Debido a un incendio forestal que afecta a la localidad de Bucalemu, en la región de Valparaíso, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) decidió solicitar la evacuación de forma preventiva a los habitantes de 20 casas que se encuentran en los alrededores.
De acuerdo a la información publicada en Radio Bío Bío, se decidió proceder a la evacuación debido al humo provocado por el siniestro que afecta a más de 2.500 hectáreas de la comunca de Santo Domingo.
Los vecinos de los sectores de Las Salinas de El Convento son quienes debieron abandonar sus casas, ya que las llamas aun no están bajo control y siguen avanzado hacia la Reserva Nacional El Yali.
El incendio mantiene en Alerta Roja a la zona en la que se encuentran trabajando siete brigadas de Conaf, otras siete del Ejército y efectivos de Bomberos de Valparaíso
La Oficina Nacional de Emergencias del Ministerio del Interior (Onemi) informó que se declaró alerta roja para la comuna producto del siniestro, que ya ha consumido al menos 10 hectáreas de pastizales.
El incendio se desarrolla cercano a sectores poblados, según Onemi.
Bomberos de la comuna, helicópteros y un avión dromader de CONAF trabajan combatiendo las llamas.
El fiscal de Valparaíso, Juan Ignacio Sepúlveda, detalló que las primeras indagatorias se realizaron en el Fundo Quebrada Verde. Allí, de acuerdo a La Tercera, se conversó con los encargados del recinto, de propiedad fiscal, que según se explicó, se encuentra en concesión al Consejo de Rectores.
Desde el CRUCh informaron que hasta las 18 horas de ayer no habían sido notificados de que el incendio hubiera comenzado en el terreno que administran, asimismo que colaborarán con la investigación. Además, apuntaron a que se trata de un fundo propiedad de Fonasa, que es utilizado en comodato por las universidades del CRUCh asentadas en Valparaíso.
“Presumiblemente se habría ocasionado en este sector, pero no descartamos otro foco. Hay un horno, pero todavía no logramos relacionarlo con el incendio. Hasta ahora se están viendo todas las hipótesis, tanto de incendio intencional como un caso fortuito, indicó el persecutor”.
Además, el persecutor explicó que están viendo los vientos, el clima, entrevistando testigos, y a todos los cercanos, para situar los horarios del siniestro.
El subprefecto de la Bidema Metropolitana, Marco Fierro, manifestó que “tenemos acotado el lugar y ahora estamos trabajando con los vecinos para saber el momento exacto en que se produjo. Según la información que maneja bomberos, ellos fueron comunicados a las 15.06 y demoraron 15 minutos en llegar junto a Conaf”.
El mismo subprefecto afirma que “de acuerdo a la información que hemos levantado, hay 99% de posibilidades de intervención humana”.
¿Dónde empezó el fuego? En unos matorrales. En un predio de eucaliptus y de ahí a las quebradas.
El comandante de Bomberos de la ciudad, Rodrigo Romo, dijo que el incendio tuvo su origen en el fundo Santa Rosa, en el paisaje boscoso que une a Laguna Verde con Playa Ancha.
Entonces la gran hoguera comenzó a saltar de quebrada en quebrada, de cerro en cerro, hasta alcanzar las casas de Montedónico y Puertas Negras en el sector poniente de Valparaíso.
El bombero Juan Carlos Espinoza Avaria, de la décima sexta compañía de Valparaíso, se encontraba en ese último lugar. “Estaba combatiendo el fuego de otra casa y viendo la mía arder”, contó a radio Biobío.
“En ese momento no podía quebrarme, tenía que seguir trabajando”, dijo el voluntario, quien, a pesar de perder su hogar, fue en ayuda de sus vecinos que también se vieron afectados por las llamas.
“Trabajo en la playa, soy salvavidas, y vi la fumarola desde Portales mirando hacia acá”, detalló el bombero. “Nunca pensé que iba a ser acá, quedé sin nada”, relató quien se transformaría en protagonista de una de las imágenes más compartidas del siniestro, donde aparece con su traje de voluntario abrazando a su padre.
Allá arriba es complicado llegar con agua. Las calles del puerto son estrechas y empinadas. Además, en esos márgenes de la ciudad la gente comenzó a construir sin mayor control, por lo que todavía hay sectores ajenos a la red de grifos.
Conaf y cuarenta y nueve unidades de Bomberos de la región combatieron las llamas con camiones aljibes, helicópteros y aeronaves que llegaron tarde por encontrarse en otros incendios. Varios minutos antes, a las tres de la tarde, el viento dispersaba la primera pira hasta convertirla en una enorme columna de humo que se vio desde el espacio exterior.
Antes de las seis de la tarde, el reporte de Meteorología era desalentador: 34 grados a la sombra y vientos de hasta 60 kilómetros por hora; o sea, las condiciones ideales para propagar el fuego.
Por su lado, Bomberos reportó una baja en la presión del agua y Chilquinta y Litoral suspendieron el suministro eléctrico afectando a cientos de hogares.
Cuando los medios regionales informaron del siniestro y llamaron a despejar las vías principales —para facilitar el tránsito de los vehículos de emergencia—, después de las siete de la tarde, UCV televisión, el canal de la universidad más importante de Valparaíso, pasaba la película ochentera ¿Y dónde está el policía?.
En el Polideportivo de Playa Ancha, el alcalde Jorge Sharp montó uno de los tres albergues que reunieron a más de 68 familias desplazadas por las llamas, mientras los militares trasladaban a los refugiados y Onemi repartía colchones y frazadas.
El subsecretario Aleuy dijo que hay 100 casas afectadas y que se evacuaron más de 400 personas. Al mismo tiempo, el incendio dejaba hasta último aviso 19 lesionados, varios de ellos con problemas respiratorios y contusiones, y una superficie de 40 hectáreas consumidas por el fuego, según el último boletín de la Onemi.
A las once de las noche del lunes, el alcalde Sharp citaba a Bomberos en su cuenta de Twitter para informar que el incendio estaba controlado y en proceso de extinción.
En abril de 2014, el incendio que destruyó 2.900 casas en Valparaíso no solo evidenció las dificultades que enfrentan los equipos de emergencia a la hora de combatir los incendios forestales; también subrayó la necesidad de un plan maestro de emergencias en la comuna.
Según especialistas, las quebradas se han transformado en depósitos clandestinos de basura que sirven de combustible para las llamas que escalan los cerros hasta donde están las casas, que a su vez se siguen construyendo sin criterios de planificación.
“Nosotros no tenemos cómo prevenir que las personas boten basura en las quebradas”, dijo anoche el subsecretario Aleuy.
“Los municipios deben incluir en sus planos reguladores dónde se debe construir y dónde no”, añadió.
“Ya tuvimos una catástrofe tres años atrás, no podemos seguir esperando”, dijo por su lado el alcalde Sharp, quien llamó al gobierno a elaborar un plan maestro de emergencias para Valparaíso.
Entre sus puntos, Sharp detalló que planea reforestar la zona. “Lo que han hecho los eucaliptus es básicamente transformar el ecosistema de los sectores altos de la ciudad haciéndolo seco y no húmedo como es históricamente. Lo que tenemos que hacer es reforestar con especies nativas para prevenir incendios”, explicó ayer entre el ulular de las sirenas.
