Los precios del oro bajaron este viernes, apartándose de máximos de siete semanas pues el dólar recuperó algo de fuelle, aunque la actual incertidumbre política sigue respaldando la demanda del metal precioso, considerado refugio seguro.
En lo relativo a la división Comex del New York Mercantile Exchange, el oro para entrega en febrero se negoció en 1.196,15 USD por onza troy, dejándose un 0,31%, apartándose de los máximos de siete semanas registrados el jueves en 1.204,30 USD.
El contrato de febrero cerró la jornada del jueves con un retroceso del 0,22% hasta situarse en 1.130,70 USD por onza troy.
Era posible que los futuros encontraran un soporte en 1.176,50 USD por onza troy, mínimos del miércoles, y una resistencia en 1.204,30 USD por onza troy, máximos del jueves.
El dólar encontró sin embargo encontró cierto respaldo después de que Janet Yellen anunciara que la economía va bien y que no se enfrenta a ningún obstáculo importante a corto plazo, pues el mercado laboral parece robusto.
Yellen se dirigió a los educadores en el ayuntamiento de Washington.
La fortaleza del dólar suele lastrar al oro, pues reduce el atractivo del metal como activo alternativo y encarece las materias primas denominadas en dólares de cara a titulares de otras divisas.
Sin embargo, el billete verde sigue sometido a una gran presión después de que el presidente electo de Estados Unidos Donald Trump no ofreciera detalle alguno sobre sus promesas de impulsar el gasto fiscal y bajar los impuestos en su primera rueda de prensa tras las elecciones este miércoles.
El dólar se vio también zarandeado después de que el presidente de la Reserva Federal de San Luis, James Bullard, afirmara que la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos no ha llevado todavía la economía estadounidense a un nuevo "régimen" que requiere un rápido aumento de los tipos de interés, que puede que se mantengan en niveles "bastante bajos" al menos a lo largo de 2017.
Bullard afirmó también que “los efectos de las políticas de la nueva Administración no podrán comprobarse hasta 2018-2019”.
Por otra parte, los futuros de la plata del Comex para entrega en marzo se situaron en 16,748 USD por onza troy, con un retroceso del 0,46% mientras que los futuros del cobrese apuntó un alza del 0,8% o 1,9 centavos y ha registrado máximos de un mes en 2,630 USD por libra.
Desde el portal de inversión se han cerrado las posiciones abiertas en este metal precioso con unas ganancias en torno al 9%. Algo que ha cumplido con el guion establecido con apenas unas semanas en las que se efectuó el cierre de la plata y se indicó que cualquier rebote del oro iba a ser aprovechado para recoger beneficios.
En concreto, cuando se cerró la estrategia sobre la plata, Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, advirtió de la intención de cerrar el oro "pero había que esperar a que hubiese un rebote". La última gran caída del oro "profundizó por debajo de los niveles máximos de descenso que hacían pensar que era una simple corrección".
Pues bien, ese rebote acaba de tener lugar y, desde los mínimos a los que cedió el pasado mes de diciembre, se anota un alza de cerca del 6,5%. Sólo en lo que llevamos de 2017, el metal precioso ha logrado acumular un alza de más del 4,3%. Pese a ello, desde los altos del pasado ejercicio ha cedido un 12,1%.
El dólar ha sido el protagonista, ya que su caída es el motor que ha dado alas en las últimas jornadas al oro, hasta el punto de alcanzar niveles que no visitaba desde noviembre. Al menos así lo estiman desde ETF Securities que indican que "el precio del oro subió después de que el dólar estadounidense se debilitó".
Un alza que vino apoyada por las actas de la Reserva Federal ya que, según indican desde la firma de inversión, aunque son "optimistas sobre las perspectivas de crecimiento de la economía estadounidense, y sobre la subida de los tipos, la Fed sigue viendo riesgos a esta perspectiva, con respecto a la política fiscal y a las consecuencias negativas de un dólar más fuerte".
Aun así, las perspectiva que manejan la gran mayoría de las casas de análisis es la de un billete verde más fuerte este ejercicio. En concreto, JPMorgan señala que "el dólar estadounidense será la moneda con mayor rendimiento en 2017". En este sentido, Ebury esperan que el dólar "rompa la frontera de la paridad frente al euro durante el primer trimestre de 2017 y es evidente que el mercado cada vez se acerca más a esta posibilidad".
Algo que encaja con el mensaje de la entidad que preside Janet Yellen, que indicó que eran muy probables tres subidas adicionales de tipos en 2017. Unas decisiones que vendrían después del incremento efectuado en su último encuentro de 2016, justo un año después de hacerlo por primera vez en casi una década en 2015. "Debido a una apreciación del dólar y el aumento de los tipos de interés", señalan desde Citi, el oro seguirá a la baja. Pese a ello, la entidad estadounidense matiza que de no ser por estas circunstancias, que afectan moviendo a la baja su precio, el metal precioso sería "más alcista por la incertidumbre política y económica global", concluyen.
Los acontecimientos políticos fueron, precisamente, los encargados de hacer que el oro se anotara importantes alzas de hasta el 27,2% durante buena parte del pasado ejercicio. De hecho, fue en las jornadas posteriores a que Reino Unido optase mayoritariamente por abandonar la Unión Europea cuando el metal marcó máximos.
Cumpliendo con el guion, Joan Cabrero, jede de estrategia de Ecotrader, optó ayer por reducir el peso de la bolsa en ocho puntos, hasta el 77%, desde su máximo histórico en el 85%. Esto se realizó con el cierre del Dax, Applus, Aperam, Peugeot y Vinci. También se incrementó en dos puntos la liquidez, hasta el 22%, con la toma de beneficios del 28,4% del cruce dólar-corona danesa.
