Petrobras incluyó a Odebrecht en una lista negra a finales de 2014, cuando el gigante petrolero emprendió una revisión exhaustiva de sus contratos de infraestructura en respuesta a la Operación Lava Jato.
La constructora brasileña Odebrecht podría recuperar pronto la capacidad de competir por licitaciones de infraestructura con la estatal Petróleo Brasileiro tras una suspensión de tres años a raíz de una extensa investigación de corrupción, según dos personas familiarizadas con las discusiones.
Petrobras incluyó a Odebrecht en una lista negra a finales de 2014, cuando el gigante petrolero emprendió una revisión exhaustiva de sus contratos de infraestructura en respuesta a la llamada investigación Lava Jato, que reveló una red masiva de sobornos en la empresa que involucraba al contratista.
Una decisión sobre Odebrecht podría llegar en las próximas semanas, dijeron las personas, que pidieron anonimato en vista que las discusiones no son públicas. No hay fecha límite para que Petrobras anuncie su revisión.
Un portavoz de Petrobras se negó a comentar sobre el tema. Odebrecht dijo que no discutirá su relación con un posible cliente, pero agregó en una declaración por correo electrónico que ha estado adoptando medidas para mejorar la gobernabilidad.
LUCÍA SALINAS
Con 24 horas de anticipación y bajo un total hermetismo, los cuatro jueces federales junto a sus respectivos secretarios, dos fiscales y un funcionario de la Oficina Anticorrupción, llegaron ayer por la mañana a Washington. Hoy será el encuentro con funcionarios responsables del manejo de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero. El objetivo será tener proximidad con la información vinculada a la constructora Odebrecht, que en Estados Unidos firmó la delación premiada asegurando en las declaraciones de uno de sus directivos, Marcelo Odebrecht, que se realizaron "prácticas corruptas" en Argentina, soborno por intermediarios a funcionarios. A cuánto asciende la cifra, de dónde proviene la misma, quiénes fueron los funcionarios involucrados.
La ciudad no detiene su ritmo. En plena temporada de vacaciones de verano, con una temperatura que supera tranquilamente los 32 grados y con los turistas recorriendo los principales atractivos de la capital política de Estados Unidos, se colocan como el telón de fondo del encuentro que se realizará hoy a las 9.30 en una unidad que depende del Ministerio de Justicia, denominada Acta de Prácticas Corruptas Cometidas en el Extranjero (FCPA sus siglas en inglés).
Para la justicia norteamericana, el encuentro es uno más de los que tiene en agenda y para el desarrollo del mismo se movió con el mismo hermetismo yelosía respecto a la información sobre el desarrollo y contenido de la reunión. La condición de confidencialidad fue trasladada e impuesta como requisitos a los cuatro jueces federales, Daniel Rafecas, Sebastián Ramos, Marcelo Martínez De Giorgi y Sebastián Casanello que participarán junto a sus secretarios, y a los fiscales Franco Picardi y Sergio Rodríguez, titular de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas) y el representante de la Oficina Anticorrupción (OA), Ignacio Irigaray. Nada puede filtrarse con fines políticos, toda la información que se exponga sólo "podrá utilizarse para el avance de las causas judiciales", explicaron a Clarín fuentes oficiales.
La comitiva argentina llegó ayer por la mañana. Alojados en diferentes hoteles en función de lo que cada uno pudo ir consiguiendo, participarán del encuentro que se enmarca en el acuerdo de cooperación de información judicial que firmaron Estados Unidos y nuestro país. El objetivo es obtener información sobre las declaraciones de Marcelo Odebrecht, principal directivo del gigante brasileño que contó en nuestro país, durante el gobierno kirchnerista, con tres grandes proyectos de infraestructura que hoy son objeto de causas judiciales.
La declaración realizada en Estados Unidos por la constructora brasileña consigna que Odebrecht realizó transferencias "por más de 35 millones de dólares" (la cifra podría superar los 100 millones de dólares), a "intermediarios" para que el dinero "producto de una práctica corrupta", quede en manos de funcionarios. El dinero desembolsado entre 2007 y 2014, durante los gobiernos de Cristina Kirchner, "estaba vinculado a tres grandes proyectos de infraestructura en los que Odebrecht obtuvo beneficios por 278 millones de dólares".
"Lo que debe desentrañarse en este punto son al menos tres cosas:cuánto dinero se pagó, a qué intermediarios y de qué funcionarios fueron intermediarios", señaló una alta fuente oficial, y que se especifique "a qué proyectos de obra pública se referían".
El juez Casanello investiga a la firma brasileña por la construcción de la planta Paraná de las Palmas que adjudicó AySa, y se analizan los números de la obra sospechada de sobreprecios y pago de coimas. Su par Rafecas tiene la causa sobre la ampliación del gasoducto norte que Odebrecht obtuvo por 2.300 millones de dólares, también bajo la premisa de haber cobrado sobreprecios. Martínez De Giorgi y el fiscal Picardi investigan la construcción del soterramiento del tren sarmiento, que tiene una inversión de 3.000 millones de dólares. El juez Ramos tiene una causa vinculada a Petrobras por la venta de Transener y donde se involucra a Julio De Vido y a la firma Electroingeniería.
Como fruto de este viaje se quiere determinar la cifra final de sobornos pagados y de dónde surge dicha información; si hay registro de cuentas bancarias o extractos de movimientos de dinero. "Para una declaración así en Estados Unidos, Odebrecht tiene que contar con documentación respaldatoria, es una condición", señalaron fuentes allegadas al encuentro a este medio. El Gobierno espera, además, que se conozca la lista de funcionarios y continúen avanzando las causas judiciales en nuestro país.
Los jueces y fiscales federales, tienen la esperanza de que tras la reunión de hoy se imprima mayor celeridad en la respuesta de exhortos ya enviados a Estados Unidos vinculados a las causas sobre Odebrecht. Consideran que el encuentro con la justicia estadounidense es "inédito" y "sin precedentes", y todo deberá realizarse bajo una estricta confidencialidad.
