Nueva generadora -ubicada en la zona industrial- aporta 517 MW al sistema eléctrico.
El próximo 25 de mayo será oficialmente inaugurada la central termoeléctrica Kelar. Esta nueva generadora construida para abastecer las operaciones de Minera Escondida y BHP Billiton en la zona, está emplazada en el sector portuario-industrial de Mejillones y requirió una inversión de US$600 millones.
Se trata de una unidad de ciclo combinado compuesta por dos turbinas de combustión y una unidad de vapor. La potencia neta máxima que inyectará al Sistema Interconectado del Norte Grande (SING) es de 517 MW.
Pese a que la central a gas natural comenzó a operar comercialmente en diciembre pasado, BHP Billiton sólo confirmó su inauguración hace pocos días, a la cual se espera asistan las más altas autoridades de gobierno y de los sectores minero y energético.
Para permitir la interconexión de la central Kelar al SING, BHP Billiton además debió materializar el proyecto SitraMEL (Sistema de Transmisión de Minera Escondida), que consistió en la construcción de la subestación eléctrica Kapatur y 70 km de línea de transmisión a 220 kV hasta la subestación O’Higgins.
La construcción y operación de la Central está a cargo de un consorcio, formado por las compañías coreanas Kospo (65%) y Samsung C&T (35%), que se adjudicó la licitación internacional a la que convocó BHP Billiton en 2013.
Este proceso fue también un incentivo para atraer a un nuevo generador al SING, favoreciendo así la competencia de este mercado.
Estabilidad
Respecto de los beneficios que esta nueva central a gas traerá al sistema, el gerente de Energía de BHP Billiton, Christian Clavería, sostuvo que “brindará mayor estabilidad y versatilidad al SING, permitiendo así una mayor y mejor integración de la creciente oferta de fuentes renovables intermitentes”.
“Esto hará que el sistema no sólo sea más seguro, sino más competitivo y diverso”, explicaron.
Asimismo, permitirá reducir notoriamente las emisiones de efecto invernadero en un sistema cuya generación es mayoritariamente en base a carbón.
Según cifras de la Seremi de Energía, al 31 de marzo la capacidad instalada de generación eléctrica en la región estaba compuesta mayoritariamente por centrales a carbón (2.500 MW), equivalente al 41% del total de la matriz, seguida de gas natural (2.193 MW, 36,2%) y fotovoltaicas (721 MW, 11,9%).
Más atrás se sitúan los derivados (308 MW, 5,1%), eólicas (301 MW, 5%) y geotérmicas (20 MW, 0,3%).
Sin embargo, las proyecciones son que el carbón siga perdiendo progresivamente participación, en concordancia con decisiones de compañías como Engie, que ya anunciaron hace unos meses que no construirían más centrales de ese tipo en el país.
Esta última confirmó en octubre pasado que no persistiría con su segunda central a carbón en el marco del proyecto Infraestructura Energética Mejillones (pese a contar con Resolución de Calificación Ambiental), ni con su proyecto en Punta Tames, que también consideraba una central a carbón.
