Cinco iniciativas, repartidas en Ollagüe y San Pedro de Atacama, solicitaron terrenos al ministerio de Energía para desarrollar sus plantas.
Cinco solicitudes de concesión de terrenos para la explotación de energía geotérmica suma el ministerio de Energía en la provincia El Loa, proyectos que en total requieren 61.676 hectáreas en las comunas de San Pedro de Atacama y Ollagüe. Poblado, este último, donde Cerro Pabellón, la primera central geotérmica de Sudamérica, genera desde abril sus primeros kWh de energía.
Los procesos vigentes a marzo de 2017 corresponden a los proyectos Azufre Norte I y Azufre Oeste de Geotérmica del Norte, en la comuna de Ollagüe, con solicitudes de 3.000 y 3.220 hectáreas (ha), respectivamente.
Iniciativas energéticas a las que se suman Alitar, de Colbún, con 20.000 ha; Piuquenes I y Piuquenes II, ambos de Energía Andina; con 19.980 y 15.476 ha respectivamente, emplazadas en San Pedro de Atacama.
Solicitudes, recalcan en la seremi de Energía, que en el caso de otorgarse constituyen una autorización inicial por parte de la autoridad ministerial, para que el titular de la iniciativa pueda, en el futuro , desarrollar un proyecto de explotación geotérmica propiamente tal, el que para llegar a concretarse, además, debiese pasar por una etapa posterior de evaluación ambiental.
Sobre el desarrollo de este tipo de energía renovable no convencional (ERNC), el ministro de Energía, Andrés Rebolledo, destacó en su reciente visita a Calama, que la geotermia “es una tecnología importante, porque es renovable y produce las 24 horas, lo que hace frente a otras tecnologías que son variables y que no tienen la posibilidad de suministrar energía durante todo el día, lo que la geotermia sí logra”.
“Por lo tanto, prosiguió el personero, nos parece importante que la geotermia se incorpore más crecientemente a la matriz energética, para lo cual estamos trabajando entre la Asociación Chilena de Energías Renovables (Acera), el ministerio de Energía y un par de gremios asociados a la producción geotérmica, para ver qué elementos se pueden incorporar para dar algunos incentivos, entendiendo que no avanzaremos hacia un subsidio”.
En este sentido, Rebolledo informó que el ministerio tiene un programa financiado por un organismo internacional que le permite a quienes desarrollen esta tecnología, tener un apoyo en las etapas de exploración, “lo que finalmente constituye un apoyo, porque si el proyecto no termina siendo todo lo productivo que se planeaba, hay una restitución al menos en esa etapa de exploración (…) Hoy estamos trabajando para ver si es posible avanzar en otra dimensión y espero que en los próximos meses tengamos una propuesta consensuada con el sector”.