Presidente Mauricio Macri anunciará mañana la firma de un acuerdo automotriz que apunta a "mejorar la competitividad" de esa industria golpeada por la caída de la economía, cuyo objetivo es llegar a producir un millón de vehículos en los próximos siete años.
El Poder Ejecutivo avanzará así con un segundo acuerdo productivo tras el anuncio del nuevo convenio colectivo para la explotación del yacimiento de Vaca Muerta.
El acto de firma se realizará desde las 9:30 en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, donde estarán también el ministro de Producción, Francisco Cabrera, y las autoridades de las cámaras empresarias del sector y de los gremios, como SMATA y UOM.
Allí se harán "anuncios de inversión a partir de la firma de un acuerdo con las cámaras y los gremios", que establece cambios "en una parte del convenio" colectivo de trabajo del sector automotriz, con el objetivo de que "se invierta más y sean mas competitivos", confiaron fuentes oficiales a NA.
La meta es lograr inversiones por 5.000 millones de dólares volcadas a la producción de nuevos modelos y a fabricar un millón de autos en los próximos siete años (750.000 unidades en 2019 hasta llegar en 2023 al total estipulado).
Entre otras cuestiones, se intentará producir menos modelos por terminal y tratar de que cada una exporte uno de sus vehículos, que solo se fabrique en Argentina, al resto del mundo.
También aumentar la integración de autopartes producidas localmente a 35% para 2019 y a 40% para 2023 y diversificar los mercados de exportación con el fin de vender al menos un 35% de la producción a destinos extra Mercosur, a fin de esquivar la crisis brasileña.
Y se apunta a crear unos 30.000 puestos de trabajo nuevos a través de herramientas de capacitación y mejoras en la productividad, disminuyendo el ausentismo al 5% para 2019 y al 3% para 2023.
Para llegar a estas metas, el acuerdo establecerá compromisos del sector público, los empresarios y los trabajadores. Estos serán monitoreados por una mesa de trabajo integrad por las tres partes.
A su vez, trascendió que el Gobierno evalúa ofrecerle a las autopartistas y también a las terminales producir en la provincia de Tierra del Fuego donde se beneficiarían con las ventajas impositivas y aduaneras que les otorga el régimen promocional que regula su funcionamiento por la ley 19.640, que actualmente alcanza a la industria de electrodomésticos y de computadoras.
Debido a la crítica situación que atraviesa el mercado interno y a la caída en las ventas a Brasil, algunas automotrices habían anunciado suspensiones a principios de este año.
Por ejemplo, Volkswagen dispuso esa medida para unos 600 trabajadores que prestan servicios en su planta de General Pacheco, mientras el gremio SMATA denunció que General Motors haría lo propio para 350 operarios de su planta santafesina de General Alvear.