Presidente de la compañía cuestionó a la autoridad ambiental, y dijo que se debe modificar la reforma tributaria .

La visión de Colbún es clara: la demanda eléctrica seguirá deprimida al igual que en 2016, en línea con el desempeño económico. Más allá de ello, la firma sigue adelante con sus planes de inversión.

Según señaló el gerente general de la generadora del grupo Matte, Thomas Keller -tras la junta de accionistas- la compañía echará a andar la Central Hidroeléctrica La Mina durante mayo, mientras seguirá avanzando en los estudio y en la socialización del proyecto hidroeléctrico San Pedro en la Región de Los Ríos, iniciativa que en 2015 terminó anticipadamente su tramitación por falta de antecedentes, y cuyo estudio será finalmente reingresado en 2018. “Nuestra meta es culminar el proceso de socialización del proyecto dentro de este año y lo mismo es válido para la confección definitiva del Estudio de Impacto Ambiental. El 2018 (lo vamos a ingresar) de todas maneras”, precisó Keller.

Asimismo, puntualizó que el ingreso de un socio a la central Nehuenco está recién en etapa preliminar. “El modelo al que aspiramos es a una asociación en la cual potenciemos los activos que operamos en Colbún con alguien que tenga una posición interesante en el suministro de gas”, dijo.

En la misma línea, precisó que la empresa está aún discutiendo el futuro de la sociedad de HidroAysén con Enel. “Esas conversaciones aún no llegan a término. Van bien encaminadas, pero aún no llegan a término”.

Más allá de lo anterior, el grupo ha aprovechado la migración de clientes regulados a libres. Según aseguró Keller: “Esto es un desafío para el sistema, pero también una oportunidad. En Colbún hemos aprovechado esa oportunidad y hemos captado del orden de 500 GWh de demanda durante los primeros meses del año en el contexto de ese fenómeno”.

En la oportunidad, el presidente de la compañía Bernardo Larraín Matte se mostró critico frente al actuar de la autoridad ambiental. “El Sistema de Evaluación Ambiental ha dado evidentes muestras de que hay ciertos problemas, o sea cómo es posible que un proyecto que se tramita ambientalmente por 2-3-4 años, en la última etapa de evaluación se establezca una instancia política que aplique un criterio político para definir el proyecto habiendo pasado por todos los criterios técnicos”, destacó.

Asimismo enfatizó que se debe modificar la reforma tributaria: “En la discusión chilena hay bastante consenso que hay que hacer una reorientación de la reforma tributaria y una simplificación y eso lo comparto absolutamente. Y la reorientación va en la línea de que haya mayores incentivos para la inversión”, concluyó.