Goldman Sachs espera que los inventarios mundiales de crudo sigan disminuyendo debido a los recortes en la producción y al fuerte crecimiento en la demanda, aunque las existencias podrían subir en Estados Unidos.

"No consideramos que las recientes alzas en Estados Unidos sean un problema para nuestras previsiones de una baja gradual en los inventarios, considerando el hecho de que el resto del mundo ya está mostrando señales de ajuste", afirmaron analistas del banco en una nota fechada el 21 de febrero.

"Dada nuestra proyección sin cambios de crecimiento de 1,5 millones de barriles por día para el 2017, este nivel base de demanda más alto debiera compensar plenamente los niveles más alto de producción de Estados Unidos", dijo Goldman.

El banco de Wall Street reiteró su previsión de que los precios del Brent y del West Texas Intermediate subirán a US$59 y US$57,50 por barril, respectivamente, en el segundo trimestre, antes de caer a 57 y 55 dólares el resto del 2017.

Los precios del petróleo caían levemente el miércoles, aunque se mantenían cerca de máximos de varias semanas.

El aumento en la producción de crudo y gasolina en Estados Unidos ha empujado los inventarios a récord máximos arrojando una sombra de duda sobre los precios, que treparon después de que la OPEP y otros países acordaron recortar el suministro en unos 1,8 millones de barriles por día.

El petróleo bajó con los mercados dudando sobre las posibilidades reales de alcanzar un equilibrio entre oferta y demanda, especialmente sobre las posibilidades de reducción reales por parte de la OPEP. Además, Exxon recortó de sus libros un 19% de las reservas.

En Nueva York el barril de ‘light sweet crude’ (WTI) bajó 74 centavos de dólar hasta los u$s 53,59 en los contratos para entrega en abril;  los cuales se inauguraron  en esta jornada.

En Londres, el barril de Brent para abril perdió 82 centavos y cerró en los u$s 55,84.

La noticia principal en el mercado petróleo fue la reducción de las reservas estimadas de Exxon Moblie. Se trata de una reducción 3.000 barriles, lo que implica una desinversión en u$s 16.000 millones.

El recorte de un 16% es el más grande en toda la historia moderna de Exxon (desde el ‘M&A’ que le dio vida en 1999). La decisión se debe a que con los precios actuales esas reservas no podrán ser explotadas, por lo menos, en los próximos años.

Entre otros factores, el mercado estuvo atento a las declaraciones de la Reserva Federal, que nuevamente anticipó una pronta suba de tasas, y sobre cómo reaccionará la divisa estadounidense. En la jornada, el dólar bajó, sin embargo, las perspectivas del mercado son de un fortalecimiento.

En los hechos, los precios no hicieron más que corregir desde las ganancias del martes en Nueva York en donde alcanzaron su mejor valor del año.

A falta de novedades relevantes, los inversores pasaron la jornada tratando de determinar las posibilidades ciertas de que en los próximos meses se alcance un punto de equilibrio entre oferta  y demanda.

La OPEP ha multiplicado declaraciones en las que afirma estar bombeando menos, tal como pactaron sus miembros. Sin embargo, hay duda sobre su futuo porque el pacto finaliza a mitad de año.

“La cuestión es saber por cuánto tiempo la OPEP reducirá la  producción dado que el acuerdo no la compromete más que hasta  junio”, dijo Enrico Chiorando, analista de Love Energy.