Vicepresidente de Corfo dijo que solo una transformación en la minera viabilizará una solución a los arbitrajes que mantienen.
“SQM requiere cambios sustantivos en su gobierno corporativo, que sean de carácter irreversible”. Ese mensaje transmitió el vicepresidente ejecutivo de Corfo, Eduardo Bitran, en la reunión que tuvo hace unas semanas con José María Eyzaguirre, abogado que representa a Potash Corp (PCS) en el país, uno de los accionistas de la minera no metálica, que se acercó para detallar el acuerdo que el 17 de abril firmaron con el grupo Pampa para no ejercer uno de los mecanismos a través de los cuales se ejerce el control en SQM.
Consultado al respecto, Bitran es claro en señalar que tras el encuentro “no hay cambios en la posición de Corfo respecto de SQM”, empresa con la que mantiene abiertos tres arbitrajes, los que buscan poner fin a los contratos que permiten la operación de la minera en el Salar de Atacama.
“Esto requiere que Julio Ponce Lerou pierda el control definitivo de esta compañía, porque le ha generado daños y una cultura interna de incumplimiento de las normas como política habitual, lo que termina afectando a Corfo, siendo lo más reciente los problemas ambientales detectados por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA)”, dice.
A juicio de Bitran, lo anunciado en abril es transitorio y no da garantías. Esta idea también se la ha entregado a interesados en ingresar a SQM, como la china GSR Capital, que según publicaron agencias internacionales estaría dispuesta a pagar del orden de US$ 1.900 millones por el 20% de la minera no metálica, pese a que una de sus principales unidades de negocios, como es el litio, depende hoy de la operación en el Salar de Atacama.
Bitran dice que a más tardar en 2023 la cuota autorizada por la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CChEN) se terminará, con lo que el principal negocio de SQM hoy, dados los altos precios del mineral, se terminará antes de 2030 cuando vence el contrato con Corfo.
Hasta hoy a las 12 de la noche tienen los interesados en comprar a un precio más atractivo hasta el 25% de la producción de litio que, bajo el nuevo acuerdo con Corfo, tenga Albemarle en Chile. El titular de la Corfo explica que hasta ayer jueves habían llegado nueve manifestaciones de interés por participar del concurso, que tendrá nuevas etapas para presentar proyectos que permitan dar valor agregado al mineral en territorio nacional, con iniciativas que podrían involucrar inversiones por hasta US$ 900 millones.
Aunque no quiso detallar nombres, según la plataforma del Lobby, Bitran se ha reunido con varias empresas por el proceso: una de ellas es la norteamericana The Alpha-En Corporation -donde participó la exministra Karen Poniachiky la otra es la coreana Posco, que estuvieron en junio con el vicepresidente ejecutivo.