Los precios de perforación en aguas profundas han disminuido 27.7% en el último año, de acuerdo con la consultora Wood Mackenzie.
Pemex planea siete nuevos farmouts en bloques en las provincias petroleras de aguas profundas de Cinturón Plegado Perdido y la Cordillera Mexicana.
“Anteriormente, no teníamos ni la experiencia ni el conocimiento para desarrollar nuestros recursos de hidrocarburos en aguas profundas; Sin embargo, la reforma energética ha cambiado esto”, indicó José Antonio Escalera Alcocer, director de Exploración de la división de Exploración y Producción de Pemex, en una presentación en el México Expo Energy Congress 2017 en la Ciudad de México.
De acuerdo con Escalera Alcocer, las propiedades a ser ofrecidas en farmouts en la región del Cinturón Plegado Perdido tienen importantes reservas de crudo ligero y las de la Cordillera Mexicana de gas seco y húmedo.
Sin embargo, para que los bloques de gas sean producidos necesitan de precios domésticos de gas natural sobre 4 dólares por millón de BTU y un régimen fiscal atractivo para que sean desarrollados de manera exitosa.
El gas producido en estos farmouts sería utilizado por la compañía estatal petrolera en sus operaciones de refinación al sur del país como Cangrejera y Coatzacoalcos, dijo Escalera Alcocer.
El farmout de Trion y la asociación de Pemex con Chevron e Inpex Corporation en la Ronda 1.4 de contratos de producción y licitación en diciembre fue un campo de aprendizaje para la estatal.
“Esta experiencia nos permitió aprender cómo trabajar en conjunto en un ambiente internacional”, dijo Escalera Alcocer.
La mitad de 56,000 millones de barriles de recursos prospectivos convencionales se encuentran en aguas profundas, expuso Juan Carlos Zepeda Molina, presidente comisionado de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), en el Energy Mexico Congress.
De todos los recursos prospectivos en aguas profundas en México, 6,390 millones, o 23% de los recursos totales, fueron asignados a Pemex en la Ronda Cero; 4,170 millones, o 15%, fueron subastados en la Ronda 1.4; 10,840 millones, o 39%, van a ser licitados por la CNH en los próximos dos años, dejando 6,390 millones para ser licitados en la próxima década.
De acuerdo con Zepeda Molina, los precios del desarrollo de proyectos de aguas profundas se han vuelto más competitivos. Refiriéndose a un estudio de la consultora Wood Mackenzie, agregó que los precios de perforación en aguas profundas han disminuido 27.7% el último año.
Basado en los precios de proyectos licitados en diciembre, el presidente comisionado dijo que los costos de producir un barril de petróleo en aguas profundas mexicanas incluyendo costos de exploración eran de 37.16 pesos.
En la industria petrolera, un farm-out es una asociación estratégica entre una empresa que tiene derechos de explotación y producción con un tercero (o varios) a quien le transfieren (migran) algunos de esos derechos. Estos acuerdos puede tener diferentes metas según sea el contrato. De parte del dueño del bloque se puede pretender: arrendar el uso del subsuelo para incrementar producción, capitalizarse, compartir riesgos, obtener información geológica, obtener acceso a tecnología, liberar capacidad operativa y reducir requerimientos de capital, o simplemente perforar pozos[1]. De parte del arrendatario, el objetivo es acceder al mercado del arrendador y/ó asegurar reservas.
En el caso especifico de Pemex, la Reforma Energética permite que la paraestatal haga uso de estos mecanismos, algo que ya se ha realizado en el pasado. Por ejemplo, en el área de Chicontepec donde se tiene que perforar continuamente para mantener niveles de producción dada su baja porosidad y permeabilidad, Pemex ha contratado a terceros como Schlumberger y Halliburton para que ellos también perforen pozos. De esta manera, Pemex continua perforando para mantener los niveles de producción y al incluir terceros se puede aumentar la producción total del campo, como se observa en la gráfica.