Aún no está definida la localización exacta pero el gobierno la proyecta en la región. La obra está pautada para levantarse entre el 2019 y el 2020. Primero se terminará Atucha III, prevista para el próximo año. Los dos proyectos tendrán aportes de China por 12.500 millones de dólares.
La idea de que Patagonia sea el lugar en el que se construirá la quinta central nuclear del país se analiza en los escritorios de los que deciden en materia energética. Todavía no se comunicó oficialmente, pero según pudo averiguar “Río Negro”, se avanza para que Atucha IV desembarque en la región.
La central Embalse está ubicada en Córdoba. Las Atucha -I y II– fueron emplazadas en los terrenos de la localidad de Lima, Partido de Zárate, a 100 Km de la Ciudad de Buenos Aires. Se llaman así, porque la familia que cedió los terrenos pidió que su apellido, Atucha, quede plasmado en las centrales. La cuarta, que se está por levantar, también será una Atucha, pero la quinta será desterrada.
“Creemos que lo mejor es buscar un nuevo lugar no sólo para ésta, sino para la expansión futura. Un poco se sabe dónde estará. Trabajamos estos meses en buscar el nuevo sitio, que esté cerca de una fuente de agua fría, ya sea por un río caudaloso o el mar y estamos muy avanzados”, dijo el subsecretario de Energía Nuclear, Julián Gadano, pero no quiso dar precisiones sobre el lugar.
Según explicó Gadano en una visita a Embalse, en China se firmará "el primer capítulo del contrato" que es el que señala el marco general por el que la asiática CNNC financiará la construcción de las nuevas plantas y, en una de ellas, proveerá el equipamiento.
El viernes, las operadoras Núcleoeléctrica Argentina (NASA) y la subsecretaría anunciaron que el 17 de este mes se firmará el primer avance del “contrato comercial” con China para la construcción de las dos nuevas centrales. Se trata de una inversión de 14.000 millones de dólares de los cuales unos 12.500 millones serán financiados por el país asiático.
La cuarta central se construirá, según planes de gobierno, entre 2017 y 2018 y seguirá la senda por la que avanzaron las otras. Incluso, hay avances sobre su emplazamiento. Según informa NASA, en enero de este año se hizo la escritura para la compra y se tomó posesión de 110 hectáreas linderas a las Centrales Atucha I y II.
La tecnología que utilizará la III será Candu, modelo que emplea uranio natural y agua pesada presurizada. Tendrá 745 MW de potencia bruta y 30 más 30 años de vida útil. Según Gadano ésta será la última que tendrá un reactor de uranio natural.
Consultado sobre el monto de financiación y el costo, Gadano aclaró que el Ministerio de Energía "no participa de esa negociación, sino que la lleva adelante el Ministerio de Finanzas", pero explicó que el monto de la construcción de las nuevas Atuchas rondará los u$s 15.000 millones ya que "China financiará el 85% por un total de 12.500 millones con un Costo Financiero Total de 4,8%, en tanto el resto serán aportes del Tesoro Nacional".
El acuerdo por estas dos centrales se había firmado en la administración anterior, pero Gadano explicó que les llevó quince meses poner en marcha un nuevo contrato "porque lo que firmó el ex ministro de Planificación, Julio De Vido era lesivo para el país: todas las responsabilidades eran de nuestro lado".
Luego de calificar a la gestión del mercado eléctrico de la última década como la de "un modelo un poco soviético que destrozó el mercado eléctrico", dijo que con la actual "lo estamos reconstruyéndolo y estimamos en nuestro escenario que para el 2015 el 10% de la energía sea nuclear".
En ese contexto, Gadano que la semana pasada le presentó este plan de expansión al presidente Macri explicó que la cuarta central comenzará a construirse en 2017 y ya tiene lugar establecido: la estatal Na-sa ya compró 110 hectáreas linderas a las Centrales Atucha I y II en el partido de Zárate.
En este caso, tendrá una potencia bruta de 745 megawatts con una vida útil de 30 años con la posibilidad de extenderla por 30 más.
En este caso, el funcionario explicó que la locación "casi que está decidida", pero no será nuevamente en Zárate. Solo especificó que será "cerca de un río caudaloso o del mar".
En el caso de la quinta central también tendrá la particularidad que será la primera que utilizará uranio enriquecido y agua liviana, afiimó El Cronista.
La próxima, la quinta, se construirá entre 2019 y 2020 (o 24 meses después de que se termine la otra) con una vida útil de 60 años. Esta planta utilizará uranio enriquecido y agua liviana y brindará al Sistema Interconectado Nacional unos 1.150 MW de potencia bruta. La nueva planta implicará un desafío para el país. “Tanto para la nucleoeléctrica que tendrá que operar reactores diferentes, como para la Comisión Nacional de Energía Atómica que va a tener relación con los combustibles, para la actividad regulatoria que va a regular una central de potencia y para toda la industria argentina”, resaltó Gadano.
En medio de llamados de última hora que plantean discrepancias, errores, dudas sobre el contrato a firmar en China y que no hacen más que aumentar la ansiedad y el nerviosismo de Gadano y Semmoloni la Argentina se prepara para tener su primera interacción con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la organización a la que el presidente Macri mostró mayor interés en participar, y será nuclear. "El 7 de junio Argentina va a ser miembro activo de la Agencia Nuclear de la OCDE", explicó Gadano, envuelto en un mameluco amarillo por los pasillos de Embalse.
Más energía
5 centrales nucleares habrá en el país en tres años. Ya están Embalse, Atucha y Atucha II. Atucha III y IV, en camino.
La senadora nacional Nancy González presentar un pedido de informes al Poder Ejecutivo Nacional para que explique y detalle los alcances del proyecto que impulsa para la construcción de una nueva central nuclear que se asentaría en la Patagonia. En Chubut ya hubo una señal de alarma cuando al aprobarse el presupuesto nacional de este año se incluyeron los fondos para construir una planta de uranio en Cerro Solo.
Un proyecto del Gobierno nacional para construir en la Patagonia la quinta central nuclear argentina, encendió ayer las luces de alarma en la provincia en general y en el Congreso en particular, donde la senadora nacional Nancy González (FpV) adelantó que hoy presentará un pedido de informes al Ejecutivo Nacional.
En diálogo con El Patagónico, la legisladora chubutense reconoció que conocía la versión del proyecto que el Gobierno nacional tiene para construir una central nuclear, la Atucha IV, en la Patagonia, sin que hasta el momento se conozca la ubicación elegida.
"Conocimos el tema por alguna publicación y por eso, de inmediato, decidimos enviar mañana (por hoy) un pedido de informes, para que el Ejecutivo Nacional explique si este proyecto existe y detalle en concreto dónde quiere asentar la nueva Central de Atucha", explicó.
La legisladora aclaró que, salvo esa publicación, que desencadenó el inmediato pedido de informes, en su despacho y en el Senado en general no existe ninguna información oficial sobre la intención del Gobierno nacional.
"Vamos a enviar el pedido de informes, que tendrán que contestar de manera urgente, tanto el Ministerio de Energía, que conduce Juan José Aranguren, como el de Ambiente de Sergio Bergman", detalló.
La construcción de la Central Nuclear encendió las alarmas en Chubut por una clara razón: luego de la aprobación del presupuesto nacional 2017 se conoció que en el mismo el Gobierno había ingresado una partida para la construcción de una planta piloto para la producción de uranio en Cerro Solo, yacimiento ubicado en la meseta chubutense.
La obra, como informó El Patagónico, apareció en el listado de las 39 ejecuciones que Nación financiará en Chubut y que de acuerdo a lo que aseguraron a este diario tanto el gobernador Mario Das Neves como el diputado nacional Santiago Igon, fue incluida a último momento.
De acuerdo a ese renglón presupuestario, que a partir de la difusión generó un fuerte oposición de Das Neves, la obra estaría concluida en 2019, justamente el año en el que se piensa construir la Central Nuclear en la Patagonia. Y no es descabellado pensar que también se podría habilitarla cerca de la planta de uranio.
Otro tema que debe tenerse en cuenta es que más allá de la prohibición a la minería que rige en Chubut por la ley 5001 y que es ratificado permanentemente por el Gobierno provincial, los permisos para el cateo y exploración del uranio no pasarían por la provincia sino que dependen de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) por considerarse al mineral como un combustible.
En su momento, la inclusión presupuestaria no solo recibió el rechazo de legisladores nacionales, sino también el del gobernador quien, a partir de las publicaciones de este diario, aseguró que se trató de una partida que "metieron a último momento". Afirmó que se trataba de "una decisión del Gobierno nacional que no comparto. Es un atropello a la autonomía de provincia y de la gente, instalar este tema".
El gobernador recordó entonces que si la provincia tiene dudas con el Proyecto Navidad, que para la extracción de plata delineó Pan American Silver, "con más razón está objetado el de uranio".
Das Neves también mencionó el trabajo "muy silencioso" que su gestión realiza en la meseta intermedia para generar alternativas productivas. "Preferimos trabajar reservadamente, venimos avanzando en ello. No es cierto que la minería es la solución, no digo que no genera riqueza pero genera una depredación y no voy a permitir que en esta provincia se contamine a nadie", concluyó.