El cobre repuntó el miércoles desde un mínimo de casi dos semanas, después de que los inversores se aprovecharon de una corrección para reconstruir sus posiciones largas en medio de persistentes temores sobre el suministro, incluida una huelga en la mayor mina de cobre del mundo, situada en Chile.
El cobre repuntó el miércoles desde un mínimo de casi dos semanas, después de que los inversores se aprovecharon de una corrección para reconstruir sus posiciones largas en medio de persistentes temores sobre el suministro, incluida una huelga en la mayor mina de cobre del mundo, situada en Chile.
Con anterioridad, el metal rojo se había unido a una liquidación en las bolsas, el crudo y otras materias primas, por la percepción en el mercado de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no está logrando implementar sus planes para bajar impuestos e impulsar el gasto en infraestructura.
El cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) avanzó 0.6%, a 5,808 dólares la tonelada, luego de caer más temprano a 5,715 dólares, su precio más bajo desde el 10 de marzo.
Los metales obtuvieron respaldo de un dólar más débil, que alcanzó un mínimo de cuatro meses frente al yen, mientras el Índice Dólar tocó su cota más reducida desde el 3 de febrero. Las acciones cayeron, empujando a los inversores a la seguridad de la deuda gubernamental, el oro y la divisa japonesa.
En el lado de la demanda china, una fuente dijo que las existencias de cobre registradas en Shenzhen son abundantes y que las fundiciones del país no tienen prisa por comprar envíos de concentrado del metal rojo.
En Chile, Minera Escondida, controlada por BHP Billiton, decidió suspender proyectos en desarrollo vinculados al yacimiento, debido a la imposibilidad de acceder a las instalaciones en medio de la huelga de sus trabajadores, que dura ya 42 días. Sindicato y compañía tenían previsto reanudar sus conversaciones el miércoles.
Por otra parte, el plomo lideró las ganancias en la LME, subiendo 4.1% y cerrando a 2,367 dólares la tonelada, su máximo desde el 15 de febrero. Los inventarios disponibles del metal en la LME bajaron 36%, lo que hace temer escasez del suministro.
En otros metales, el níquel fue el que más cayó, cediendo 1.4%, a 10,020 dólares; el aluminio perdió 0.3%, a 1,922 dólares; el zinc ganó 1%, 2,857 dólares; y el estaño avanzó 0.2%, a 20,440 dólares.