La minera brasileña Vale está en pleno cambio, tras años de estancamiento. Luego de vender la parte de fertilizantes a la norteamericana Mosaic por 2.500 millones de dólares y de encarar trabajos de consultoría para plantear la reingeniería de Potasio Río Colorado, los primero proveedores en cotizar han sido empresas neuquinas.
Vale tuvo un "ultimátum" del gobierno de Alfredo Cornejo, hace apenas un mes, cuando el gobernador firmó un decreto en el que se le otorgaba un plazo de 30 días a la empresa para reformar el proyecto Potasio Río Colorado.
La minera Vale "tendrá un plazo de 30 días para contratar una consultora internacional e iniciar un estudio de Pre-Factibilidad, denominado FEL2, que plantee una reestructuración del proyecto para reducir su capacidad de producción de 4 millones de toneladas al año a 1.400.000 tn/año, y de esta manera volver al proyecto factible en las actuales condiciones de mercado", indicó el Gobierno de Mendoza en su momento.
A esta altura de enero, se sabe que Vale habría avanzado con esa exigencia contratando a una consultora internacional -Hatch- para cumplir con el decreto del Gobernador y continuar en la búsqueda de un inversor que lleve adelante la mina de sales de potasio.
Pero esto no es todo. Según el diario digital Portal Minero, Vale está haciendo un recorrido sobre la que sería la vía ferroviaria para sacar las sales por el Atlántico. En algún momento se habló de utilizar camiones, pero ese proyecto se desestimó.
La traza no es de menor importancia para Mendoza, ya que de realizarse, el tren uniría la zona de explotación con Punta del Agua en San Rafael y General Alvear, en el sur provincial. Vías que continúan la traza de la ruta 188 y terminan en el puerto de Bahía Blanca, en Buenos Aires.
No obstante, el punto de conflicto se conoció este miércoles cuando proveedores mendocinos de Vale Potasio Río Colorado tuvieron información que la empresa brasileña no volvería a contratar servicios en Mendoza y, por el contrario, estaría contratando a nuevos proveedores de Neuquén.
La venta de la producción de fertilizantes de Vale a Mosaic, que es el mayor productor mundial de sales de potasio y tiene operaciones en China y Brasil además de Estados Unidos, no incluye hasta el momento la mina que Vale tiene en Malargüe. De acuerdo con la presentación, Vale mantendrá el control de su producción de nitrógeno y activos de fertilizantes de fosfato en la ciudad de Cubatao, en el sureste de Brasil, pero espera vender esto también en 2017 dentro de su plan de reducción de pasivos.
Según la información dada a conocer en diciembre, Vale también estaba en conversaciones con la noruega Yara International para vender algunos de sus activos de fertilizantes.
Mosaic adquirirá el resto de los activos de fosfato de Vale en Brasil, la participación de Vale en la mina de Bayóvar del Perú y el proyecto de potasio Kronau de Canadá, pero la empresa norteamericana aún no había decidido si incluir el proyecto de Potasio Río Colorado en Argentina en la operación. Hay que recordar que Vale no terminó de poner en marcha la mina en Mendoza y hoy el proyecto está a medio construir.
La venta de activos por parte de Vale tiene que ver con el objetivo de reducción de deuda de 10 mil millones de dólares, durante este 2017. Vale es la mayor productora de mineral de hierro del mundo y los precios bajos, en el mercado internacional del hierro y níquel, han impactado de lleno en su rentabilidad.
Los principales accionistas de Vale SA están cerca de aprobar un plan para convertir al principal productor de mineral de hierro del mundo en una compañía con propiedad accionaria dispersa dentro de seis años, dijeron dos personas familiarizadas con las discusiones.
Bradespar SA, Mitsui & Co y varios fondos de pensiones brasileños están negociando un nuevo acuerdo de accionistas que daría a Vale una propiedad accionaria dispersa -donde ningún accionista principal controla las decisiones en la empresa- una vez que el pacto expire en un plazo de seis años, según las fuentes, que pidieron el anonimato.
Las negociaciones podrían concluir a finales de febrero o principios de marzo, dijeron las fuentes.
El acuerdo actual de accionistas de 20 años expira en abril. El holding Bradespar y el fondo de pensiones Previ propusieron la conversión de los diferentes tipos de acciones de Vale en una sola común como el primer paso hacia la transformación de la minera en una firma con propiedad accionaria dispersa, dijo que la primera persona.
Al cambiar radicalmente la estructura corporativa de Vale, Bradespar y Previ quieren aumentar el atractivo de la compañía para los inversores.
El plan podría resultar en una mayor transparencia y una intromisión limitada del Gobierno, un aspecto que lastró a las acciones de Vale durante los cinco años de gobierno de la presidenta Dilma Rousseff que concluyeron con su juicio político el año pasado.
"La situación es ventajosa para el bloque de control, ya que los accionistas reconocen que hay mucho valor que podría ser capturado con esta iniciativa", dijo la primera persona.
