El presidente de la Sociedad de Minería, Petróleo y Energía, Luis Marchese, dijo que en los próximos cinco años se ejecutarán proyectos mineros por US$ 14,000 millones.
Las empresas mineras en Perú están preocupadas por el retraso de millonarios proyectos que esperan permisos del Gobierno, lo que afectaría al crecimiento de la producción de metales, dijo la Sociedad de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE).
El presidente de la SNMPE, Luis Marchese, dijo que en los próximos cinco años se ejecutarán proyectos mineros por US$ 14,000 millones, de un cartera de US$ 46,990 millones, según estimaciones del Gobierno.
La inversión es la tercera parte de lo que se ha invertido en los últimos cinco años, agregó el ejecutivo.
“Me gustaría que fuese más ambiciosa, US$ 14,000 millones en cinco años es el equivalente a 800,000 toneladas de producción; el país tiene para más”, afirmó Marchese.
Perú, uno de los mayores productores de metales del mundo, lanzará esta semana medidas para reducir las trabas burocráticas y prevenir los conflictos sociales con el propósito de reactivar las inversiones.
El ministro de Energía y Minas, Gonzalo Tamayo, estimó a inicios de febrero que la inversión minera se recuperaría en el 2018 con proyectos como Quellaveco, postergado por Anglo American, de unos US$ 5,000 millones.
Sobre Quellaveco, Marchese -quien es gerente de Anglo American en Perú- estimó que a mediados del 2018 podrían mejorar las condiciones económicas para retomarlo.
Perú también planea adjudicar este año el proyecto de cobre Michiquillay, en la región de Cajamarca, que fue devuelto al Estado en 2014 por Angloamerican por un ajuste en sus planes.
“En Cajamarca hay tres yacimientos juntos, Michiquillay, Galeno y Conga, así como un yacimiento un poco más allá que es La Granja, que si uno suma lo que podría producir esos tres yacimientos estamos hablando de 800,000 toneladas o 1 millón de toneladas de cobre”, afirmó Marchese.