Finalmente se hicieron públicos los resultados de la esperada encuesta CEP. El estudio de opinión -que según informaron sus realizadores tuvo su trabajo de campo entre el 25 de noviembre y el 23 de diciembre- arrojó una serie de elementos analizables, pero sin dudas el foco de atención estuvo marcado por la pregunta clave en la carrera para llegar a La Moneda: ¿Quién le gustaría a usted que fuera la o el próximo Presidente de Chile?
Si bien hay aspirantes a candidatos que aseguraron que las cifras no alterarán su aventura presidencial, lo cierto es que en el mundo político los resultados se analizaron de inmediato y desencadenarán varias decisiones.
Los datos concretos arrojaron que el ex Presidente Sebastián Piñera es uno de los ganadores. No sólo porque se ubicó en primer lugar de las preferencias para ser el próximo mandatario con un 20%, sino que además porque incrementó el respaldo en 6 puntos porcentuales respecto al sondeo anterior de julio y agosto de 2016.
De esta manera, se confirmó la tendencia que han marcado otros sondeos como Cadem, Cerc-Mori y Adimark. Esta última, ayer entregó sus resultados de diciembre y también le otorgan el primer lugar al ex jefe de Estado, con un 29% de las preferencias espontáneas.
Pero no sólo eso. Además Piñera obtiene un 27% frente a la pregunta sobre, “¿quién cree usted que será el próximo Presidente de Chile?”, también liderando la encuesta.
Con todo, desde el círculo del ex mandatario las cifras son vistas con optimismo, sobre todo, cuando Piñera logró sortear de buena forma, dicen, el chaparrón que se generó luego que se le involucrara con el Caso Exalmar y las inversiones de Bancard en Perú.
Sin embargo, el problema que arroja para Piñera el resultado de la CEP es que en la evaluación ciudadana su nivel de rechazo (-37%), por primera vez es superior a su aprobación (34%), por lo que su margen para crecer, según el sondeo, sería mínimo.
Por otra parte, Alejandro Guillier es otro de los grandes beneficiados con los números que arrojó el sondeo. El senador independiente se consolidó como la carta más competitiva de la Nueva Mayoría logrando un 14% de preferencias ante la pregunta: “¿quién le gustaría a usted que fuera el próximo Presidente de Chile”, logrando aumentar en 13 puntos en relación al sondeo anterior.
Además, el legislador ratifica sus opciones al aparecer con un 13% (en el sondeo anterior no marcaba) sobre quienes creen que será el próximo mandatario.
No obstante, uno de los puntos claves del análisis que hacen en el entorno del legislador es la relevancia de posicionarse en el primer lugar de los políticos mejor evaluados (47) y su bajo rechazo (-16) , lo que sumado a su nivel de conocimiento (75) le permitiría seguir creciendo.
A quien los números del estudio no dejaron en buen pie es al ex Presidente Ricardo Lagos. El ex manadatario sólo obtuvo un 5% de las preferencias presidenciales, logrando exactamente la misma cifra que la entrega anterior de la encuesta, esto a pesar que su campaña está completamente desplegada.
Lo mismo ocurre con Lagos cuando se le pregunta a los encuestados sobre quién será el próximo mandatario. Ahí Lagos obtiene la misma cifra que hace cuatro meses un 5%.
De esta manera, el Presidente no se consolida como una carta importante para competir con Piñera, lo que ocurre justo antes de que el PPD lo proclame y en medio de las definiciones presidenciales del PS. Además, a esto se suma que fue el personaje político que tuvo la mayor caída en la evalución positiva, bajando 12 puntos en relación al sondeo anterior obteniendo sólo un 23% de respaldo mientras que quienes tienen una evaluación negativa se empinan en el -45. ¿Su margen para crecer? Si uno mira los números, hoy no es mucho.
Los otros derrotados tras conocer los resultados de la CEP, resultaron ser aquellos precandidatos presidenciales que aspiran a competir, pero que marcaron cifras muy pobres. Ahí se encuentran nombres como Manuel José Ossandón (2%), José Miguel Insulza (2%) y Marco Enríquez-Ominami (1%), y los otros que ni siquiera alcanzaron la menciones necesarias para lograr un punto.
Otro de los factores importantes de la evaluación entregada ayer es que, pese a que hubo una disminución entre quienes “no saben o no contestan” cuál es su preferencia presidencial , aún existe un 49% de indecisos.
A lo anterior se suman elementos como que sólo un 46% asegura que con seguridad irá a votar en las elecciones presidenciales de noviembre, aunque siempre en estos sondeos esa cifra se ve inflada respecto a la realidad.
¿Conclusión? Las elección presidencial de 2017 aún resulta abierta, aunque ya empiezan a aparecer algunas certezas.
La entidad advirtió que los resultados de las elecciones podrían generar protestas que afecten la producción de cobre.
Una visión menos optimista que sus pares expuso ayer el banco de inversión británico Barclays respecto al futuro de Chile tras las elecciones presidenciales de 2017. La entidad emitió un informe en el que advierte que Chile se podría transformar en un “cisne negro” -es decir, un agente que genere eventos disruptivos inesperados- en el mercado de los commodities durante este año.
Según indicó el banco en su informe, uno de los hechos que podría interferir en el comportamiento del cobre durante este año son las elecciones presidenciales que se realizarán en Chile en noviembre.
La entidad proyectó que “los manifestantes indignados con los resultados electorales podrían ocupar las vías de ferrocarriles, puertos y otro tipo de infraestructura crítica, afectando toda la producción de Chile de 5.700 toneladas métricas”.
El texto señala que pese a que el riesgo de una turbulencia política en Chile es bajo, el peligro de disturbios y protestas políticas que afecten la producción del cobre es “alta y real”.
“En 2016, las movilizaciones de los trabajadores en Perú, Chile e Indonesia generaron alteraciones en el suministro de varios de cientos de miles de toneladas de suministro planificadas de cobre”, detalló Barclays.
Con esto, el banco de inversiones se transforma en uno de los primeros del sector en no otorgar una perspectiva positiva al país de cara a las próximas elecciones presidenciales.
Consultado por “El Mercurio”, el autor del informe, Dane Davis, afirmó que el objetivo del texto fue identificar posibles escenarios de riesgo que podrían afectar al mercado de los commodities y que, en el caso de Chile, “la principal fuente de interrupciones continúa siendo las renegociaciones laborales”. Sin embargo, también reconoció que recientemente “los trabajadores de Chuquicamata alcanzaron un nuevo contrato a largo plazo, mientras que los de Escondida tienen previsto un nuevo contrato para fines del primer trimestre de 2017”.
