El anuncio fue realizado hoy por el presidente de la petrolera, Pedro Parente, quien afirmo que todas las firmas extranjeras convocadas están radicadas en Brasil.
Las obras de la unidad de procesamiento de gas natural del Complejo Petroquímico Río de Janeiro (COMPERJ) están detenidas desde 2015, cuando la empresa Queiroz Galvao, investigada en la operación Lava Jato por corrupción, rescindió el contrato al considerar que el valor firmado con Petrobras no era suficiente para cubrir los costos.
Parente, bajo cuya gestión en el gobierno del presidente Michel Temer Petrobras inició un proceso de desinversión y venta de activos y subsidiarias, decidió no invitar a la nueva licitación a empresas nacionales.
"Si estas empresas no estuvieran impedidas, serían invitadas a participar; ahora existe un proceso en el cual deberán comenzar a habilitarse nuevamente", dijo el ejecutivo en rueda de prensa.
El funcionario negó estar favoreciendo a las empresas extranjeras con los contratos en Petrobras, sobre todo luego de que el Congreso aprobara el proyecto del canciller José Serra de retirar a la estatal brasileña de la obligación de participar con 30% en todos los yacimientos submarinos, lo cual abrió el juego a los actores extranjeros.
"La empresa extranjera está instalada en Brasil, produce en Brasil, emplea en Brasil y no las consideramos extranjeras", dijo Parente, quien, al ser consultado sobre el envío de las ganancias a sus casas matrices, respondió: "Eso es una cuestión de política interna de cada compañía".
El Comperj fue uno de los polos productivos de la cadena petrolera que más sufrió con el desempleo, luego de que las empresa investigadas por corrupción fueran sancionadas con el cese de los contratos.
Parente celebró también el récord histórico de la producción en la región submarina de los campos de hidrocarburos de "pre-sal", frente a las costas de Río de Janeiro y San Pablo, alcanzado en 2016, con 1,02 millón de barriles diarios, 33% superior a 2015.
El escándalo de corrupción involucró directamente a ex directores de la petrolera que confesaron haber cobrado sobornos para permitir la formación de cartel y la victoria en licitaciones de compañías de ingeniería brasileñas.
La más grande de las empresas, Odebrecht, está realizando un acuerdo de delación premiada de 77 ejecutivos y ex ejecutivos en Brasil, Estados Unidos y Suiza a cambio de volver a operar.
La decisión de Petrobras para reanudar las obras para la Unidad de Procesamiento de Gas Natural (UPGN) en el Complejo Petroquímico de Río de Janeiro (Comperj), en Itaboraí fue definido por el nuevo alcalde del municipio, Sadinoel Souza (PMB). Las estimaciones teniendo en cuenta los datos de la industria y el ayuntamiento, indican que las obras deben generar unos 23.300 puestos de trabajo, teniendo en cuenta los empleos directos, efecto ingreso indirecto e inducido (el impacto en la cadena de servicios).
De acuerdo con el alcalde de Itaboraí generará 5.000 puestos de trabajo directos en las obras de la región.
En los cálculos del presidente de la Asociación Brasileña de Máquinas y Equipos (Abimaq), José Velloso, el sector de la maquinaria tendrá un impacto total de 18.300 puestos de trabajo, teniendo en cuenta 2.300 puestos de trabajo en las máquinas de fabricación directos, 5.200 en la producción de insumos para estos dispositivos y 10.800 en servicios generados para cumplir con el proyecto.
El efecto positivo puede ser mayor. Según fuentes cercanas al estado, sino que también se construirá un centro de utilidad, esencial para proporcionar las condiciones de infraestructura para UPGN como el agua y la energía. Petrobras ya ha señalado que la realización de UPGN no significa una reanudación de Comperj.
El alcalde ha destacado que Itaboraí fue uno de los municipios más afectados por el abandono del proyecto, que está siendo investigado por corrupción en la Operación lava-Jato. Actualmente, la ciudad cuenta con tres mil habitaciones vacías comerciales, edificios y proyectos abandonados.
El economista y profesor de la UFRJ Mauro Osorio dice que el proyecto nació sobrestimado, con las proyecciones iniciales de la creación de 200.000 puestos de trabajo. A pesar de los signos favorables, economista critica la ausencia de empresas brasileñas en la invitación a licitar. De acuerdo con Petrobras, algunas empresas se quedaron fuera debido a las restricciones a la participación en licitaciones, debido a la lava-Jato.
Además de puestos de trabajo, la reanudación de las señales de inversión en el mercado de que el gobierno está poniendo la casa en orden, evalúa José Márcio Camargo, economista de la PUC-Rio.