El directorio de Salar de Maricunga S.A. estará conformado por tres ejecutivos de Codelco. El objeto de la sociedad será continuar con la tramitación del Contrato Especial de Operación de Litio (Ceol) para poder explotar y explorar el mineral.
Pasos relevantes está dando la estatal Codelco para ingresar al negocio de la explotación de litio, alineándose de esta manera con la Política Nacional para la Minería No Metálica y la Gobernanza de los Salares, presentada por el Gobierno a inicios del año pasado.
¿La razón? Según se puede leer en las actas del último directorio de la minera, el 31 de marzo, la mesa autorizó la creación de una filial de Codelco para que continúe la tramitación formal del Contrato Especial de Operación de Litio (CEOL) ante el Ministerio de Minería para poder explotar y explorar litio.
Dicha sociedad, denominada Salar de Maricunga S.A., está en proceso de constitución, pero de momento ya está claro su gobierno corporativo: será administrada por un directorio de tres miembros, para lo cual Codelco propuso al gerente de Administración y Finanzas, Alejandro Rivera; el vicepresidente de Gestión de Recursos Mineros y Desarrollo de la estatal, José Pesce Rosenthal, y Javiera Estrada, quien también figura como directora de otras filiales de Codelco, para que sean parte de la mesa.
Esta sociedad contará con un aporte inicial de unos US$286 mil, presupuesto que fue aprobado en la misma cita.
A esto se suma que el directorio instruyó a que, una vez que se concluya la búsqueda del socio, la estatal “aporte el dominio de todas las concesiones mineras de Codelco que forman parte del proyecto litio en el Salar Maricunga, sujeto al cumplimiento previo de lo ordenado en la Ley 19.137”. Se agrega que: ”En forma previa a la elección del socio, el directorio deberá acordar y autorizar los términos y condiciones de la asociación que se tendrá con dicho socio”, se lee en el acta.
Y concluye: “(Se) autoriza al presidente ejecutivo para que, por sí o por mandatarios debidamente facultado, celebre todos los actos y suscriba los contratos, formularios y documentos que sean necesarios para dar cumplimiento a los acuerdos precedentes”.
Dicha paso se está dando en paralelo a los análisis de las expresiones de interés individuales o en consorcio, para desarrollar los proyectos de litio en los salares de Maricunga y Pedernales, ubicados en la Región de Atacama, en el norte chileno. Este proceso comenzó en enero, y concluyó en febrero; ahora, la estatal está analizando las propuestas recibidas y se desconoce cuántas empresas aún siguen en carrera.
Codelco inició este proceso luego que se le sugiriera aprovechar el boom del litio, utilizando el potencial del 18% que tiene en el salar de Maricunga y del 100% del de Pedernales. Esto fue tomado en cuenta por la estatal que, semanas después, aprobó la realización de una licitación para llevar adelante una fase de exploración de sus reservas de litio y conocer su potencial, y posteriormente, informó que analizará junto a terceros la factibilidad de desarrollar proyectos de litio en dichos salares, marcándose como hito enero pasado cuando dio el puntapié inicial para la búsqueda de expresiones de interés, individuales o en consorcio en dicho negocio.
Durante el mismo mes, pero en la sesión del 3 de marzo, el directorio de Codelco presidido por Óscar Landerretche, también autorizó la inscripción de una línea de bonos dirigida al mercado general en el registro de valores de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) por un monto de hasta UF40 millones -unos US$1.616 millones-, con vencimiento a 30 años.
Esto, considerando “que la emisión de los valores en los mercados financieros nacionales constituyen una potencial fuente de financiamiento” y “la necesidad de obtener recursos económicos de mediano y largo plazo para potenciar proyectos de inversión y restaurar pasivos de la corporación”.
La última emisión de bonos de la estatal se realizó en agosto pasado, cuando Codelco inscribió una línea de bonos por UF10 millones a 10 años plazos en formato bullet, equivalente a unos US$390 millones al tipo de cambio de ese entonces.
Según se indicó en dicha fecha, “los fondos provenientes de la colocación de dichos bonos se destinarán en un 50% a financiar inversiones y en un 50% a refinanciar pasivos de Codelco”.
