Los últimos datos oficializados de producción hidrocarburífera en el país ratificaron dos escenarios: se mantuvo estable la extracción de gas y cayeron los volúmenes de crudo. En la Cuenca Neuquina, tanto en Río Negro como en Neuquén, las curvas de ambos hidrocarburos se cruzan desde 2014 a esta parte. La de gas sube y la de petróleo baja. Si bien los números no permiten hablar de un desplome, el impacto sobre las regalías comenzó a acumular peso.
Los valores de gas se mantuvieron casi sin alteraciones, en la comparación anual de marzo de este año, tanto en Neuquén (+1,9%) como en Río Negro (+0,7%). Sin embargo el alerta se encendió en la producción de petróleo, signada por una crisis internacional de precios que no termina de pasar y un esquema nacional tendiente a eliminar los beneficios de incentivo a la producción local.
Según datos relevados por el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG) en el tercer mes de 2017 las cuencas argentinas produjeron 484,5 mil barriles diarios. La cifra representó una caída del 8% (36,9 mil barriles/día menos).
A las variables vinculadas al estancamiento del precio internacional del commodity, se sumó además una retracción en la economía general que empujó hacia abajo la demanda del combustible procesado en las refinerías, principalmente el gasoil.
Para las provincias de la cuenca el panorama parece más complicado. En Río Negro la extracción de crudo cayó por encima de la media nacional: 10%. En tanto en Neuquén la merma fue de 4,8%. El territorio neuquino depende más del gas que del crudo, pero en la cuenta final de las regalías esa caída dejó un fuerte mensaje.
Las dos provincias vieron pasar, en la comparación anual, unos 250 mil barriles menos en el mes. Este volumen representó un resta en las regalías de 25,6 millones de pesos, algo que si se anualiza puede terminar en un dolor de cabeza para los ingresos locales.
Producto de la performance de las petrolera, la administración rionegrina dejó en el camino 10,8 millones de pesos. En tanto la neuquina dejó de anotar unos 14,8 millones de pesos.
10% menos de petróleo sacaron las operadoras en Río Negro al comparar marzo de 2017 con el mismo mes del año pasado.
8.300 barriles diarios menos se extrajeron del subsuelo de la Cuenca Neuquina.
36.900 barriles de petróleo por día perdió el país en el mes analizado. La baja significó una merma del 8% en el total de las cuencas nacionales.
La Cuenca Neuquina perdió en lo que va del año el 8% de sus puestos. Los gremios frenaron la paritaria exigiendo cambios.
En lo que va del año la industria petrolera de Río Negro, Neuquén y La Pampa anota más despidos que incorporaciones. La prometida reactivación del sector todavía no llega. Según los sindicatos de la actividad, comandados por Guillermo Pereyra y Manuel Arévalo, ya acumulan 2.041 desvinculaciones. Sólo 42 operarios, del sector Jerárquicos, consiguieron reinsertarse.
La mayoría, que debía ingresar al plan nacional de subsidios, aún no cobraron un solo mes de ese acuerdo.
Con este escenario los dos gremios del sector se plantaron en la negociación paritaria y la paralizaron hasta tanto cesen los despidos, se abone el plan nacional de transformación productiva y se revean las complicaciones surgidas en las jubilaciones por una nueva reglamentación que, aseguran, echó por tierra la festejada Resolución 897 de 2015.
Los más de dos mil despidos no sólo impactan con fuerza en los gremios, sino que representan más de un tercio de los puestos perdidos en la industria de los hidrocarburos durante el último año, según el ministerio Trabajo de nación.
El sindicato del Petróleo y Gas Privado que conduce Pereyra es el que tuvo la mayor cantidad de afectados. “Hay 1.700 compañeros despedidos a través del artículo 241, de rescisión de contratos de mutuo acuerdo, y la mayoría no están cobrando aún el plan nacional”, indicó.
Para el sindicato de Petroleros Jerárquicos, Arévalo contabilizó 341 despedidos, de los cuales 333 solicitaron acogerse al plan nacional. Aseguró que recién en los últimos días comenzaron a percibir el pago, salvo un grupo que recién el mes entrante accederá a los 20.000 pesos acordados.
“Ocho trabajadores se jubilaron o se pasaron a autónomos, y de los restantes 333 sólo 42 han podido reingresar al mercado”, explicó Arévalo en diálogo con “Río Negro Energía”.
Pero entre quienes se acogieron a la jubilación también hay problemas, ya que 120 trámites fueron rechazados por la Anses por considerar que sus tareas no corresponden al régimen especial. De ellos 90 son Jerárquicos y 30 de Petroleros Privados y representan el inicio de una problemática mayor. “Nosotros tenemos muchos veteranos para jubilarse y ahora nos dicen que no porque son mecánicos, electricista, jardineros o gastronómicos”, advirtió Arévalo.
2.041 son los trabajadores despedidos entre los sindicatos de Petroleros Privados y Jerárquicos desde enero.
42 son los Jerárquicos que tras los despidos lograron reinsertarse en el mercado.