US$2,70/lb. El consumo de China, en adición a mercados emergentes, debería soportan mayores precios del cobre por lo que estos deberían comenzar a ser más pronunciados y sostenido en 2018, con una mayor alza a fines de 2018, superando los US$3,00.
*Socia de KPMG Chile